El presidente Nicolás Maduro ofreció una síntesis de lo dicho por él ayer durante la clausura del I Congreso de la Clase Obrera, en el Poliedro de Caracas. Algunos minutos más tardes anunciaría su intención de firmar 28 Leyes Habilitantes «para la diversificación, el crecimiento y el desarrollo económico de la patria. Esto es lo que se llama ponerse las pilas [por] adelantado para tener un 2015 de desarrollo, de ofensiva socialista productiva. Es el compromiso».
Resumen de las leyes firmadas:
- Ley de Regionalización Integral para el Desarrollo Socioproductivo de la Patria. Explicó que el objetivo es convertir a Venezuela en una potencia tecnológica y petrolera, a partir de ese punto se activarán zonas de desarrollo económico y turístico.
- Reforma de la Ley de Inversiones Extranjeras. Para establecer los mecanismos que permita atraer las inversiones extranjeras y satisfacer las necesidades del país.
- Ley Antimonopolio. Crea los mecanismos para regular las posiciones de dominio de quienes establecen control sobre sectores específicos para sus intereses particulares.
- Ley que reserva al Estado las Actividades de Explotación del Oro y Actividades Conexas. Busca aprovechar el potencial del oro y la pequeña minería en Venezuela, protegiendo el medio ambiente. “Todo el oro que se obtenga en el territorio nacional deberá entregarse al Banco Central de Venezuela para su disposición”, según el estatuto.
- Reforma de Ley de Precios Justos. Esta ley está orientada a garantizar precios justos al pueblo, pero ahora se perfecciona pues resalta la figura de la confiscación de todos los productos y bienes que se capturen en labores de contrabando. Con la reforma se incluye la intendencia para la defensa del salario y contra la especulación.
- Reforma de la Gran Misión AgroVenezuela.
- Ley para el Sistema Nacional Agroalimentario. Tiene el objetivo de hacer seguimiento a todos los alimentos que se producen en Venezuela de forma veraz y eficiente.
- Reforma a la Ley de Pesca y Acuicultura.
- Reforma de la Ley del Impuesto sobre la Renta. Es una reforma tributaria adecuada al dinamismo de la economía en Revolución Bolivariana, eliminando el ajuste por inflación que beneficiaba a los bancos y grandes empresas financieras.
- Reforma al Impuesto al Valor Agregado. El incremento de impuestos de 10 a 15 por ciento no se hará al pueblo, sino a quienes invierten en lujos y tienen cómo costearlos.
- Reforma del Código Orgánico Tributario. La reforma se dirige a los contribuyentes especiales, entre ellos, empresas extranjera. Se trata de contribuyentes especiales que deben regirse por las leyes venezolanas y de incumplirlas deberán pagar una multa.
- Ley de Impuestos sobre Cigarrillos y Manufactura del Tabaco.Podrán cobrar los impuestos del cigarrillo, que antes tenían más flexibilidades en el pago. “Ojalá que este cobro y las medidas de salud pública permitan que desaparezca el cigarro”, acotó el mandatario.
- Reforma de la Ley de Impuestos sobre el Alcohol y las Especies Alcohólicas. El Gobierno cobra poco por este impuesto y se aprobó un incremento entre 15 y 50 por ciento.
- Reforma a la Ley Orgánica del Turismo. Permitirá establecer un conjunto de servicios de atención especializada al turista internacional y la planificación de zonas y bienes de interés turístico.
- Ley del Crédito y Financiaciones del Sector Turismo. Buscan democratizar la cartera turística e impulsar su carácter social apoyando a los emprendedores que quieren iniciar proyectos de carácter familiar o asociativo.
- Ley de Fomento del Turismo Sustentable como Actividad Comunitaria y Social.
Había dicho inicialmente que estamparía su firma a 28 instrumentos legales, entre reformas y leyes nuevas. Ese número se quedó en 15, si bien Maduro aseguró que las 13 leyes restantes serían firmadas por él al término de la transmisión.
Aseguró que se lograron «neutralizar algunos de los efectos sociales y algunos de los efectos económicos de la guerra económica. No es suficiente neutralizarlos aunque es motivante saber que mantenemos los niveles de empleo, uno de los niveles de empleo más altos del continente (…). La estrategia social sí depende de nosotros y se cumple totalmente. Estamos bajando la pobreza crítica y la pobreza. Estamos subiendo los niveles de matrícula escolar a todos los niveles».
