Elecciones 2017 archivos - Runrun

Elecciones 2017

Las condiciones que han variado entre las regionales de 2017 y los comicios de 2021
Ambos expertos consideran que un aspecto que mejoró para los comicios regionales de 2021, es la presencia de la misión de la Unión Europea para observar el proceso electoral

Las últimas elecciones regionales fueron celebradas el 15 de octubre de 2017. Desde entonces, las condiciones electorales han registrado algunos cambios. Sin embargo, lo cierto es que estos cambios responden más a la sonoridad que a la efectividad. 

Para la política Paola Bautista, las elecciones regionales de 2017 se hicieron con unas condiciones electorales bastante reducidas, alejadas de los principios de competitividad mínimos que pueden garantizar transparencia y justicia electoral.

Mientras que el politólogo Jesús Castellanos Vásquez indicó que las condiciones electorales en 2021 son distintas a las de 2017, sin que ello signifique que es una elección democrática o competitiva.

«En términos de condiciones, la verdad es que el panorama ha cambiado muy poco por no decir que no ha cambiado nada», señaló Bautista.

Elecciones después de las protestas de 2017

Después de poco más de tres meses de protestas, entre abril y julio de 2017, Venezuela celebró unas elecciones regionales que estuvieron protagonizadas por irregularidades y carencia de condiciones.

Según Castellanos, las elecciones regionales de 2017 se dieron en un marco de abierto y flagrante ventajismo institucional luego del desconocimiento de los triunfos de diputados a la Asamblea Nacional en Amazonas por parte del Tribunal Supremo de Justicia y la denuncia de Smartmatic de alteración de la participación electoral en la elección de la asamblea nacional constituyente (ANC).

«Es una administración electoral claramente asimétrica en su composición, tanto en su directiva como en los organismos electorales subalternos», dijo el politólogo.

Bautista respaldó esa afirmación, señalando que la configuración del Consejo Nacional Electoral respondía plenamente, tanto en su directiva como en su estructura, al partido de gobierno PSUV.

A pesar de eso, la oposición decidió participar en los comicios de octubre de 2017. Castellanos reiteró que el desconocimiento de los resultados electorales de la elección de gobernador en Bolívar, fue otro elemento de desconfianza y desesperanza de la vía electoral en Venezuela.

«Un patrón que se consolidó en 2017, es que en Venezuela ganar las elecciones no significa que vas a ejercer el poder. Una de las cosas que se vieron ese año, fue que los candidatos que ganaron, luego no se tenían que juramentar según lo establecido en la ley», aseguró la política. 

Según Bautista, el caso más emblemático fue el de Juan Pablo Guanipa en el estado Zulia. Al ganar la elección de gobernador, lo que corresponde es recibir el certificado de triunfo y ser juramentado ante la Asamblea Legislativa del Estado Zulia (CLEZ). A Guanipa lo querían obligar a juramentarse ante la ANC.

«En 2017 se consolidaron signos de reversión en términos de transparencia electoral», afirmó Bautista.

Ese año, el CNE se encargó de hacer cambios de electores de circunscripción, cambios de centros de votación. Según Bautista, la toma de estas decisiones lastimó gravemente lo que era la transparencia electoral del proceso.

Las elecciones con preparación atropellada

Las elecciones regionales de 2021 se llevarán a cabo el próximo 21 de noviembre. Según Castellanos, las condiciones electorales en 2021 son distintas, sin que ello signifique que es una elección democrática o competitiva

El politólogo explicó que existe una administración electoral menos desequilibrada, cuantitativa y cualitativamente.

«Hay avances muy importantes en la revisión técnica del sistema automatizado de votación y la presencia de una real observación electoral internacional, no el acompañamiento electoral de 2017 el cual constituyó un monitoreo no riguroso y parcializado», dijo Castellanos.

Bautista catalogó estos cambios de «baja incidencia, pero de gran sonoridad propagandística».

Uno de ellos es la poca pluralidad dentro de la directiva y estructura del Consejo Nacional Electoral. Bautista explicó que los rectores no deben tener ninguna afiliación política.

«Hay tres rectores del CNE, incluyendo su presidente, que tiene una clara afiliación política, y hay otros dos rectores que tradicionalmente han trabajado para la oposición, pero su nivel de incidencia frente a la toma de decisiones del CNE es casi nulo», reiteró la política.

