Waraos temen contagio masivo de COVID-19 en las comunidades del Delta - Runrun
Waraos temen contagio masivo de COVID-19 en las comunidades del Delta
320 asentamientos están en peligro 

Al menos 320 asentamientos waraos, localizados en los caños del Orinoco, están a merced de un contagio masivo ante la escasa atención sanitaria, deficiencia en los servicios básicos y la falta de medicina en la zona.

La dirigencia indígena warao teme la aparición y el contagio masivo de coronavirus en las comunidades indígenas del Delta ante la cercanía de las regiones fronterizas.

La amenaza del virus es considerada por los waraos como bomba de tiempo con consecuencias impredecibles por ser una población con mayor vulnerabilidad de contraer enfermedades contagiosas ante la fragilidad de la atención primaria, tanto en la población infantil como adulta.

Lizandro Moraleda, docente warao de la comunidad Bonoina, población indígena localizada en la parroquia Manuel Renauld del municipio Antonio Díaz del estado Delta Amacuro, describió en su cuenta de la red social Facebook la situación de vulnerabilidad que se encuentran los poblados indígenas en cuanto a la asistencia de salud en las comunidades para enfrontar a cualquier contagio como el COVID-19 “sólo contamos con la protección de Dios, la población maneja poca información, las comunidades se encuentran desprotegidas, no tenemos medicinas, no hay ambulancia fluvial, ni transporte para caso de emergencia” sostiene Moraleda.

De acuerdo al testimonio del docente warao, la falta de conocimiento e informaciones son factores que inciden negativamente en 95% en las comunidades con poblaciones indígenas “desconocemos la magnitud de la enfermedad, nos han dicho que es mortal, pero hasta allí” continua Moraleda.

Además mostró su preocupación por la presencia de enfermedades endémicas que afectan a los niños: los síntomas gripales, la diarrea, la desnutrición, los cuadros diarreicos son permanentes en las comunidades, asegura.

Además, la deficiencia en los servicios básicos, la falta de la energía eléctrica, la escasa o nula presencia de agua potable, la ausencia de redes de excretas en las comunidades convierten al pueblo indígena, con una población aproximada de 35.000 habitantes, como un sector altamente vulnerable ante la pandemia del COVID-19.

 

Kapé Kapé