Más tarde, anunció que invitaría a los integrantes del comité de víctimas de las guarimbas «a una sesión de trabajo la próxima semana. Y la voy a transmitir en cadena, en horario estelar, porque Venezuela tiene que ver las heridas para que no se repitan más».
Aseveró que 2015 será «un año de ofensiva, de crecimiento en todos los aspectos de la vida, pero particularmente en el económico. Va a ser un año productivo. Va a ser, lo puedo decir, el primer año del resto de la segunda década del siglo XXI para convertir a Venezuela en una Venezuela potencia, en una patria potencia en lo económico (…). Para eso tenemos nosotros los recursos, tenemos la experiencia, tenemos el proyecto. El único que hoy existe en este país, viable (…), pertinente a la razón histórica de Venezuela y con certeza de futuro es el Plan de la Patria. Es el proyecto bolivariano».
Comentó: «Yo estaba viendo ahorita estudios de medición que hacen diversos organismos que se dedican (…) y con todo lo que nos han hecho, compañeros, si hoy hubiera elecciones en Venezuela, las fuerzas de la revolución ganarían la AN con el 10%, como mínimo, de diferencia porcentual de votos frente a todas las fuerzas de la derecha unidas, en el caso que lograran el milagro imperial de ir unidas». Y reiteró: «Si ellos logran el milagro imperial, porque el imperio hace milagros perversos también».
Expresó: «Solo por el camino de la revolución, nosotros podemos avanzar. Solo por el camino de la revolución socialista, camaradas. Que nadie tenga duda de eso. ¿Esta es una revolución democrática? Claro que sí. ¿Constitucional? Claro que sí. ¿Pacífica? Claro que sí. No es una revolución violenta ni lo va a ser jamás. Ahora, no es una revolución desarmada tampoco. Si no, vean los miles de combatientes milicianos que hay en los cuerpos de combatientes en las fábricas, en los barrios, y nuestra poderosa FANB».
Se efectuó el primer pase al complejo petroquímico de Morón, con la presencia del ministro de Petróleo y Energía, Asdrúbal Chávez, y Saúl Ameliach, presidente de Pequiven, para su reinauguración como complejo petroquímico Hugo Chávez. Allí se instaló una planta de fertilizantes, tal como lo informaron el presidente y quienes se encontraban en Morón al momento del pase.
Tras ese pase, que fue bastante largo, el presidente informó lo siguiente: «Acaban de ingresar US$ 4.000 millones del fondo chino, del nuevo tramo de financiamiento, y he ordenado colocar los US$ 4.000 millones en el fondo estratégico de reservas y sean contabilizados como parte de las reservas internacionales para seguir la estrategia de fortalecimiento de la reserva internacional de Venezuela. Va a haber buenas noticias sobre el fortalecimiento de nuestras reservas».
Posteriormente, se hizo un pase al estado Carabobo, a la planta de vidrio de Venvidrio (antigua Owens – Illinois). Allí los trabajadores anunciaron la entrega de Bs. 60 millones al gobierno como parte del superávit alcanzado por las ventas de esa industria.
Hecho ese pase, Maduro volvió a machacar con que ya firmaría las 28 leyes habilitantes y, de paso, anunció que mañana, último día de sus poderes habilitantes, tendría otra jornada de firma de leyes, igualmente transmitida en horario estelar, vinculadas a la «lucha contra la burocracia, el terrorismo, por la seguridad del país y además otro conjunto de temas complementarios que la Habilitante nos ha permitido trabajar».
Acto seguido, dio el pase a Sidor, en el estado Bolívar, con la presencia del mayor general Justo Noguera Pietri, presidente de la CVG.
A petición de un periodista de VTV, el presidente Maduro especificó que todas las 28 leyes habilitantes serán «de aplicación inmediata salvo que así esté estipulado, alguna vacatio [legis]».
«La revolución ha llegado a tal nivel de fortaleza política, ética, institucional, que somos capaces inclusive de dialogar con aquellos que están nadando pa’ tras. Saboteando. ¿Yo no le abrí la puerta aquí, vino el de Fedecámaras? ¿No le di la palabra y habló aquí en cadena nacional? ¿No le di la palabra al pelucón Lorenzo Mendoza, de la Polar, y no habló aquí también, media hora, pontificando, creyéndose que es el Papa? ¿No les di la palabra a todos ellos? El último presidente de Fedecámaras que entró aquí había sido Pedro Carmona Estanga para juramentarse como presidente de la República».
