PRÍNCIPE DE LA RISA - Runrun
Redacción Runrun.es Jun 14, 2010 | Actualizado hace 14 años

Siempre hay que abrirle espacio a la risa. Eso lo aprendí de Manuel Graterol Santander, Graterolacho.

Así fue Manuel, un optimista a prueba de lluvia, malestares y hasta de malos gobiernos.

Es duro perder a los amigos. Manuel era más que eso para mi. Era un amigo, con todo lo que eso significa, además con atributos de padre.

Graterolacho sólo sabía hablar bien de sus amigos. Fue de gran apoyo para un gentío, generoso hasta el colmo, no tenía límites en la solidaridad.

Me reía mucho con él, sobre todo cuando nos sentábamos a recordar sus “maldades”. Era un bromista extremo. Más de una vez salí de un restaurante con un salero en la cartera o un plato y tenedores o cucharillas…era un carajito.

Llegó a mi vida hace 20 años, cuando comenzaba a dar mis primeros pasos en la radio, de la mano de Luís Muñoz-Tebar, LUMUTE y nos adoptamos mutuamente…

Como ocurre con la mayoría de los hombres de mi vida, el beisbol nos unió desde el principio. Nuestro amor por el Caracas era un tema que gozábamos mucho.

Desde la primera vez que me escuchó la frase “que tengan un día por encima del promedio” me dijo: ”repítela siempre, es optimista”

Cuando al Caracas le volteaban el juego me llamaba. Sonaba el teléfono y yo sabía que era él, furioso…¡peor si era el Magallanes!

Sufría al Caracas de verdad y su felicidad era absoluta con cada victoria. Este último campeonato lo vivió intensamente, aunque perdimos los dos primeros, su optimismo no se movió y fue inmensa la celebración, llena de versos en rima.

Al rato descubrió el twitter, fue su última trinchera.

Pocos dias atrás me había hablado emocionado de lo que se divertía,. Feliz porque sus coplas cabían en 140 caracteres y por la libertad absoluta de decir lo que  se le ocurría.

“Es nuestra esencia Mari,  escribir” y recordó a Andrés Eloy…”desbaratando encajes regresaré hasta el hilo…”

Le gustaba el espacio para dar cuenta, en rimas, de la Venezuela de estos dias.

Preocupado por el país, Manuel escribió para apoyar a la Jueza Afiuni y Franklin Brito, para lamentar la comida podrida y también para celebrar que Vizquel alcanzara a Aparicio.

En su funeral me di cuenta que tenía un proyecto por hacer con varios amigos. Una mente inquieta, inventando todo el tiempo. No sólo se le ocurrían cosas, las hacía.

Periodista, publicista, poeta, locutor y jodedor, Manuel Graterol Santander  vivió cada minuto de su vida para el amor. A su familia, a sus amigos, al gremio, al país.

De la anécdota que comentó Nelson Bocaranda por aquí, la del sapo de la bomba, voy a contarles la teoría de Daniel Álvarez, mi esposo, otro hijo para Manuel y quien suscribe.

Daniel salió al carro y de pronto vio que un sapo se le acercaba, minutos antes Manuel había ido a juntarse con LUMUTE, Aldemaro Romero, Jesús Rosas Marcano y Aquiles Nazoa y quien sabe quién más.

Pues bien, Daniel no podía creerlo, el sapo dio 3 saltos y se  le paró en frente, tanto que dio tiempo de hacer fotos en cada etapa de su camino.

Daniel regresó a la Clínica y sonriendo nos dijo a Serenilla Rosas y a mi…”No saben la que me acaba de hacer Manuel”- y nos mostró la foto del sapo.

La verdad es que no hay explicación a la presencia de ese sapo en un sitio tan hostil y menos aun a que persiguiera a Daniel, como no sea que era el.

Nuestra conclusión es que toda su vida fue un príncipe y al final se convirtió en sapo.

Te quiero Manuel…siempre, prometido, buscaré cualquier excusa para la risa…y si no la encuentro pensaré en ti y reiré sin remedio.

Cuando gane el Caracas

¿Sabes querido Manuel?

Si me queda algún cosuelo

es saber que desde el cielo

ligarás con Carrasquel

Ligarás con Carrasquel

y perderá el Magallanes

lo comentará Oscar Yanes

ganaron fue por Manuel

Ganaron fue por Manuel

y respondieron los bates,

yo sabré que fue por el

un león con muchas artes