Los 24 representantes del CNE en las entidades federales pertenecen y fueron designados directo desde la presidencia y pertenecen al PSUV. «Lo mismo ocurre con los 335 municipales y los 14 mil del centro», dijo Bautista. 

«Ha habido un cambio estrictamente nominal, que es la presencia de Roberto Picón y de Enrique Márquez en el CNE, pero la presencia de ellos dos ahí tiene una capacidad de incidencia bastante limitada en la mejora de las condiciones electorales, debido a la estructura del sistema electoral», reiteró Bautista.

Según Bautista, en 2021 hay un cambio interesante: el surgimiento de nuevas fuerzas políticas que se autodenominan como opositoras y tienen campañas electorales donde se ve mucha inversión de dinero. «No queda claro cuál es el origen de esos fondos y cómo funcionan», reiteró. 

Frente a eso, están los candidatos de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), de demostrada trayectoria y lucha democrática desde 2005, con unas campañas que lucen y son muy pobres, porque falta de dinero.

Uno de los aspectos más preocupantes de las elecciones de 2021 según Bautista, es que no hay pedagogía del voto. «La gente no sabe por quién votar, esto hace que no sea un proceso transparente», dijo.

Lo que ha mejorado

Ambos expertos consideran que un aspecto que mejoró para los comicios regionales de 2021 es la presencia de la misión de la Unión Europea para observar el proceso electoral

Bautista indicó que la presencia de la Unión Europea puede ser una ocasión para que todas las irregularidades, que obstaculizan gravemente el ejercicio ciudadano del voto, sean registradas, tipificadas y denunciadas por un organismo de ese prestigio. Además, que sea una herramienta de lucha para las fuerzas opositoras. 

Para Castellanos, la misión de observación de la UE es una presencia que genera respeto, pues levantan información sobre las elecciones.

«De hecho se les consideran un factor de disuasión del fraude. Pero además, sus recomendaciones constituyen una oportunidad de mejorar las prácticas electorales», reiteró el politólogo.

Además de ello, Castellano considera que otros puntos positivos que han variado son los siguientes:

Administración electoral.

Auditoría Integral.

Establecimiento de una veeduría electoral nacional más participativa y de forma más temprana.

Avances en el número de días, puntos y máquinas de la jornada de inscripción y actualización del registro electoral.

Avances en la Auditoría del registro electoral (nuevas metodologías).

Lo que ha empeorado

Bautista considera que el elemento principal que ha empeorado desde 2017 es el contexto.

La política explicó que con el inicio de la investigación de la Corte Penal Internacional, se afirma que desde 2017 se comienzan a registrar crímenes de lesa humanidad en Venezuela.

«Unas elecciones en un entorno donde la violación de los DDHH es una política de Estado, y que a nivel internacional está tipificado de esa manera. Es un entorno de Estado criminal, donde el motor de la economía es la economía negra. Un entorno donde el régimen sistemáticamente, desde 2015, ha ido desmantelando la capacidad de articulación de la oposición», señaló Bautista.

Para Bautista, este contexto político, además de las condiciones electorales que tiene Venezuela, obstaculiza gravemente la realización de unas elecciones que realmente transmitan la voluntad del votante.

Según la política, la desarticulación que sufre la oposición venezolana no responde únicamente a temas de desgaste naturales, como el tiempo. «Cuando se observa lo que es el ecosistema político venezolano. nos damos cuenta de que los principales partidos políticos tienen a su jefatura política en el exilio y a los principales candidatos de cada región inhabilitados», dijo. 

Castellanos reiteró que hay elementos que se han agravado desde 2017, como los siguientes: 

Las inhabilitaciones políticas han elevado el nivel de gravedad e inconstitucionalidad, al formularse durante y posterior al de postulaciones.

No hay información sobre el Plan de Fiscalización.

No hay información sobre las estadísticas de la capacitación a miembros de mesa (ahora principalmente vía remota).

El sistema de votación dificulta el voto alternativo o cruzado y promueve el voto en bloque o “tubo”.

Borges rechazó participar en elecciones municipales del 10 de diciembre

Borges_5

El presidente de la Asamblea Nacional, Julio Borges, rechazó participar en las elecciones municipales fijadas por la asamblea nacional constituyente para diciembre, si antes no se producen cambios en el Consejo Nacional Electoral.

