Cuando Chávez fustigaba a Wall Street y alababa al movimiento anticapitalista
De contradicciones está hecho el chavismo. El 15 de octubre de 2011, en pleno consejo de ministros, el presidente Hugo Chávez saludó el llamado movimiento de los indignados Ocupa Wall Street, que estalló aquel otoño en pleno distrito financiero de Nueva York contra la desigualdad social, la avaricia y la corrupción que genera el sistema capitalista en el mundo.
El mandatario venezolano aprovechó para fustigar al capitalismo salvaje como causante de la crisis de Wall Street de 2008-2011. “Son pequeños grupos, el estado burgués, la corrupción, la represión, el enriquecimiento descarado de una minoría y el empobrecimiento de las mayorías, incluyendo las clases medias”.
Seis años después, el gobierno de su heredero político, Nicolás Maduro, se olvida de la histórica distancia del chavismo con el sistema capitalista. Vende a Goldman Sachs, banco emblema de Wall Street y del capitalismo salvaje, 2.800 millones de la deuda de la estatal petrolera PDVSA a un precio 31 % menor a su valor, es decir, $800 millones. La operación ha sido cuestionada por endeudar al país a futuro y “darle oxigeno”al régimen venezolano cuyas políticas han generado pobreza, corrupción, desigualdad, todo el coctel de males que el chavismo ha adjudicado al capitalismo.