Solo un tercio de los bachilleres tiene habilidades para ingresar a la universidad
Solo un tercio de los bachilleres tiene habilidades para ingresar a la universidad

Profesores, investigadores y líderes políticos analizaron ayer la situación del sistema educativo del país

Especialistas en políticas educativas se reunieron para desentrañar qué hay detrás de los indicadores de lo que el gobierno ha llamado el “milagro educativo”, que hablan de un país que en la última década supuestamente ha alcanzado cifras récord de escolaridad. En el foroFracaso del Modelo Educativo, organizado por El Nacional y Un Nuevo Tiempo, el rector de la Universidad Metropolitana, Benjamín Scharifker, habló de los matices de la masificación de la educación. El académico aseguró que la educación, en sus distintos niveles, no cumple con las expectativas de las clases sociales más deprimidas, porque no otorga las herramientas necesarias para lograr una vida productiva.

Basado en la experiencia de la Unimet, Sharifker señaló que solo un tercio los bachilleres aspirantes a un cupo universitario ha desarrollado las competencias matemáticas y verbales necesarias para ingresar a la carrera de su preferencia: “Otro tercio tiene deficiencias bien serias en habilidades numéricas o de lenguaje, y el resto no logra desarrollar las competencias mínimas para estar a la altura de lo que se les va a pedir. En otras palabras perdieron su tiempo en la educación básica y media”.

Añadió que el sistema educativo es insostenible financieramente hablando porque reposa únicamente en el pago de la matrícula por parte del estudiantado o de un presupuesto oficial. Las instituciones no son capaces de generar recursos.  

La falta de docentes sería otra razón del fracaso del modelo educativo, de acuerdo con los panelistas. Roberto Rodríguez, investigador de la Universidad Pedagógica Experimental Libertador, explicó que para satisfacer la demanda de las 79.904 secciones que hay en las escuelas habría que contar con por lo menos 264.000 docentes especialistas. La capacidad de formación de maestros en las universidad no van al ritmo de la demanda. En los últimos 5 años en los 64 núcleos de la UPEL, apenas se han graduado 23.675 de ellos. Para materias como Física han egresado apenas 580 docentes y en inglés 19. 

Rodríguez destacó que 1.526.905 jóvenes son excluidos del sistema de educación media, a pesar de programas como “la batalla del primer año”, y de los 652.235 cargos docentes disponibles hay 140.000 interinos, profesionales sin estabilidad laboral. “Es un problema estructural, no coyuntural. Si empezáramos hoy, tendríamos que tomarnos al menos 10 años, quizás más para resolverlo”.

La falta de financiamiento de la investigación también ha contribuido con el deterioro de la educación. Tulio Ramírez, directivo del Consejo de Desarrollo Científico y Humanístico de la UCV, indicó que en el año 2005 esta casa de estudios financiaba 300 proyectos de investigación. Actualmente solo se desarrollan 100. Aseguró que la ayuda máxima para quienes deseen asistir a un congreso en el exterior es de 8.100 bolívares y que, además, se han cerrado los programas de pasantías para profesores en el extranjero.

«El ahogo económico que sufre la investigación a nivel de educación superior obedece a las características de la ideología socialista que busca implantar el gobierno, que es incompatible con la autonomía universitaria».

Finalmente, el presidente del Colegio de Profesores de Venezuela, Luis Rosas, pidió constituir un frente común para trabajar por las mejoras educativas. 

«La educación debe movilizarnos»
El nuevo secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática, Jesús Torrealba, también estuvo presente en el foro Fracaso del Modelo Educativo, donde alertó que la fractura de las instituciones en Venezuela está contribuyendo al deterioro de la educación. 

Torrealba señaló que a pesar de que se ha aumentado la cobertura escolar, en los planteles ubicados en los sectores populares se forma a los niños en los antivalores de la violencia y de la resignación. 

Recalcó que la ciudadanía debe apropiarse del tema educativo y propiciar su discusión como asunto central de la agenda y no como un elemento accesorio. “No se trata simplemente de un imperativo, del deber ser. Se trata de que la realidad nos tocó la puerta. Aquello que decíamos de que ‘cuando el futuro nos alcance’, bueno, nos alcanzó, y llegó el momento de que hasta por razones de sobrevivencia el ciudadano debe asumir el tema educativo. Debemos entender que se trata de un tema para la movilización de la sociedad, de la ciudadanía”

De lo contrario, añadió Torrealba, no se obtendrán las respuestas necesarias: “Todo esto pasa por la toma de posición de la sociedad venezolana para defender el derecho a la educación. Tenemos que reconocer públicamente que cuando nuestra educación pública empezó a dar muestras de resquebrajamiento no salimos a defenderla”.

El Nacional