#MonitorDeVíctimas | Atribuyen a la guerrilla autoría de tres homicidios perpetrados en Táchira - Runrun
#MonitorDeVíctimas | Atribuyen a la guerrilla autoría de tres homicidios perpetrados en Táchira
Los crímenes ocurrieron entre el 6 y 8 de mayo. Las víctimas, que no estaban relacionadas entre sí, fueron dos hombres y una mujer

Tal como ocurrió la primera semana de marzo, en la que se le endosó la responsabilidad de tres homicidios a uno de los grupos guerrilleros que operan en la zona sur del estado Táchira, nuevamente su posible participación salió a relucir en otros tres asesinatos, perpetrados en igual número de municipios de la entidad tachirense durante los días 6, 7 y 8 de mayo.

El perfil de las víctimas fatales es completamente diferente uno de otro, en todo sentido. Se trató de una mujer y dos hombres que, en casos aislados y circunstancias muy distintas, fueron asesinados a tiros.

La primera víctima fue un joven de 19 años, identificado como Wilson Alfonzo Daza Quintero, quien se desempeñaba como “trochero” y residía en el barrio Ocumare, en la fronteriza población de San Antonio del Táchira, municipio Bolívar.

El cadáver del muchacho fue localizado en avanzado estado de descomposición el 6 de mayo en aguas del río Táchira, municipio Ureña. Estaba debajo del puente internacional Francisco de Paula Santander.     

La primera impresión fue que Daza había fallecido por inmersión, pero la autopsia que se le practicó determinó que lo asesinaron de un balazo en la cabeza. Una vez fue reconocido e identificado por su familia, se supo que para el día del hallazgo llevaba 12 días desaparecido.

Fuentes policiales consultadas refirieron que presuntamente el muchacho había sido reclutado por la guerrilla, que lo encargó del cobro de algunas de las tantas trochas existentes en la frontera tachirense con Colombia.      

Según esta misma hipótesis, con el pasar del tiempo, tras achacarle a Daza la pérdida de dinero en dichos cobros, el jefe guerrillero de la zona, conocido con el alias de “Nula”, ordenó su ejecución.  Todo indica que la familia del joven estaba ajena a la situación.

Plagiada y asesinada

En el segundo caso, ocurrido el 7 de mayo, la víctima fue una ama de casa, madre de tres niños de 10, 4 y 3 años de edad. El hecho ocurrió en pleno casco central de San Juan de Colón, municipio Ayacucho.

La mujer fue identificada como Marielys del Valle Alviárez Morales y al parecer contra ella hubo amenazas de muerte que la obligaron a dejar el país; sin embargo, había regresado recientemente para finiquitar una serie de diligencias legales, tras la muerte de su esposo, ocurrido un año antes.

De acuerdo con versiones extraoficiales, al fallecido lo señalaban de encabezar un grupo paramilitar que supuestamente controlaba las actividades ilegales en el mencionado municipio. En su momento se presumió que su muerte también había sido obra de la guerrilla.  

El hecho es que ese sábado 7 de mayo en la tarde, mientras Alviárez se encontraba en una peluquería del casco central de Colón, arreglándose las cejas, un grupo de hombres armados irrumpió en el local y se la llevó por la fuerza. La hicieron subir a una camioneta negra, sin que nadie pudiera hacer nada por evitarlo.

De la mujer no tuvieron más información sino hasta unas cuatro horas después. Cerca de las 9:00 de la noche hallaron su cadáver abaleado en plena vía pública. Tras el hecho se corrió la voz de que la guerrilla había cumplido con las amenazas en su contra.

En Táchira es por todos conocida la rivalidad a muerte existente entre guerrilleros y  paramilitares, de allí que se presumió que la joven, por su relación con el esposo asesinado, fue víctima de represalias por parte del Ejército de Liberación Nacional (ELN), como consecuencia de no haber acatado las órdenes de irse y no regresar a la entidad.          

Acribillaron a “Cachú”

El tercer caso fue el de Oscar Yersson Rangel Tapia, de 38 años de edad. Era abogado, criminalista y secretario del Partido Comunista de Venezuela (PCV) en el municipio Bolívar, estado Táchira.

“Cachú”, como le decían, había sido conocido desde los últimos 3 años por ser el presunto líder de los colectivos que infundieron terror en los municipios Bolívar y Ureña, a quienes tuvieran una postura política diferente a la del gobierno nacional.

De acuerdo con una fuente policial, el hombre se había distanciado del chavismo y por ende del ELN, grupo guerrillero que domina en la frontera tachirense. Supuestamente coqueteaba con las disidencias de las Farc. Es por ello que se presume que su muerte, ocurrida el 8 de mayo a las 2: 15 de la tarde en el casco central de San Antonio del Táchira, fue responsabilidad del ELN. 

Según las primeras versiones, Rangel se movilizaba como parrillero en una motocicleta, cuando un vehículo comenzó a perseguirlo. El conductor de la moto aceleró la marcha, perdió el control y colisionó. Quien manejaba se fracturó una pierna. “Cachú” huyó a pie.

Rangel habría intentado refugiarse en la iglesia San Antonio de Padua, pero los sicarios –sin poder precisar cuántos- lo alcanzaron y le propinaron al menos 10 balazos.  

Monitor de Víctimas - Cintillo