Toda solución trae nuevos problemas por Francisco J. Quevedo
Toda solución trae nuevos problemas por Francisco J. Quevedo

Dolarización0

 

Le robamos el título a las Leyes de Murphy porque la tan necesitada y tan cacareada unificación cambiaria, y la tan amada y odiada a la vez dolarización de la economía, al resolver muchos problemas, traerían consigo nuevas complicaciones.

A quienes claman a viva voz por unificar el cambio o dolarizar la economía, debemos alertarlos. Si, para poner un ejemplo, se unificara o dolarizara al cambio implícito que ronda en estos momentos Bs. 226 p/US$, se reducirían drásticamente las utilidades de las empresas, al exigirse un consecuente ajuste en los sueldos y salarios, y al forzarse el retroceso de algunos precios que hubieren sido marcados a la tasa paralela. Habría menores ingresos para muchos, y mayores egresos para todos.

El problema es que no se trata simplemente de re-expresar los precios, presupuestos y estados financieros, dividiéndolos entre Bs. 226 p/US$, para seguir con el ejemplo, sin pensar que los trabajadores que devenguen sueldo mínimo pasarían a ganar US$ 72 mensuales, como en Haití, cabe decir, cosa que le caería al Pueblo como un balde de agua fría. Al darnos cuenta de lo pobres que somos, habría presiones ante el Estado y las empresas para ajustar los salarios hasta en un 300%, afectando sensiblemente el beneficio que arrojen, si acaso daban alguna utilidad.

Tanto los sueldos, como los honorarios profesionales, tendrían que subir, y algunos precios deberían retroceder también, de unificarse el cambio o dolarizarse la economía. Si usted pensaba que su apartamento valdría Bs. 87 millones hoy, aunque mantenga el valor en US$ 100,000, tendría que re-expresar ese precio como Bs. 22,6 millones. ¿Estáríamos dispuestos a echar para atrás? Veamos el cuadro. Una consulta odontológica, una amalgama que nos parece cara ya en Bs. 8.000, no se ve tan costosa a US$ 35, al cambio implícito. Pero compárela contra tarifas internacionales que hablan de un promedio de US$ 170, para saber si le compensa al Odontólogo sus costos y sus estudios. La disposición a reversar precios y tarifas quizás no sea tan entusiasta como la alharaca por unificar el cambio o dolarizar la economía. La tendencia bien puede ser a subirlos más bien.

 

ComparacióndePVP re-expresadovsprecios enEE.UU.

¿Pero qué pasaría si no se toman las medidas que requiere el país? Si este gobierno pateara las urnas electorales, y pretendiera reafirmar la ficción económica que hemos sufrido por 16 años, y unificara el cambio en –digamos, más bien– Bs. 50 p/US$, para decirle entonces a los trabajadores que ganan US$ 330 mensuales, y apretara el control, en lugar de flexibilizarlo, llevándonos nariceados hacia un esquema dual quizás, con una tasa fija sobre-valuada y una supuestamente libre que tendería a devaluarse como el paralelo, sencillamente agravaría los problemas, amén de la explosión social que con ello causaría.

Hacer que los precios se ajusten hacia abajo requeriría de un liderazgo y medidas que inspiren confianza, cosa que también atraería el retorno de capitales. “Quid pro quo”, sin embargo, este Gobierno no parece el indicado, ni el inclinado a lograrlo. Pero, si se producen cambios, como todo parece indicar, un gobierno sensato tomaría medidas dolorosas, primero, porque tendría a quien culpar y luego porque las voces de la izquierda quedarían enmudecidas o desterradas por el resultado electoral, y por la Caja de Pandora que éste abriría. La confianza genera esperanza. Las inversiones que se producirían abrirían a su vez un abanico de oportunidades.

El problema, a la final, son las distorsiones que ha creado el adefesio cambiario en 16 años. Volviendo al tema del dentista, Venezuela está como un paciente odontológico que se extrajo dos muelas de un mismo lado en 1999, y recurre ahora al dentista para colocarse un puente o implantes. Lamentablemente, con el pasar de los años, el resto de los dientes se le habrán corrido para rellenar el vacío, y va a necesitar ortodoncia correctiva primero para enderezar la mordida. Así mismo, la economía necesita correctivos inmediatos y urgentes, pero algunos deben aplicarse progresivamente, e irse ajustando sobre la marcha.

 

 

@qppasociados