«Si nosotros no logramos dar una lucha que cambie esas condiciones electorales, nosotros no podemos ir a un proceso que va a estar marcado, como estuvo el de los gobernadores, por el ventajismo, por el fraude, por toda la destrucción de la opinión de todos los venezolanos», dijo.

El diputado reiteró que las votaciones regionales del pasado 15 de octubre en las que el chavismo ganó 18 de las 23 gobernaciones, fueron un proceso fraudulento, cuyos resultados no son reconocidos por la Mesa de la Unidad Democrática y buena parte de la comunidad internacional.

«En este momento nosotros lo que tenemos que dar es una lucha o por que haya condiciones electorales o por entender que el Gobierno entonces está cerrando el camino electoral. Ese es el dilema claro que tenemos que verlo con coherencia», prosiguió.

Aseguró que los actores políticos que se oponen en Venezuela a la revolución bolivariana y a Nicolás Maduro, cuentan con apoyo internacional de manera unánime y con la mayoría de los venezolanos.

«Necesitamos que ese apoyo del mundo esté dirigido a lo que es el cambio del sistema electoral, para que podamos tener confianza en un sistema, votar y lograr el cambio en el país», agregó.

 

¿Se muere la democracia a fuerza de votos? por Asdrúbal Aguiar

Centro Votación regionales

El título en afirmativo sugiere una aparente herejía. Sobre todo, si se observa que la Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948 consagra que toda voluntad popular se expresa a través del voto. La democracia es voto o no es tal. Pero una apreciación tan simple como ésta, que nos empuje hacia el camino del fundamentalismo electoral, es capaz de llevar hasta el cementerio, en las urnas de votación, los despojos de una democracia cuyo actual entendimiento causa mucho desencanto; ese que inunda a nuestras sociedades contemporáneas al verse invertebradas, con sus texturas rotas, sin partidos que las interpreten, en medio de la desterritorialización de la política y la liquidez de las solidaridades.

Si no que lo digamos los venezolanos, víctimas de los apologetas de la narco-revolución que nos mantiene bajo secuestro y de los viudos del siglo XX. En 18 años hemos sido llamados a unos 22 actos comiciales – referendos incluidos – dentro un jolgorio de populismos, chantajes, manipulaciones e intoxicación publicitaria inenarrables, que le han negado al país su sosiego. Ha carecido éste de la calma para conocer las virtudes de la gobernanza, menos para elaborar juicios conscientes sobre la realidad que le ayuden a alcanzar, en suma, esa otra variable que, junto a la de la legitimidad, demanda la misma democracia, a saber, la de su eficacia como orden realizador de los derechos fundamentales.

El reduccionismo electoral hoy atrapa a muchos. A gobernantes y gobiernos que se dicen democráticos y se encuentran obligados por la Carta Democrática Interamericana, pero olvidan que la democracia es algo más, mucho más que el acto de elegir. Y al reducirla al voto nada les cuesta, sean líderes de la izquierda o de la derecha posdemocrática, consagrar con éste sus reelecciones a perpetuidad, prosternar el principio de la alternabilidad y la sana sucesión de los liderazgos. La alternancia, de origen muy antiguo, impone la rotación de cargos, su ejercicio temporal, para que todos y no unos pocos, tengan la posibilidad de ser electos, y para que los gobernantes y las direcciones políticas pasen y aprendan también a ser gobernados o dirigidas.

El voto como trampa es el mecanismo que usan las dictaduras y los despotismos partidarios del siglo XXI para afirmarse y es, cuando menos, una liberalidad “gattopardiana” que pactan los blandos de aquéllas con los oportunistas de la política. La inflación de los comicios y su realización cotidiana, como si viviésemos en una suerte de democracia de casino, ocurre deliberadamente. Es su propósito, repito, robarle tiempo al escrutinio de la opinión, a la deliberación previa y popular sobre lo que conviene o no decidir; a la consideración de lo que piensa, siente y aspira la gente de a pie. Atrás quedan, muy atrás, los momentos en que las elecciones tenían lugar juntas – las nacionales, las regionales, las municipales – cada cuatro, cinco, o seis años, por suponerse el acuerdo entre los electores sobre lo esencial, sobre lo que los integra en valores y como partes de una sociedad con mínimos constitucionales indiscutibles.

