El general John Kelly el 10FEB14 en la Base Aérea Soto Cano en Honduras saludando personal militar estadounidense. Foto: US Air Force

Las Farc continúan actuando como un eslabón del narcotráfico pese a sus negociaciones “de paz” con el gobierno Santos. La DEA distribuyó el 07DIC16 su más reciente informe denominado “Estimación de la Amenaza Nacional de las Drogas 2016”, en el cual da cuenta de la actividad de la guerrilla colombiana en la red de producción y exportación de drogas ilegales hacia EEUU.

Para sorpresa de algunos, las Farc en sus operaciones de narcotráfico están asociadas, según la DEA, con sus antiguos y mortales rivales: los paramilitares. El informe indica que las Farc y bandas criminales Bacrim formadas por exmiembros de las Autodefensas de Colombia actúan como socios en negocios de cocaína y heroína. El informe ilustra la sección referida a Colombia con fotografías de tres jefes guerrilleros, Fabián Ramírez, Joaquín Gómez y Mauricio Jaramillo, quienes  durante los últimos cinco años han formado parte de las delegaciones guerrilleras en las negociaciones del Acuerdo Santos-Farc en La Habana.

El documento de la DEA confirma que varios frentes de las Farc localizados en las zonas fronterizas estaban especialmente activos en el negocio de exportación de drogas al inicio del año 2016.  El informe expresamente menciona al frente 10 en la frontera llanera con Venezuela, a la columna móvil Daniel Aldana y al frente 48  en la frontera con Ecuador y al frente 57 en la zona fronteriza con Panamá. Estos frentes, a su vez, aparecen en diversos informes, distintos al de la DEA, realizados en los últimos meses que indican la alta posibilidad de que estas unidades narcomilitares no se sumen al proceso de desarme y desmovilización acordado con el gobierno Santos. Las facciones de las Farc no pacificadas continuarán siendo, junto a sus colegas del ELN, un problema de seguridad interno y regional.

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El 28OCT15 desde uno de los pasillos del palacio presidencial de Miraflores en Caracas, en transmisión televisada en vivo, el ministro de Defensa Vladimir Padrino López, vestido con uniforme de campaña “patriota” y rodeado por su  “estado mayor superior”, leyó un comunicado contra el jefe del Comando Sur de los EEUU, general John Kelly. El ministro de la defensa del gobierno de Nicolás Maduro aseguró que “el imperio norteamericano, con el subterfugio de la defensa de los Derechos Humanos y de la libertad, pretende una vez más crear las condiciones necesarias para intervenir en nuestro país”. Al final de su lectura, Padrino y sus acompañantes levantaron el brazo apretando el puño y gritando “Chávez vive. Independencia y patria socialista”. La noche anterior, el propio Maduro desde uno de sus programas de TV acusó a Kelly de “ponerle la guerra a Venezuela otra vez”. Según Maduro, el alto militar estaría “dando órdenes para destruir a Venezuela”, por lo que pidió el apoyo de los pueblo de Latinoamérica contra la inminente “agresión del imperialismo”. Desde el año 2014 hasta su salida del cargo en el Comando Sur a principios del 2016, el gobierno Maduro encontró en Kelly una usual excusa para sus cotidianos enfrentamientos contra EEUU.

Durante su estadía al frente del Comando Sur, Kelly no dudó en diversas intervenciones públicas para dejar ver un alto conocimiento de la realidad política latinoamericana, con acento en temas de seguridad y narcotráfico. La creciente presencia de Irán en la región, las conexiones del narcotráfico con la política, el apoyo a los militares colombianos en su combate contra la narcoguerrilla,  fueron entre otros temas de Kelly en sus presentaciones en público.