Consultado sobre la suspensión de los diálogos de paz en Colombia, Maduro se abstuvo de emitir opinión alguna. Sí dijo lo siguiente: «Yo preferiría no opinar directamente sobre lo que ha sucedido, sobre la suspensión. No emitir opinión sino, desde el corazón de Venezuela, decirle al presidente Santos “Cuente con nosotros”. Decirle a las negociaciones de La Habana y a los actores que están negociando (…) “Cuenten con nosotros, como siempre, humildemente”».
Agregó: «Estamos dispuestos a seguir apoyando a pesar de toda la basura que me lanzan a mí y que le lanzan a mi patria. Estoy dispuesto a seguir apoyando. Estamos dispuestos a seguir apoyando porque la paz de Colombia vale todos los esfuerzos y todos los sacrificios. No puede morir el esfuerzo de paz de Colombia. Tiene que vivir por encima de las dificultades actuales. Y en ese espíritu, sin opinar del tema, seguimos a la orden».
Dicho lo anterior, el presidente finalmente pasó a la firma de las 28 leyes habilitantes. La primera ley firmada por el presidente fue la Ley de Regionalización integral para el Desarrollo Socio-productivo de la Patria. «Vamos a pasar a la creación de las zonas económicas especiales de desarrollo, de los distritos motores de desarrollo económico y de las zonas integrales de desarrollo. Son tres niveles que se expresan por escala regional pero además son tres niveles que se expresan por especialización».
Así, el mandatario puso como ejemplo «la zona económica especial de desarrollo Faja Petrolera Hugo Chávez, tiene un perfil hacia el desarrollo petrolero, petroquímico petroindustrial, en una zona muy amplia que está muy definida y que tiene los proyectos bastante avanzados».
Se refirió, asimismo, a la zona económica especial de Paraguaná, en el estado Falcón, «que va a potenciar lo que hasta ahora ha sido una zona franca pero que va a elevar las inversiones. Ya hay inversionistas de la China, de India, de Rusia. Inclusive de EEUU, de Colombia, que quieren venir a invertir, por ejemplo, en proyectos de alta tecnología».
La segunda ley fue la reforma de la Ley de Inversiones Extranjeras para establecer los mecanismos que nos permitan atraer las inversiones extranjeras dentro del nuevo marco del Plan de la Patria (…). Establecer facilidades combinadas con las zonas económicas de inversión».
El tercer instrumento legal firmado por Maduro fue la Ley Antimonopolio, de la que nunca había emitido comentarios previos hasta el momento. «Esta ley crea los mecanismos para nosotros regular las posiciones de dominio que tanto daño hacen por parte de quienes establecen control sobre sectores específicos de la economía y los utiliza para forzar a la sociedad para sus intereses particulares».
La cuarta ley también fue una reforma, esta vez a la Ley que reserva al Estado las Actividades de Exploración y Explotación del Oro, así como Actividades Conexas y Auxiliares a estas. Dijo Maduro: «El tema del oro sigue siendo (…) un tema muy importante para nuestro país (…). Esta ley nos va a dar el instrumento, ahora preciso, para que el Estado entre a donde tiene que entrar a producir oro y pueda hacer una atención, como tenemos que hacer, a las comunidades mineras que no destruyan nuestra naturaleza».
Esta ley de acuerdo a lo leído por Maduro, promueve la creación de un fondo social minero «con la finalidad de garantizar los recursos para el desarrollo de las comunidades aledañas en las áreas destinadas al ejercicio de las actividades mineras».
Asimismo, firmó la reforma a la Ley de Precios Justos porque ahora «nosotros sabemos dónde hay que apretar las tuercas. El superintendente Andrés Eloy Méndez nos hizo una propuesta que nos pareció correcta, justa (…). En esta ley estamos estableciendo ahora la figura de la confiscación de todos los productos y bienes que se capturen en labores de contrabando donde la República haya invertido los dólares a través de Cencoex y de los distintos sistemas de venta y distribución de los dólares de la República. Confiscación directa, sin intermediarios».
Añadió: «Aquí creo la intendencia para la defensa del salario y contra la especulación, donde va a estar la clase obrera. Va a ser la intendencia obrera para la defensa del salario y contra la especulación».