La experiencia de la democracia es milenaria, en tanto que la democracia electoral sólo frisa dos centurias. Cuando la imaginan los revolucionarios americanos y franceses no existían partidos y tampoco medios de comunicación comerciales. Y cuando aquéllos emergen hacen del voto una selva salvaje de intereses en pugna, que le abre las compuertas al fascismo y al comunismo. Hasta que ven su momento de oro, cuando la esfera pública la copan en alianza con la sociedad civil, como mediadores frente al gobierno y los parlamentos. Unos y otros se ganan la confianza del pueblo y éste confía en los políticos. Pero desde los años ’80 del pasado siglo, más ahora, en plenitud del siglo XXI, el pueblo, incluso el instruido, se somete al dominio de los medios y a través de las redes sociales ponen contra las cuerdas a los gobiernos y los partidos, molesto, indignado, frustrado. Y los últimos, como suerte de fantasmas de una democracia paleontológica que intentan resucitar, caen víctimas del mercado electoral y se contaminan de narcisismo digital. Tratan al elector como una pieza de caza, un trofeo para los más habilidosos.

“Todo lo que hagas por mí sin mí será contra mí”, reza la frase que venida desde el África Central se le atribuye a Gandhi y recuerda Van Reybrough, filósofo de Lovaina, para señalar que la crisis contemporánea de la democracia no es la de la democracia representativa. Hace crisis la democracia representativa electoral, pues si optar por las elecciones fue la vía adecuada para incorporar a poblaciones analfabetas y en geografías extensas a fin de legitimar a los gobernantes a través de ese medio o método eficaz, en la sociedad de la información y a la luz de los deslaves populares que mal pueden contener los Estados y sus partidos, la cuestión es radicalmente distinta.

El escrutinio de un pueblo que puede pensar si se le deja pensar y decidir, sobre ideas o aspiraciones, antes que validar tarjetas de partidos o fotografías de candidatos, tuvo su destello feliz el pasado 16 de julio en Venezuela, con la consulta popular que organizaran los huérfanos de la política a fin de rechazar el golpe constituyente. No obstante, los mismos partidos y sus líderes, en el poder o aspirándolo, preocupados por la experiencia y los mandatos de ésta prefirieron volver a la elección clásica, a sus urnas, rescatando ese dogma de fe donde la libertad es anhelo, la igualdad una quimera, y la razón un imposible.

correoaustral@gmail.com

Ocariz denuncia voto múltiple y asegura tener totalidad de las actas

ocariz-2

El alcalde del Municipio Sucre y otrora candidato a la gobernación de Miranda, Carlos Ocariz, dijo que el problema en las pasadas elecciones regionales no se refleja en las actas sino en el voto múltiple que se llevó a cabo en varios centros.

«El tema no son las actas, sino todo el sistema fraudulento que vimos ayer, tenemos mesas donde corrieron a nuestros testigos y se consiguió una participación de 90%, allí cualquier persona pudo votar más de una vez, el asunto es la totalización y las incogruencias».

Ocariz aseguró tener todas las actas y advirtió que hará las denuncias pertinentes tanto a nivel nacional como internacional.

«Tuvimos 403 centros en los que no pudimos contactarnos con los testigos porque cerraron las lineas de teléfono, en 141 no hubo conectividad, allí sacaron números superiores a cuando Chávez estaba vivo».

«El asunto es no nos podemos detener hasta que tengamos un sistema electoral confiable, nunca se va respetar la real voluntad del pueblo, la lucha tiene que ser más allá de cargos. Mi compromiso y el de todo debe ser luchar en contra este sistema fraudulento».

Aseguró que no podía reconocer al ganador de Miranda ni avalar los resultados mientras no se despejaran las incongruencias. «Por eso es que nos declaramos en lucha durante 24 de horas para limpiar ese sistema fraudulento electoral».

«Esto es una pelea de unos partidos contra un Estado corrupto y depravado, este sistema electoral solo genera pesar y frustración».

 

Así reaccionaron a nivel internacional luego de regionales en Venezuela

ExpresidentesIdea_

No pocas fueron las reacciones internacionales que generaron las elecciones regionales efectuadas este domingo en Venezuela y donde el chavismo salió en teoría victorioso con 17 de 23 gobernaciones, de acuerdo a un boletín emanado del Consejo Nacional Electoral.

Una de las primeras en pronunciarse fue la expresidente de Costa Rica, Laura Chinchilla.

