Imagen de niño ahogado provoca conmoción en Europa y refleja crisis migratoria
La imagen del niño kurdo-sirio Aylan Kurdi ahogado en la playa turca de Bodrum se ha convertido en un símbolo de la tragedia de los refugiados sirios que escapan de la guerra en su país e intentan llegar a Europa.
“Tenía un nombre, Aylan Kurdi. Urgencia de reaccionar. Urgencia de una movilización europea”, escribió hoy en Twitter el primer ministro de Francia, Manuel Valls, que pidió la rápida movilización europea para paliar el drama del éxodo de refugiados.
La imagen muestra al niño con una camiseta roja y pantalones cortos, boca abajo en la arena, con la cara en dirección al mar en el que se ahogó junto con otros doce refugiados cuando intentaban alcanzar la isla griega de Kos.
Entre los víctimas estaba también el hermano mayor de Aylan, Galip, de 5 años, que aparece en otra foto en la que un gendarme turco lo lleva en brazos para ser transportado a la morgue de un hospital.
También falleció la madre de ambos, Rehan, y el único miembro de la familia rescatado con vida fue el padre, Abdulá Kurdi.
La familia procedía de Kobane, símbolo de la resistencia kurda ante el grupo terrorista Estado Islámico (EI). Intentaban huir a Canadá, donde vive la tía del niño.
Doce de los 23 refugiados que dejaron Bodrum en dos barcas para llegar a Kos murieron cuando sus embarcaciones se hundieron la noche del martes.
Siete refugiados fueron rescatados y dos más llegaron a la costa en sus chalecos salvavidas. Otras dos personas siguen desaparecidas. Seis de los refugiados muertos eran niños de entre 9 meses y 11 años de edad, Aylan era uno de ellos.
En Turquía hay actualmente dos millones de refugiados sirios, entre los cuales se estima que unos dos mil intentan a diario llegar a una isla griega en barcas de plástico desde la costa egea.
Habló el padre de Aylan Kurdi
El padre del niño sirio de tres años ahogado frente a la costa turca y cuya imagen conmovió al mundo relató este jueves que sus hijos habían resbalado de sus manos al hundirse la embarcación que los llevaba a Grecia.
“Teníamos chalecos salvavidas, pero el barco se hundió porque varios se levantaron. Yo sostenía la mano de mi mujer. Pero mis hijos resbalaron de mis manos”, declaró Abdullah Kurdi a la agencia de prensa Dogan.
Doce refugiados sirios, que intentaban llegar a la isla griega de Kos, murieron en la madrugada del miércoles frente a la estación balnearia turca de Bodrum.
Kurdi es peluquero y quería darle un futuro mejor a su familia tras huir de Kobane, en ruinas después de que fuera arrasada por el extremismo islámico. Junto con su esposa, Rehan, decidió partir buscando una nueva vida, lejos de los disparos y los bombardeos.
Fueron a Damasco primero, luego cruzaron la frontera turca y llegaron a Estambul. Intentó ser aceptado en Canadá como refugiado. No tuvo suerte. Ante la negativa, pensó otra salida. Ideó la manera de atravesar los kilómetros que los separaban de Bodrum, un lugar turístico, y uno de los puntos más cercanos para cruzar a Europa.
Fue entonces que tomó la decisión de cruzar a la isla griega de Kos, partiendo desde las playas turcas. Desgraciadamente, allí mismo quedaría el cuerpo de Aylan, cuya foto ha recorrido el mundo y se ha convertido en un símbolo del drama de los inmigrantes que buscan llegar a Europa a cualquier precio.
*Con información de Infobae y EFE.