Otra ley que el presidente procedió a firmar fue la Reforma a la Gran Misión AgroVenezuela «para reactivarla en una nueva etapa». Otra, la Ley que crea el Sistema Nacional Integral Agroalimentario «para seguir nosotros ajustando las capacidades que tenemos de seguimiento a todos los procesos productivos, de almacenaje, de distribución de todo lo que se produce en Venezuela (…). Es necesario tener sistemas estadísticos y de control que sean veraces y muy eficientes para nosotros saber qué se produce, dónde, cómo se distribuye, cómo se almacena y poder nosotros curarnos en salud frente a quienes cortan las cadenas distributivas y llevan el producto nacional al contrabando o lo llevan por otras vías a la especulación». También firmó la reforma a la Ley de Pesca y Acuicultura.
Con la Ley para el Sistema Nacional Integral Agroalimentario, Maduro informó: «Aquí nosotros creamos un nuevo sistema: Sunagro. Superintendencia Nacional de Gestión Agroalimentaria, que va a permitir tener el control, las estadísticas y el chequeo permanente, vía automatizada, de todo el sistema agroalimentario. Producción en el campo, por rubro, importación también, almacenamiento, procesamiento y distribución al consumidor final. Este sistema sustituye al que llamaban el SADA, que se vino a menos hace un tiempo para acá (…). Además otorga rango legal a la Guía Única de Movilización, lo que permite unificar los criterios para su funcionamiento».
En materia tributaria, el presidente firmó una reforma a la Ley del Impuesto Sobre la Renta. Previamente, Maduro había dicho: «Que paguen más los que más ganan, más tienen. Y que cada uno de nosotros, como trabajadores, cumplamos con nuestros compromisos tributarios justos, como debe ser. Yo llamo al cumplimiento de nuestros compromisos tributarios como trabajadores».
El superintendente tributario, José David Cabello, especificó que una de las reformas que sufrirá la ley del ISLR es que ahora la alícuota del impuesto al lujo subirá de 10% al 15%. Quienes adquieran bienes considerados suntuarios ahora pagarán un impuesto de 15% y no de 10% como hasta ahora. Esta fue otra de las reformas firmadas por el presidente.
Firmó también la reforma al Código Orgánico Tributario, que «se dirige principalmente a los contribuyentes especiales, empresas extranjeras y a quienes tradicionalmente evaden los impuestos y la actuación de la administración tributaria».
Maduro también firmó la reforma a la Ley de Impuesto sobre Cigarrillos y Manufacturas del Tabaco. Esta reforma elimina el plazo de 30 días que se daba a las empresas manufactureras de tabaco para pagar los impuestos. «Consideramos que ellos deben pagar sus impuestos de manera (…) inmediata, en el mismo momento en que están saliendo de la fábrica. Adicional a eso, los derivados del tabaco que tampoco eran pechados. En este caso también van a ser pechados y la producción artesanal, que tampoco se pechaba por ningún lado, también la vamos a pechar», explicó José David Cabello, superintendente tributario.
Otra reforma firmada por el mandatario fue a la Ley de Impuestos sobre el Alcohol y las Especies Alcohólicas. Nuevamente, fue José David Cabello quien llevó la voz cantante en esta parte: «Estamos proponiendo un aumento en las alícuotas del vino, del 15% al 35%. En otras bebidas alcohólicas, del 20% al 50% (…). En algunos casos, en las bebidas que vienen importadas, nosotros dábamos 90 días para que pagaran los impuestos arancelarios, los impuestos correspondientes. Eso también se está eliminando en esta ley».
Firmó una reforma a la Ley Orgánica del Turismo para poder establecer «un conjunto de servicios de atención especializada al turista internacional». Además, firmó la Ley de Fomento del Turismo Sustentable como Actividad Comunitaria y Social, que «establece mecanismos para la incorporación de las comunidades organizadas a las actividades con responsabilidad, con mucho cariño, al cuidado de todas las instalaciones y todos los espacios turísticos. Además, desarrolla programas de sensibilización, capacitación de las comunidades, de los estudiantes, del pueblo, instruye la formulación de un código de ética de turismo responsable».
Esta fue la última ley que el presidente firmaría en cámara. Había dicho inicialmente que estamparía su firma a 28 instrumentos legales, entre reformas y leyes nuevas. Ese número se quedó en 15, si bien Maduro aseguró que las 13 leyes restantes serían firmadas por él al término de la transmisión.
