El gobierno de Venezuela objetó el viernes las declaraciones del vicepresidente colombiano contra los venezolanos y dijo que está dispuesto a acudir a instancias internacionales en caso de una agresión contra sus connacionales en el país vecino.

En una visita al poblado fronterizo de Tibú esta semana el vicepresidente colombiano Germán Vargas Lleras expresó que las casas que se construyan en la zona y que serán entregadas de forma gratuita, deben ser para la población desplazada y no para los venezolanos.

Vargas Lleras indicó que no pueden ser entregadas “por nada del mundo a los ‘venecos’ –venezolanos-“. “No hay un solo lugar en Colombia donde se permita que personas que no sean del país, se beneficien de programas sociales”, dijo.

Caracas exigió excusas al gobierno colombiano por las expresiones, a las que consideró «xenófobas» y «discriminatorias», y advirtió que está dispuesta a elevar el caso a instancias internacionales, señaló la cancillería en un comunicado difundido el viernes.

Las relaciones entre Venezuela y Colombia han enfrentado en los últimos años algunos momentos de tensión que los gobiernos han superado por la vía del diálogo.

El presidente venezolano Nicolás Maduro acordó el mes pasado el cierre de la frontera con Colombia para combatir el contrabando de papel moneda, que luego decidió abrir progresivamente para permitir el paso de peatones. Tras la decisión de Maduro de establecer gasolineras en la frontera, Colombia decidió mantener restringido el paso de vehículos hacia Venezuela.