1928 / Protagonistas y testigos de la rebelión estudiantil por Simón Alberto Consalvi - Runrun

En las huellas de la pezuña, Betancourt y Otero Silva reflexionaron sobre “el sentido y la orientación del movimiento universitario de Venezuela” con lucidez. Ambos veinteañeros denuncian cómo la dictadura de Gómez trataba de adulterar el sentido y los propósitos de la cruzada universitaria. Tanto al movimiento estudiantil como a la rebelión militar-estudiantil del 7 de abril, la literatura oficial los llamó “funesto brote comunista”. A esto se añadieron los nacientes pecados: “el terror rojo”, “las amenazas a la sagrada institución de la familia”, “el desquiciamiento del Estado”, “los horrores soviéticos”, etcétera. Aluden a la reforma constitucional de 1928, donde se consagraba: “Queda también prohibida la propaganda del comunismo”. De modo que el régimen “actuaba dentro del orden”. Las circulares del Ministerio de Relaciones Exteriores difundieron por el mundo la noticia alarmante de que en Venezuela había aparecido “el primer brote de la revolución social”.

Además de Betancourt  y Otero Silva escribieron relatos de tan memorables episodios Jóvito Villalba y Joaquín Gabaldón Márquez. Al de este, Memoria y cuento de la Generación del 28 se le dispensó siempre mayor difusión. Todos los textos tienen el valor documental de los testimonios y de las vivencias. En las huellas de la pezuña se relatan los episodios de la Semana del Estudiante, desde la reunión preliminar del domingo 5 de febrero, donde Raúl Leoni e Isaac J. Pardo, presidente y secretario general de la FEV se reunieron con los oradores designados para intervenir en los actos, revisar discursos y poemas. También Juan Vicente Gómez (aunque usted no lo crea) contribuyó con su propia versión de los sucesos del 28. En noviembre, El Nuevo Diario publicó una larga entrevista del  director con el general. Según el más autorizado de los testigos, la rebelión estudiantil se mantuvo viva todo el  año,  y allí el dictador se queja de los jóvenes porque no lo comprenden: “No quieren estudiar, quieren meterse a políticos”.  Y fue, justamente, por “meterse a políticos” que ingresaron a la historia.

 

@saconsalvi