La Conferencia Episcopal venezolana (CEV) pidió hoy cambios en las condiciones en las que se establecieron los diálogos entre el Gobierno y la oposición que buscan una solución a la crisis por la que pasa el país caribeño desde hace meses y que tienen lugar en República Dominicana.
“El diálogo y la negociación entre Gobierno y representantes de la Oposición, en principio, son inobjetables y necesarios. Sin embargo, deben darse en condiciones distintas de las que hasta ahora se han establecido”, defendió la CEV en un comunicado.
En el texto, que recoge las inquietudes de los obispos venezolanos tras su CIX asamblea ordinaria plenaria, defienden que es “indispensable” el “reconocimiento y respeto institucional” ya que “toda negociación ha de fundamentarse en la integridad de los negociadores, en objetivos claros y en una agenda preestablecida y conocida”.
Para la CEV esto es necesario para que los diálogos “puedan gozar de la confianza y credibilidad de la población”.
En el mensaje, los líderes de la jerarquía católica en Venezuela, exigen la reestructuración del Consejo Nacional Electoral (CNE), “para que cumpla con la imparcialidad que le pide la Constitución vigente” así como acompañamiento internacional en las próximas elecciones presidenciales, que tienen que convocarse para este año.
Según la CEV, el país “necesita un cambio de rumbo” porque el Ejecutivo encabezado por el presidente Nicolás Maduro “ha fracasado en su tarea de garantizar el bienestar de la población”.
“Las elecciones son el medio democrático para lograr ese cambio de rumbo. Exigimos la publicación de un cronograma electoral”, siempre según el comunicado.
Aseguran que la “emergencia económica y social” en el país hace “indispensable” que el Gobierno permita la apertura de un canal humanitario, ya que “las muertes por inanición conmueven” y “las protestas por el hambre cunden en todo el país”.
Se solidarizan también con los “centenares de presos políticos, exiliados y detenidos por cualquier causa” en el país y afirman que deben de “gozar de libertad plena”.
“La libertad es un derecho humano inalienable, no negociable, y una exigencia de la democracia”, recuerdan.
Critican la puesta en marcha de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), órgano plenipotenciario compuesto solo por oficialistas convocado por Maduro, porque “usurpó al pueblo su poder originario”.
“No habrá una verdadera solución de los problemas del país hasta tanto el pueblo no recupere totalmente el ejercicio de su poder”, puntualizan.
El reconocimiento de la ANC, que la oposición rechaza, es una de las peticiones del chavismo en los diálogos en Santo Domingo junto con la retirada de las sanciones económicas internacionales contra el Gobierno venezolano.
La oposición demanda cambios en el CNE, del que desconfían, la apertura de un canal humanitario para la entrada de alimentos y medicinas, la liberación de todos los que califican como “presos políticos” y la restitución de todos los poderes del Parlamento, de mayoría antichavista.
