La iniciativa surgió de los padres y representantes de niños refugiados junto con la sociedad civil

En medio de la ola migratoria del pueblo warao hacia Brasil, comienzan a surgir nuevas necesidades de esta población. Cerca de 1500 niños y niñas waraos desplazados están fuera del sistema de educación formal.

Los indígenas waraos inmigrantes plantearon esta solicitud a las autoridades de educación de Brasil, en un foro chat virtual denominado la Voz del Pueblo Warao, donde los representantes indígenas realizaron un debate de la necesidad de la educación formal para sus hijos.

El líder indígena Aníbal Pérez, señala que la petición nació por iniciativa de los padres y representantes de los niños refugiados junto con la sociedad civil “el proyecto es de educación intercultural trilingüe” asegura Pérez.

Pérez asegura que en el sector de Río Grande, los niños y adolescentes waraos ven clases tres veces a la semana, de manera informal y con maestros voluntarios, destaca el warao al afirmar la necesidad de contar una escuela intercultural para los niños indígenas refugiados.

Jesús Jiménez, dirigente warao de uno de los refugios de waraos en Brasil, recordó que la educación es un derecho humano y un deber social fundamental, gratuito y obligatorio, además de ser una herramienta para las poblaciones desfavorecidas a superar la pobreza.

Los caciques de los refugios aseguran que, en algunos abrigos, el proyecto está bastante encaminado. Según la versión de los líderes, en la localidad brasilera de Manaos, los niños indígenas refugiados fueron matriculados en infraestructuras habilitadas para que los mismos docentes waraos trabajen con los niños a través de una educación intercultural trilingüe.

“Queremos que nuestros niños estudien como inmigrantes que son y se preparen para el futuro, de lo contrario, ¿Qué va pasar dentro de diez años si los niños no estudian?” destacó Jiménez.

Jiménez reflexiona que “hasta ahora los niños indígenas refugiados reciben clase en forma informal y algunos se encuentran en escuela oficial y su formación es deficiente por los profesores que dictan en su idioma de portugués” asegura.

Los representantes de los refugios indican que los datos de los niños y adolescentes en edad escolar son imprecisos y se requiere de un estudio a fondo para determinar la matrícula, pero las estimaciones dan cuenta de 1500 niños y adolescentes indígenas fuera del sistema escolar en los refugios de Brasil.