¡Gracias … totales! por Francisco Ibarra Bravo
Dic 08, 2015 | Actualizado hace 8 años
¡Gracias… totales! por  Francisco Ibarra Bravo

Testigo_

 

“No sólo no hubiéramos [hecho] nada sin ustedes, sino con toda la gente que estuvo a nuestro alrededor desde el comienzo. Algunos siguen hasta hoy ¡Gracias… totales!”

La frase original es de Gustavo Cerati en su último concierto con Soda Stereo en septiembre 1997. En realidad no fue el último concierto, en 2007 Soda se reunió de nuevo para brindarnos una vez más el placer de verles tocar. Ya Cerati no está con nosotros pero nos queda su música y esta bella frase de sincero agradecimiento, frase que me permito tomar prestada.

Antes de que existiesen las excelentes salas de totalización y de conteo rápido. Antes que la oposición contase con la inmensa maquinaria electoral para votar y defender lo conquistado, ya había una incipiente pero desarticulada red de testigos electorales. Estos eran una especie olvidada, denostada por muchos de aquellos que no creían en la vía electoral. En 2006, luego del terrible error que cometimos en 2005, que a su vez  se originó en la infantil lectura hecha por la dirigencia opositora del referéndum de 2004, la red de testigos electorales era un puñado de ciudadanos por centro en el mejor de los casos. Un puñado sobre todo de mujeres que se negaban a ver morir la democracia sin dar la pelea. Los verdaderos héroes de lo que ocurrió el pasado domingo son en gran medida heroínas a las que en muchos casos no se les ha hecho justicia, tampoco es que la están esperando.

A los testigos les debe el país la posibilidad de reconstruirlo en democracia. A pesar del desánimo que ha sido siempre el autoconsuelo de los débiles. A pesar de aquellos que pretendieron decirle a país que salir de esta pesadilla era imposible electoralmente y que había que prenderle velas a los militares o a los gringos. A pesar de todo aquello los testigos siempre estuvieron ahí para dar la pelea y para perder en  2006, 2008, 2009, 2010, 2012 dos veces y otras dos en 2013; solo se ganó por los pelos en 2007. Estuvieron sin que nadie les diese nada a cambio, solo pudiendo mirar con orgullo a sus hijos dándoles la única garantía que podían entregar que no era otra que seguir luchando ¡Qué poco se podía garantizar pero qué fundamental haberlo hecho!

Ganar elecciones no es fácil. No hablo de tener un buen proyecto, buenos candidatos o incluso tener la voluntad del electorado. Para ganar elecciones se necesita una inmensa red de ciudadanos dispuestos a apoyar el proceso electoral. Estas redes en el pasado contaron con los recursos del Estado mediante la financiación de partidos. Hoy en Venezuela esto solo lo ha tenido el partido de gobierno mediante el peculado de uso y la corrupción. A la oposición se le dejó a la intemperie. Esto le ha dado un enorme mérito a la labor de los testigos y del resto de la maquinaria electoral de la oposición. En su gran mayoría han trabajado con recursos propios, sin esperar pago alguno y por convicción. Han trabajado con las uñas aguantando los cantos de sirena, algunos desde muchos kilómetros de distancia, el desánimo y sobre todo las derrotas.  La victoria del domingo es una victoria de la constancia y entrega. Hoy la oposición cuenta finalmente con una maquinaria para ganar elecciones. Esa maquinaria le ganó al oficialismo y también le ganó a un sector de la oposición, a ambos por goleada.

Hoy el país se levanta con un ánimo diferente, la tarea por delante es titánica y no estará exenta de reveses y frustraciones. El país cambió y de eso no cabe la menor duda. Estos cambios deberán sentirse tanto en la oposición como en el oficialismo. Esperemos que entre todos demos con un clima más civilizado de convivencia. No es el momento para revanchismo pero sí para la firmeza. En ese grupo de ciudadanos que han venido trabajando por un futuro mejor tenemos el mejor ejemplo de lo que necesitamos: constancia, entrega y disciplina. Vendrán tiempos mejores para todos, y en esos tiempos solo espero que se recuerde con agradecimiento a esos hombres y mujeres que estuvieron ahí para pelear cuando muchos creían que no había nada por que pelear. A ellos, y sobre todo a ellas, gracias totales.

 

@franibar10