¿De Tarantino? Diario de Lisboa y la foto de Maduro con militares heridos en atentado con C4 solo con “curitas adhesivas”
¿De Tarantino? Diario de Lisboa y la foto de Maduro con militares heridos en atentado con C4  solo con “curitas adhesivas”

 

“UNA PELICULA LATINA EN CÁMARA LENTA”

El reporte vino en la edición del miércoles 8 de agosto del Jornal de Noticias de Lisboa y lo firma la periodista Ivete Carneiro con ese título:

“Decir que una imagen vale más que mil palabras es aquella antigua muletilla del fotoperiodismo que no cabe en la fotografía que juntamos a estas líneas. Por eso, sin palabras, podía muy bien ser una escena sacada de una película mexicana de los años 1980. O incluso más reciente, al nivel de un (fabuloso)»Desperado», que no es mejicano pero que fue hecho para que pareciera serlo. Tiene bigotes hartos en barda y “nonsense” (sin sentido) en la misma proporción. Tiene heridas y vendajes. Tiene sangre. Pero esta imagen es, sobre todo, la de la política en América Latina.

Es el presidente venezolano que parece consolar cadetes que fueron golpeados por la “ola de choque del kilogramo de explosivos” que un drone no logró llevar hasta la tribuna presidencial de una parada militar el pasado sábado. Se sabe ahora la versión caraqueña de la trama que intentó matar a Nicolás Maduro. Y que, como esta imagen de piensos rápidos mal colocados y canadienses, es digna de cine.

El propio Procurador General venezolano habló de ella así: “fue una película en cámara lenta”. En la trama aparecen “un presidente colombiano (hoy ya ex-presidente Santos), un expresidente del parlamento venezolano exiliado en Colombia (Julio Borges), un diputado opositor detenido (Requesens), 50 millones de dólares y dos ilustres venezolanos instalados en Estados Unidos que el gobierno de Caracas dice serían los cabecillas de la historia y que los movimientos de resistencia, a los que Maduro asocia el atentado, dicen ser “infiltrados del gobierno”.

Quentin Tarantino no lo haría mejor. Hasta en el enorme fracaso que fue este supuesto atentado y en la hilarante escena de un ejército en desbandada ante el ataque a su comandante supremo. La historia se puede leer mañana, en la edición en papel del diario “Jornal de Noticias”.

Y, porque el día fue sacado para esa deliciosa América Latina, aquí quedan dos registros inevitables: el nuevo presidente de Colombia, Iván Duque, ya trató de clasificar a Venezuela de dictadura y prometió moverse para barajar los asuntos internos de Caracas. Y, no muy lejos en el mapa, la vicepresidenta de Nicaragua, esposa del presidente de Nicaragua, concluyó que murieron 197 personas, incluyendo 20 policías, fruto de las protestas contra el Gobierno de su marido y que su sangre mancha las manos de los que se le oponen. Los llamó «terroristas». Eran estudiantes”.