La incompetencia y los guisos con el café rojo rojito - Runrun
La incompetencia y los guisos con el café rojo rojito

CUANDO EL MINISTRO DE AGRICULTURA Y TIERRAS, Juan Carlos Loyo, anunció que el Gobierno nacional ajustaba el precio del café molido a Bs. 37,56, representando un aumento del 57%, luego de las protestas de los caficultores, quienes pedían un ajuste del precio para no producir a pérdida, el régimen de Chávez solo demostraba una vez más la incompetencia acostumbrada en trece años de gobierno aliñada con el afán destructor de la agricultura privada venezolana.
El kilo de café molido estaba costando 23,8 bolívares. El ajuste también contempla que el quintal del café natural corriente que costaba 595 bolívares ahora será vendido en 820 bolívares, es decir, tendrá un aumento de 37,8%. Asimismo, el quintal de café lavado bueno A, que tenía un precio de 747 bolívares, costará ahora 1.200 bolívares. Este ajuste implica un incremento de 60,6%.

La protesta el día anterior de los caficultores pequeños frente al Palacio de Miraflores fue reprimida con bombas lacrimógenas por la Guardia Nacional.

Casualmente, a las pocas horas sale el aumento que para los productores es aún chucuto en sus aspiraciones ante la realidad del gobierno que solo quiere beneficiar a los “capitalistas de afuera” pues considera que los caficultores venezolanos son parte del “imperialismo capitalista opositor”, como en reuniones privadas ha manifestado el comunista jefe del Indepabis Augusto Montiel.

Las enormes ganancias en la importación que se reparten los bolichoros nacionales con empresarios de Nicaragua y Brasil, los que mandan el peor grano -además ligado con café y cebada- perjudicando a los agricultores nacionales. Prefiere Chávez hacer ricos a los amigos de Daniel Ortega que pagar un precio justo por el café venezolano.

Nuestras columnas en El Universal y en estas páginas vienen expresando desde hace años el drama cafetalero nacional.

No hay peor sordo que él no quiere oír.

Les hago un recuento:

 

 

30 Abril 2009

¿CAFÉ COMO ARROZ?:


Antes denunciamos la importación de miles de toneladas de arroz estadounidense por parte de PDVAL. Hoy el drama cafetero nacional comprueba la incompetencia, mentiras y corrupción dentro de lo que el apreciado Jorge Olavarría llego a definir como la «ineptocracia o peorrocracia gobernante». En el famoso «Plan Café» se invirtieron más de 760 millardos de bolívares -cuando la producción llegaba a 40 millones de kilos- y cinco años después entre todas las torrefactoras no llegamos a 10 millones en inventarios. Las proyecciones estimaban que para este año estaríamos produciendo aproximadamente 2.500 millones de quintales y hoy sólo llegaremos a 1.300 millones. A Colombia se fuga -con el consentimiento de las autoridades ministeriales y la protección de puntuales oficiales de la FAB- entre 75.000 y 100.000 sacos de café de 60 kilos cada uno. La absurda política de precios fija internamente el precio del quintal en BsF 480 cuando en la frontera se paga en BsF 645. Para el tercer cuatrimestre de 2009 faltarán 400.000 quintales en el mercado interno y ya hay «técnicos revolucionarios» que hablan de importar café. ¡Otro logro robolucionario!… 

 

 

 

11 junio 2009

 

“Como periodista, sin andar en conspiraciones mediáticas ni antidemocráticas, me preocuparon mucho estas tres informaciones de una misma alta fuente gubernamental: «O cambiamos de estrategia de inmediato o en 30 días no habrá azúcar, en 90 días no habrá café, y si le hacemos caso a Darío Vivas en 8 meses la industria de la construcción dejará en el desempleo a más de 200 mil trabajadores de un solo golpe». Demasiado caliente todo. La procesión ya no sólo es por dentro. Se ve en todos lados con las manifestaciones espontáneas en torno a las más disímiles causas. ¿Se creen eternos?…

 

9 Julio 2009

¿LLOVERÁ CAFÉ?:

En esta misma columna anuncié el pasado 30 de Abril que vendría una dramática y aguda escasez de café. La crisis llego y nadie hizo nada. Hasta finales de este mes de julio quedan inventarios de café para moler. No habrá ni café verde, ni café molido. El ministro Jaua dirá que la culpa es de los productores anti-revolucionarios y el ministro Samán anunciará que es de las empresas torrefactoras “oligarcas”.

Ambos volverán a mentir al país y a engañar al Presidente Chávez. La verdad: los más de 300 millones de dólares puestos en el “Plan Café” se los repartieron la ineficiencia y la corrupción. La salida, según nuestra fuente, será importar café. Inaudito. Se rompe la tradición de autoabastecimiento que nos caracterizaba. Sin duda que esta importación será un nuevo negocio boliburgués. Mientras tanto no hay culpables, nadie va preso, el rufián se hace el loco y los nuevos ricos rojitos disfrutan de sus reales “bien habidos” mientras saborean una cápsula de Nespresso importado…

 

 

 

6 de agosto 2009

CAFÉ RANCIO:

Sin ser adivinos lo anunciamos en pasadas columnas del 30 de Abril; el 11 de Junio y el 9 de Julio. Parece que no las hubieran leído en el Gobierno cuando esta semana los ¿mentirosos? ministros Jaua y Samán culpan a las empresas venezolanas por la desaparición del café a todos los niveles del país.

A ninguna torrefactora le interesa exportar café porque eso va en contra de su propio negocio. La verdad verdadera: el Plan Café, luego de más de BsF 800.000.000 invertidos no cumplió su meta.

Hoy producimos menos café que antes. Si Jaua lo reconoce, sería su propio fracaso. Así de simple. Entre los centros de acopio y la frontera con Colombia hay no menos de 14 alcabalas. Imposible que alguien, sin el apoyo del Ejército o de la GN, pueda contrabandear el producto cosechado en cantidades significativas como para dejar al país sin café por tres meses.

Nos explicó un ex oficial de la GN experto en asuntos agrícolas: si se llevaron para Colombia 400 quintales de café (46 kilos es un quintal), como engañosamente señala Jaua, se necesitaron 613 gandolas para su movilización, ya que cada una sólo carga, máximo, 30 mil kilos. Imagínense unas seis o siete gandolas de ese tamaño pasando diariamente por la frontera.

Para colmo, el Presidente se hace eco de semejante engaño. Como pasa con el arroz, el azúcar (en enero le hicieron petición para importar ante la escasez que venía y no les contestaron) y la carne, la Revolución Socialista del siglo XXI -que promueve la utópica soberanía alimentaria- nos lleva a que hasta con el café hagamos agricultura de puertos.

No hay salida: importaremos café. Un nuevo negocio para la boliburguesía. Jaua tiene cartas e informes confidenciales del SASA (organismo del gobierno que maneja los silos y almacenes) donde se le informó con antelación sobre las fallas a nivel de la cosecha y del transparente comportamiento de las torrefactoras. ¿Nunca se los mostró o entregó al Presidente?

Supimos que el caudillo se molestó y prepara a un capitán para el cargo.

¿Dejará de llover café para el pueblo, quien vuelve a perder frente al rojo gobierno?