AGARRADOS CON LOS PANTALONES ABAJO se han sentido en las alturas de Miraflores con las permanentes revelaciones y pruebas de las relaciones, apoyo y manutención de las guerrillas narco-terroristas colombianas.
Para muestra un botón en la columna de hoy de Marianella Salazar en El Nacional. Por solo citar lo más reciente, de este año 2010, podemos darnos cuenta de la evidencia:
2010: 13 de enero, sobre el viaje a Cuba procedente de Venezuela del líder de las FARC Iván Márquez. 21 de enero, sobre una operación con base en Nicaragua, dirigida por Iván Márquez, para desestabilizar el gobierno de Porfirio Lobo, y de cómo llegó a Managua el jefe de las FARC, en un avión de la Fuerza Aérea Venezolana, en compañía de tres oficiales del Ejército venezolano, de máxima confianza del presidente. 10 de marzo, de cómo Iván Márquez, junto con el etarra Arturo Cubillas, preparan a 22 hondureños en terrorismo para trasladarlos a Nicaragua (Cubillas coordinó los cursos sobre armas y explosivos dictados por la ETA al bloque Caribe de las FARC, según el auto judicial del juez español Eloy Velasco). 26 de mayo, ubicación del etarra Arturo Cubillas cerca de la frontera donde se encuentra junto a Iván Márquez, del secretariado de las FARC.
Si a esto le añadimos la cantidad de fotografías en las que Chávez aparece con los guerrilleros en Miraflores, siempre con la excusa de la liberación de secuestrados o de negociaciones por la paz, se infiere que aquella exclamación ante la Asamblea Nacional reconociendo la beligerancia y dándole estatus de cuasi gobierno paralelo es el marco referencial para demostrar el apoyo a Marulanda, Reyes, Márquez y Cano.
Son tantas las pruebas que a uno se le olvidan con el trapiche diario noticioso. Hoy que Colombia pide le entreguen a Rodrigo Granda, el llamado canciller de las FARC, quien estuvo viviendo libremente en Maracay, cedulado y con varias votaciones en su haber, apresado, sacado a Colombia, liberado, devuelto a Cuba, luego a Francia, de allí a España y ahora de nuevo en Caracas Marianella nos recuerda esta perlita: “Año 2005: 26 de enero, sobre la adquisición de Rodrigo Granda, “canciller” de las FARC, de una finca en La Paragua, estado Bolívar, custodiada por militares venezolanos”.
¿No pasarán?
