AYER UN TUIT, dejado al azar en la red social, daba cuenta de una observación -que a lo largo de la noche se repitió varias veces- luego que el gobierno de Brasil reclamara al gobierno venezolano por la visita sin aviso, ni permiso, del ministro de las Comunas y ex canciller Elías Jaua.

Recordemos el incidente protagonizado por la «niñera» de Jaua, Yaneth Anza, quien al entrar al aeropuerto de Sao Paulo le fue decomisado un revolver S&W de 38 milímetros que portaba en su maletín de mano.

El tuit al que hago referencia decía algo así: «Brasil no es Argentina y no es alcahueta de ilegalidades. Los Kirchner escondieron la maleta de Antonini». Viene al caso pues el propio canciller brasileño Luiz Alberto Figueiredo, máximo representante de la diplomacia brasileña que tiene sus orígenes en el Palacio de Itamaraty, fue quien reclamó a Venezuela por la visita sin previo aviso y, sobretodo, la firma de acuerdos con el grupo de izquierda radical «Movimiento Sin Tierra» entre los que aparece uno para «entrenamiento».

Por cierto que no dice si es en Venezuela o en Cuba, país éste donde los jóvenes del Frente Francisco de Miranda han recibido entrenamiento. Jaua ha sido el factótum de ese grupo creado por Hugo Chávez y Fidel Castro en el año 2003.

La reacción brasileña podría tener su origen en alguno de los «acuerdos» entre Jaua y el MST que por supuesto son desconocidos para los venezolanos pues, además, el gobierno de Maduro tratará de esconder esa realidad lo más que pueda.

Hay más preguntas para Jaua y por ende para el gobierno de Maduro:

-¿Quién autorizó el viaje de Jaua?

-¿Quién le autorizó el uso de los aviones de PDVSA para su transporte, el de su familia y el de su niñera a Sao Paulo?

-¿Quien está pagando el Hospital Sirio Libanés de Sao Paulo?

– ¿Tendrá Venezuela respuesta a la protesta de Brasil?

– Aquí hay un reclamo de un gobierno en la forma mas seria como es la llamada a su embajador o encargado de negocios. Venezuela esta obligada por los acuerdos diplomáticos entre estados soberanos a darle una explicación seria, creíble, documentada, a su contraparte brasileña.

– La respuesta venezolana no puede ser a través de un e-mail o de un fax. O va el encargado de negocios venezolano en Brasilia, Reinaldo Segovia (ya que hoy no hay embajador pues estamos en la transición entre el anterior embajador y la nueva representante, respectivamente el Almirante Diego Molero Bellavia y la doctora Maria Lourdes Urbaneja, o va el canciller o uno de sus viceministros a la embajada de Brasil en Caracas para dar las explicaciones en persona al representante de la Republica Federativa de Brasil.)

Hasta la hora que escribimos esta nota nos dijeron desde Brasil que de entrada sería el propio presidente Nicolás Maduro quien hablaría con la presidenta Dilma Rousseff. Sin embargo debe haber una respuesta oficial como exige la reciprocidad diplomática.

Una vez mas será desde Brasil de donde obtendremos la información. Vean que el incidente tiene casi dos semanas y aquí el régimen lo ha querido esconder como cabeza de avestruz.

Serán los medios independientes de Brasil los que desarrollen el tema y nos detallen todo. Repasando los medios venezolanos veremos que solo en los medios independientes se habla del tema. Los medios oficiales no lo han reseñado.

Y se me olvidaba una pregunta: ¿No creen ustedes que un gobierno que lo único que sabe hacer bien es la propaganda hubiera armado todo un tinglado mediático para hacer conocer al mundo el acuerdo entre Jaua y los “Sin Tierra”?.