«Resultados electorales de hoy (domingo) son la crónica de un fraude anunciado. Indignan,pero no extrañan. Las dictaduras nunca pierden», escribió la ex mandataria en su cuenta de Twitter.

El ex presidente colombiano Andrés Pastrana publicó en la red social. «Democracia y dictadura son incompatibles».

 

 

Así mismo, Tuto Quiroga, ex mandatario boliviano, denunció fraude y desconocimiento de la voluntad popular por parte de Nicolás Maduro.

«En Venezuela se robaron petróleo, dólares, comida, medicina y República. El 15-Oct con megafraude se robaron la democracia».

 

Por su parte, el senador estadounidense Marco Rubio, escribió que el fraude y las ilegalidades este domingo 15, demuestran que Nicolás Maduro es un dictador.

 

El gobierno de Canadá también expresó preocupación por las violaciones electorales y aguarda por una evaluación independiente.

 

Por su parte, el gobierno de Francia deploró la situación en Venezuela tras las elecciones celebradas en condiciones «discutibles», al tiempo que anunció que examinará «las medidas apropiadas para contribuir a una solución a la grave crisis que atraviesa el país».

«Francia está preocupada por el anuncio de los resultados de las regionales de Venezuela», indicó el portavoz francés.

Igualmente el ministro de Exteriores español, Alfonso Dastis, pidió aclarar los resultados de los comicios, no reconocidos por la oposición.

Por otra parte, el presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, dijo este lunes que su gobierno debe analizar los resultados de las elecciones regionales realizadas el domingo en Venezuela para decidir si los reconoce o no.

«Vamos a conversar con todas las partes y hacer un análisis, pero sin duda es positivo que el país, por la vía democrática, pueda expresar sus sentimientos», insistió Varela tras inaugurar en la capital panameña el 58 periodo extraordinario de sesiones de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

En un tono más directo, Estados Unidos aseguró que las elecciones regionales no fueron «libres ni justas», y advirtió de que seguirá presionando “económica y diplomáticamente” al Gobierno de Nicolás Maduro para que se “restaure la democracia”.

“Condenamos la falta de elecciones libres y justas ayer en Venezuela. No se escuchó la voz del pueblo venezolano”, dijo la portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Heather Nauert, en un comunicado.

Oposición pasó de denunciar irregularidades a invocar operación remate #15Oct

Gerardo-Blyde-MUD-MiguelGutierrezPhoto-EFE

La narrativa de la oposición en este 15 de octubre pasó de reconocer una moderada participación a tempranas horas a exigir la defensa del voto, pasando por una convocatoria a acudir masivamente a las urnas.

Tanto Julio Borges, presidente de la Asamblea Nacional, como el gobernador de Miranda, Henrique Capriles Radonski, hicieron un llamado a votar, este último convocó especialmente a los jóvenes a la llamada «Operación Remate».

A la 1:45 pm, un reporte de la empresa ORC Consultores manejaba una participación entre 33-36% y en zonas urbanas por encima del 45%.

Fallas en la instalación de mesas, la poca colaboración de efectivos del Plan República, cambios de ultima hora, imposibilidad de testigos de la MUD de ejercer sus funciones y la ronda constante de grupos colectivos fueron la constante en algunos centros.

En Miranda, Aragua, Trujillo, Zulia, Carabobo, Mérida y Sucre se observaron a grupos de personas en motos, amedrentando electores en las filas de votación.

Al menos cinco dirigentes de la oposición fueron golpeados, amedrentados o detenidos al momento de ejercer el derecho al voto.

En algunos estados se entregaron cajas CLAP y pidieron el Carnet de la Patria para votar.

Por su parte, los voceros del oficialismo mantuvieron un discurso de apuesta por la paz, haciendo llamados a votar en un proceso que ha transcurrido «con normalidad y sin reportes negativos». Aseguraron que las expectativas son positivas y que se le está dando un ejemplo de democracia al mundo.

El presidente Maduro dijo en una alocución vespertina que «la participación de la oposición reivindica la democracia, la paz y la Asamblea Nacional Constituyente. Venezuela desmiente que haya una dictadura en el país, y cada voto es darle nuevamente legitimidad a la ANC».

