Las verdades sobre el cierre de Clorox que el régimen oculta
Las verdades sobre el cierre de Clorox que el régimen oculta

CUANDO ESCUCHAMOS A TANTOS DISFRACES ROJITOS proponer soluciones como montar una planta de producción de lo que sea en cada capital de estado u orgullosamente con sus chalequitos, guayaberas, gorras y carpetas rojas lanzar advertencias como que las comunas se apropien de las cajas registradoras que no tengan cajeras en los supermercados donde haya cola por desabastecimiento o escasez lo que uno siente es pena ajena. El haber descendido todos los escalones de la eficiencia y productividad global en comparación con el mundo entero, donde hasta Zimbabue muestra mejores parámetros económicos que los del actual y el anterior gobierno socialista,  lo que da es pena y vergüenza ajena. Cierran empresas y le echan la culpa al imperialismo gringo (nada que ver con el imperialismo chino al que le aceptan lo que quieran), al capitalismo destructor y a las empresas transnacionales. Nunca se atreven a contar -manipulando la información controlada, tergiversada y falsa- las verdaderas razones de las quiebras, cierres, expropiaciones absurdas y robo descarado como lo vemos a diario en estos cinco mil y tantos días del fracaso del mentado socialismo del siglo XXI.  El más reciente ejemplo es el cierre de la planta de la empresa Clorox tras 14 años de operaciones en Venezuela. Infames declaraciones de los patiquines rojos anunciaban medidas ejemplarizantes contra los que cerraban las fuentes de trabajo llegando a decir que «no hay empresa transnacional que sea capaz de quitarle el derecho al trabajo en revolución a los venezolanos» o «Chávez vive y el trabajo sigue”. Mentiras  por decir lo menos. No informan que la empresa Clorox tuvo,  desde Julio del año 2012 hasta Julio 2014,  29 reuniones oficiales para plantear el tema de la necesidad de revisión de precios de los productos regulados y otras problemáticas del sector en los Ministerios de Comercio e Industria, SUNDECOP  ahora SUNDDE, Vicepresidencia de la República, Ministerio de Planificación y Finanzas y Presidencia de la República.  Adicionalmente, participó en otras muchas reuniones  con directores, vice ministros y ministros del área de industrias, comercio,  finanzas y vice presidencia económica en el marco de diversas mesas técnicas. También participó en las reuniones de la  “Verdad Económica”.  En muchas de estas reuniones se le respondía que los aumentos estaban para la firma del Presidente de la República, cosa que nunca se materializaba. Indicativo que ningún ministro ni militar en cargo burocrático tiene las más mínima autoridad para tomar decisiones. Varios años produciendo a pérdida en la espera de los anunciados incrementos de precio. Y en el alto gobierno la torpeza, debilidad o encrucijada sin salida paraliza aún más el destrabe económico. A partir de segundo semestre del año 2013 empezó Clorox a indicar la inviabilidad de mantener la compañía operativa sin un ajuste de precios que permitiera una rentabilidad mínima.  Se enviaron 22 comunicaciones oficiales y  a su vez emitieron 4 comunicados.  Las reglas de la SUNDECOP establecían que entre Julio del 2012 y Julio del 2014 se han debido hacer 8 ajustes de precio. El cierre de Clorox más que una muerte anunciada, es un asesinato premeditado. Al calco de otras decenas de situaciones en empresas otrora productivas y hoy quebradas por la corrupción, la ignorancia y la ineficiencia socialista copiada de los cubanos. La mentira, repetida mil veces, trata de crear una matriz de opinión favorable al régimen. Están pelados. Cero inversión es un logro “madurado” en tres lustros.  Pobre país, sin duda. Y luego edulcoran la realidad a los trabajadores anunciándoles que ahora serán una empresa socialista rentable. ¿Cómo la eficiente AgroIsleña convertida en la inservible y corrupta AgroPatria?