La cita del domingo pasado congregó a organizaciones independientes y miembros de la comunidad luego de siete años sin que corearan sus consignas en la ciudad
@Luciapietf
Adolescentes, jóvenes y adultos de la comunidad LGBTIQ+ y sus aliados se congregaron el pasado 25 de junio, desde las 2 pm, en la Plaza monumental CVG de Puerto Ordaz, estado Bolívar, para recorrer la céntrica zona de Alta Vista y gritar consignas a favor de sus derechos, visibilización, igualdad y valor como seres humanos. Así, la marcha del Orgullo volvió a la ciudad después de siete años.
El evento fue impulsado por Guayana LGBT 2023 (@guayaba.lgtbq2023) y Código 90 (@codi.90), agrupaciones creadas para visibilizar a la comunidad, y asistieron más de 100 personas con pancartas, ropa y accesorios alusivos al orgullo LGBTIQ+. La concentración contó con la presencia de Bomberos de Caroní para resguardar a los asistentes y transeúntes.
Carlos Cortez, licenciado en Educación Integral y uno de los principales organizadores, comentó que la organización fue bastante acelerada por diversas dificultades, como el cambio de fecha de la actividad – del 24 al 25- y la tardanza en la entrega de permisos. El educador indicó que «se han hecho más de 15 marchas» en la ciudad, pero hace años estas se transportaron de Puerto Ordaz a San Félix y luego cesaron por la pandemia. Antes de esta movilización, el viernes 23 de junio hubo otra en San Félix organizada por el «Movimiento Sexo Diverso del estado Bolívar» y ligada al oficialismo.
¿Por qué marchan?
Eili Córdova, periodista y activista de los derechos humanos (DDHH) que participó en la organización del evento, comentó que estos encuentros son necesarios para brindar un lugar donde la comunidad sexodiversa pueda ser escuchada y conectarse entre sí y, a su vez, para continuar la concientización de las personas y la lucha por una sociedad más igualitaria y empática.
La periodista apuntó que en Ciudad Guayana hay que articular más espacios para la libre expresión de las personas LGTBIQ+, al igual que más convocatorias y más educación como activistas, miembros del colectivo y defensores de los DDHH en una sociedad «machista, homofóbica y transfóbica».
«Tenemos que tener la convicción de que lo que estamos haciendo va a llegar a las personas y la idea no es cambiar el pensamiento de todo el mundo, pero si podemos hacerlo de una persona a una persona, pues ya estamos haciendo bastante», manifestó.
Principales obstáculos
El Observatorio de Violencia LGBTIQ+ de Venezuela contabilizó 60 casos de agresiones y un homicidio contra personas de la comunidad entre enero y abril de este año.
Las personas sexodiversas no gozan de los mismos derechos y protecciones que el resto de los ciudadanos y la discriminación continúa muy arraigada dentro de la población venezolana. Cortez señaló que tras publicar la convocatoria en redes sociales recibieron muchos comentarios negativos.
Desirée Lugo, activista feminista y comonitora de la Red de Mujeres de Amnistía Internacional, expresó que esto no es un tema de moralidades sino de DDHH. «(…) Esto va a sonar muy fuerte, pero a nadie lo matan por ser heterosexual, a nadie lo botan de su casa por ser heterosexual, nadie termina en contextos inseguros. Recordemos que las personas queer suelen tener un tiempo de vida menor».
La activista mencionó que el promedio de vida de las personas transexuales está entre los 30 y los 35 años al ser más propensas a sufrir violencia, al igual que las mujeres queer. Los miembros de la comunidad viven experiencias distintas y por ende deben ser vistas de manera diferenciada, declaró.
Convocatorias nacionales
Hasta la fecha, el comité organizador de la marcha nacional del orgullo LGBTIQ+ en Venezuela indicó que se realizaron movilizaciones en los estados Zulia, Monagas, Carabobo y Mérida. Sucre, Yaracuy, Miranda, Carabobo, Nueva Esparta y Aragua son los estados restantes, según la agenda del comité.