Mientras el Ministro de la Defensa, Vladimir Padrino Lopez, informaba sobre más de veinte irregularidades, la presidenta del CNE, Tibisay Lucena, mencionaba que «todo estaba normal»

Cerca del cierre de las mesas, voceros de la MUD llamaban a mantenerse firmes. «Mientras haya gente en la cola, los centros electorales no pueden ser cerrados», dijo el jefe de campaña de la coalición opositora, Gerardo Blyde. «Porque nuestras actas de votación son las pruebas para evitar cualquier fraude».

Blyde lamentó que la MUD no haya podido establecer contacto con el Plan República en función de comunicar las irregularidades registradas en todo el país.

Freddy Guevara: En Venezuela no hay elecciones libres

guevara1

El primer vicepresidente de la Asamblea Nacional, Freddy Guevara, dijo que en Venezuela habrán elecciones libres cuando el CNE sea imparcial y no hayan presos políticos.

«Solo hay que darse una vuelta por algunos centros donde han estado aplicando la operación morrocoy y en los cuales han cambiado a la gente arbitrariamente», dijo mientras acudía a ejercer su derecho en el Polideportivo La Boyera del municipio El Hatillo.

El dirigente de Voluntad Popular indicó que las «trampas» y el «ventajismo» del CNE motivaron a más de un abstencionista a salir este domingo de su casa.

«Este ha sido un proceso plagado de irregularidades y estamos en clara desventaja, por eso es importante contar con una avalancha de votos».

Sentenció además que es probable que el CNE no emita los resultados a nivel nacional «por temor a quedar en evidencia».

«Es importante defender los votos en centros como este (La Boyera) porque de esto depende que la gobernación de Miranda esté en buenas manos».

Al centro también asistió la diputada de Voluntad Popular, Manuela Bolívar, a quien no dejaron ejercer su derecho en las primeras de cambio por portar una franela con el rostro de Yon Goicoechea.

Igualmente acudió al Polideportivo La Boyera, el alcalde encargado del municipio El Hatillo, Reinaldo Díaz, el cual dijo que habían sido pocos los centros donde se presentaron contratiempos.

 

 

Cinco candidatos del PSUV tienen sanciones por corrupción y violaciones a DDHH

ANTES DE SER POSTULADOS en las planchas rojas, cayeron en la lista negra. De los 23 candidatos regionales del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), cinco han sido objeto de sanciones por hechos que van desde la corrupción administrativa hasta la violación de derechos humanos y el tráfico de drogas.

El abanderado del PSUV en el estado Aragua es el general Rodolfo Marco Torres. En abril de 2016, mientras se desempeñaba como titular de Alimentación, Marco Torres recibió un voto de censura de parte de la mayoría opositora de la Asamblea Nacional, que detectó la malversación de 27 mil millones de dólares asignados a ese despacho para importaciones. De esta manera, el oficial del Ejército se convirtió en el primer ministro en funciones que sufre este castigo en la era chavista.

Henry Rangel Silva y Justo Noguera Pietri comparten muchas cosas en común. Ambos son militares, competirán en las regionales y apoyan al régimen del presidente Nicolás Maduro. Y los dos también figuran en la lista negra del Departamento del Tesoro de Estados Unidos aunque por razones distintas.

Rangel Silva, mandatario del estado Trujillo que busca la reelección, llegó primero, en 2008. Antiguo jefe de la Dirección General Sectorial de los Servicios de Inteligencia y Prevención (Disip, actual Sebin) y ministro de Defensa, Washington cargó en su contra por sus presuntos vínculos con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y carteles de la droga.

Noguera Pietri, quien pretende gobernar el estado Bolívar, fue uno de los siete funcionarios señalados en marzo de 2015 en el famoso decreto firmado por el expresidente de Estados Unidos, Barack Obama. El excomandante de la Guardia Nacional Bolivariana enfrentó esta medida por la represión ejecutada en el marco de las protestas ocurridas a principios de 2014, que arrojaron un saldo de 43 asesinados.

El gobierno de Canadá dio una lección al “profe” Aristóbulo Istúriz y también a la almiranta Carmen Meléndez. Los candidatos del PSUV en los estados Anzoátegui y Lara están en la lista de cuarenta jerarcas – encabezados por Maduro – que acaban de ser reprendidos por la administración del primer ministro Justin Trudeau, acusados de provocar el “deterioro de la democracia en Venezuela”. “Estas acciones decisivas son respuesta a la profundización por parte del gobierno de Venezuela del descenso a la dictadura”, sentenció la Cancillería canadiense.