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La alteración del gobierno Maduro a finales del 2015 contra el general estadounidense John Kelly fue desatada por declaraciones a la cadena CNN del 22OCT15 en las cuales afirmó que pasaba “cuarenta segundos al día pensando en Venezuela” y que oraba en su oración matutina por el pueblo de Venezuela “que está sufriendo terriblemente”. En esa ocasión se refirió a que la economía venezolana estaba en vía de implosión y que EEUU estaba listos para suministrar ayuda humanitaria (agua, comida, etc.) por intermedio de agencias de la ONU o de la OEA. El 13MAR14, durante una comparecencia ante el Comité de Servicios Armados del Senado de EEUU, Kelly se había referido a la “degradación” de la democracia en Venezuela, coincidiendo con la ola de protestas populares que conmovía a Venezuela en esa fecha.

El 07DIC16 el presidente electo de EEUU, Donald Trump, anunció su decisión de someter el nombre del general retirado Kelly a consideración del Senado para designarlo Secretario del poderoso Departamento de Seguridad Nacional. Se trata de la primera ficha de alto nivel del nuevo gobierno estadounidense con directo y actualizado conocimiento sobre Latinoamérica y su actual liderazgo político y militar. Diversas fuentes consultadas no consideran a Kelly como un “halcón” guerrerista, pero obviamente en el tema de la seguridad regional privará su visión castrense como alto oficial de infantería (marines) de la Armada de EEUU. La filtración iraní y rusa en el Continente vía gobiernos castrochavistas y su impacto en la seguridad de EEUU seguramente estarán en la agenda del Secretario Kelly.

Con la muy probable confirmación de Kelly por el Senado comienza, además, la incorporación a la primera fila del gobierno de EEUU de funcionarios tenidos como enemigos por el régimen chavista.

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Los gobiernos de Argentina y Brasil, las dos principales economías suramericanas y la segunda y tercera de Latinoamérica, encabezados por Mauricio Macri y Michel Temer, están intentando forjar una alianza política y comercial. El 08DIC16 la canciller argentina Susana Malcorra viajó a Brasilia donde fue recibida por Temer y sostuvo encuentros con su homólogo José Serra y con el ministro de Industria y Comercio Exterior, Marcos Pereira. Los dos gobiernos se proponen lanzar una iniciativa conjunta de promoción de exportaciones utilizando Mercosur como plataforma para lo cual la salida del conflictivo gobierno de Maduro era una condición deseable.

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En la rueda de prensa concedida por los cancilleres Serra y Malcorra en el Palacio de Itamaraty, los cancilleres informaron sobre la situación en el Mercosur y sobre la situación en relación a la membresía de Venezuela. Ratificaron la realización de una reunión de cancilleres de Argentina, Brasil Paraguay y Uruguay a mediados de diciembre, probablemente el 14DIC16 según lo anunciado previamente por Paraguay, en la cual los cuatro representantes de los países fundadores decidirán los planes de la organización para el año 2017. Dieron como un hecho que Venezuela no participa en esas decisiones y aclararon que no se trata de una “suspensión” sino una “cesación” la sanción aplicada al gobierno Maduro. La presidencia semestral del Mercosur será asumida por Argentina el 01ENE17 y por Brasil el 01JUL17, con lo cual los dos países se proponen redireccionar la organización hacia nuevos acuerdos con terceros países para lo cual  anuncian la constitución de equipos bilaterales de negociación.

No está prevista una inminente cubre presidencial de Mercosur, con lo cual dejaron sin piso los anunciados planes de Maduro de asistir a cualquier reunión del grupo para reclamar contra su sanción. En relación con las amenazas del gobierno Maduro de recurrir a instancias judiciales en contra de los miembros del Mercosur, Malcorra afirmó que están de acuerdo con que Venezuela recurra al arbitraje previsto en las normas internas del grupo sureño. Malcorra aseguró en Brasilia que Argentina y Brasil esperan el pronto cumplimiento por parte de Venezuela de sus compromisos con Mercosur para su consecuente regreso al grupo. Pero ese mismo día, el jefe del gabinete ministerial argentino, Marcos Peña, afirmó desde Buenos Aires que el gobierno argentino no ve señales en el gobierno Maduro para retomar un diálogo con los miembros de Mercosur.

En la práctica, Venezuela ya está fuera de las instancias de gobierno del Mercosur.

Edgar C. Otálvora

@ecotalvora

Diario Las Américas