El delantero de España Iago Aspas (derecha) anota el segundo gol de su equipo frente el arquero de Marruecos Monir El Kajoui en el partido del Grupo B en Kaliningrado, Rusia, el unes 25 de junio de 2018. (AP Foto/Petr David Josek)
Por Jesús Zambrano
La Pizarra del DT
España y Marruecos protagonizaron una jornada de infarto para cerrar la acción de la primera ronda en el grupo B. No apto para cardiacos se puede definir este dramático final, las variaciones del marcador colocaban a los españoles a sumar y restar para conocer las posibilidades de avanzar a Octavos de Final, eso sí, condicionados y pendientes del otro partido entre Portugal e Irán pues sin la victoria no dependerían de sí mismos.
El entrenador español Fernando Hierro realizó solo un cambio respecto a su partido anterior frente a Irán, dio ingreso a Thiago Alcantara por el volante ofensivo del Real Madrid, Lucas Vázquez, buscando encontrar un equilibrio en el medio sector, ubicándolo a la par de Sergio Busquets, para así, salir jugando con balones precisos desde su propia área.
El compromiso inició con un Marruecos golpeador, férreo en defensa e intenso en ataque, que obligaba a España a dividir el balón por no encontrar las líneas de pase. Esta situación pasaría a segundo plano, la selección española se asentó con el pasar de los minutos al recuperar y manejar a su antojo el balón, desplegando su poderío por las bandas con los volantes y los laterales que se suman con plena libertad al ataque, además de un Thiago en buena que enviaba balones rompiendo líneas marroquíes.
Un error de comunicación al minuto 14 entre Andrés Iniesta y Sergio Ramos provocaría la primera anotación del partido, tomando el balón desde el medio campo Boutaib para enviarla al fondo de las redes por debajo de las piernas de David De Gea. La preocupante situación hizo adelantar líneas a los españoles quienes cinco minutos más tarde encajaban el gol del empate en una jugada perfecta realizada entre Andrés Iniesta y el autor del gol, Isco Alarcón.
Desde allí se intensificó el juego fuerte de Marruecos, al finalizar la primera parte se llevaron cuatro cartulinas amarrillas por su mala intención en las faltas. Se dedicaron a defender todos detrás de la línea de la pelota esperando el momento oportuno para contragolpear. Por su parte, España, seguía con su dominio de la esférica buscando generar peligro en el arco rival, siendo las ocasiones a balón parado las de mayor peligro.
El segundo tiempo iniciaba como había terminado la primera parte, con el dominio total de España pero con un juego trabado en mitad de cancha, con falta de creatividad de los españoles quienes trasportaban y pasaban el balón con transiciones lentas, sin riesgo para Marruecos que esperaba tranquilamente en su campo. En el minuto 73 empezaba Fernando Hierro a mover sus fichas, dando ingreso a Iago Aspas por Diego Costa y Marco Asensio por Thiago Alcántara. Con estos movimientos encontraría un volumen de juego más dinámico, logrando realizar triangulaciones de la esférica, moviendo marcas y juntando más hombres en zona de ataque. El entrenador de Marruecos respondía dando ingreso a jugadores como Fajr y Bouhaddouz que creaban una línea de cinco volantes, cerrando espacios de juego para su contrario.
A nueve minutos del final, un corner transformado en gol por En-Nesyri colocaba a ganar a los suyos. Fue un perfecto cabezazo que pasaba por el ángulo izquierdo de De Gea. Iniciaba el desespero español, entraba Rodrigo por Silva, Marruecos se encerraba atrás y se negaba al ataque, aguantaba con todos sus hombres, se acababa el compromiso, se cumplía el tiempo reglamentario y el juez agregaba unos minutos de descuento. La viveza roja pasaría factura pues desde un tiro de esquina cobrado con anticipación terminaría con gol dramático de taquito de Rodrigo, quién ahogaba su grito pues la jugada era revisada por el VAR.
De esta manera el compromiso finalizaba con empate a dos goles, resultado que sumado al del otro partido daba como líder del grupo a España, empatando en puntos y en diferencia de goles a Portugal, pero marcando un gol más que su contrario, que sería el criterio de desempate empleado en este caso. Así, se dan a conocer los primeros cruces para Octavos de Final, donde la roja deberá enfrentar a Rusia el próximo 1 de Julio.
