Entre cigarras y alacranes, por Armando Martini Pietri
Entre cigarras y alacranes, por Armando Martini Pietri

maduromud

 

Es habitual en política y la doble moral instaló sus mesas. En todas ellas, obviamente, el doble discurso. Unos y otros se han dicho, cuanta barbaridad se conoce. Declarado, escrito y repetido hasta la saciedad sandeces y groserías a granel; palabras y adjetivos insultantes, soeces. Se han flagelado con las peores denuncias y acusaciones, llegado al extremo de ofender sus familias y, de repente, como si nada hubiera pasado, un sonriente apretón de manos y palmadas de cariño entre el Presidente Maduro, Torrealba y la comitiva, selló la puesta en marcha del «diálogo» para el gobierno y «reunión exploratoria» para la MUD. Cuestión de semántica y simulación. Un activo ejemplo del por qué los ciudadanos desconfían de los políticos y, peor aún, interpretan como hipócrita a la política.

Los venezolanos debemos agradecer este magnífico y la vez deplorable espectáculo al Vaticano, UNASUR, la mediación de Zapatero, Torrijos y Fernández. Tras innumerables reuniones, secretismo e incertidumbre, durante las cuales la oposición, aunque declaran estar más unidos que nunca, la verdad se enfrentaron y temieron la ruptura.

Optimismo (¿deberíamos llamarlo “esperanza”?), mostró el Presidente al poner en marcha el encuentro, en el que no faltó la polémica. Cuantiosas las voces que alertaron sobre la posibilidad de diálogo, que no tendría consecuencias sino las de oxigenar al régimen, -como sucedió en el pasado-, fueron crucificados y acusados de traidores por quienes estaban al corriente de que el dialogo existía y en progreso, pero lo hacían oculto, a escondidas y de espaldas al ciudadano. Eso suena más a traición ¿no les parece?

Un comunicado explicó la asistencia de la MUD expresando que llevarían como primer punto la exigencia de ponerle final a la represión y persecución ciudadana, adelantando que se levantarían en caso de no resolverse sus demandas en el corto plazo, ¿será acaso otra falsedad? Son tan vagos e imprecisos los conceptos que no se retiraran de la “reunión exploratoria” como quieren calificarla, les da vergüenza citarla mesa de diálogo y negociación. Por cierto, mientras declaraban con júbilo el inicio de pláticas, tribunales de Aragua dictaban prohibiciones de libertad a muchos que participaron en la “Toma de Venezuela” y en la cual manifestantes hartos gritaron “cobardes” “pacatos” a muchos dirigentes, mientras algunos, animaban a marchar hacia Miraflores, que militares y policías no dejarían pasar ni permitirían.

La reunión se realizó en un olvidado museo, y allí arribaron los desacuerdos: Voluntad Popular (liderada por el preso político y de conciencia Leopoldo López), no asistió convencida de que no han mejorado las condiciones para iniciar un diálogo serio. No obstante, dejaron la posibilidad abierta y asomaron la eventualidad de incorporarse en el caso de modificarse el entorno exigido. Por cierto, el alcalde Smolansky desmintió a Chúo, que ha renovado la costumbre marxista del embuste como primicia.

Reflexivo y conveniente, declaró el Cardenal Urosa que no es prudente realizar la marcha al Palacio de Misia Jacinta, ¿previsión o iluminación de Dios?. Y como era predecible la MUD hizo lo propio en la misma dirección.

Así las cosas, los dirigentes de VP ratificaron que se mantenía la marcha opositora del jueves 3N hasta Miraflores y la agenda de lucha anunciada al país para lograr el cambio político, lo que incluye la evaluación parlamentaria de la responsabilidad política del presidente. No obstante, los voluntariosos sucumbieron a la presión celestial y tendrán que aguantar el designio seráfico.

Por la oposición organizada MUD asistieron Carlos Ocariz, consecuente, generación de relevo a quien el Gobierno ha denunciado de terrorista y cobardemente se ha inmiscuido en su vida privada; tranquiliza el adeco silencioso y juicioso Luis Aquiles Moreno, quien no se deja seducir por tentaciones de micrófonos ni cámaras.

Con ellos Jesús Torrealba, otrora comunista, de ingrato recuerdo en la Coordinadora Democrática, quien ha dicho del gobierno y de quien el oficialismo ha dicho disparates y agravios, sentado de primero colmado de emoción y en la espera del ansiado saludo presidencial; Timoteo Zambrano con su cara circunspecta, repleto de historias de componendas y quien puso en jaque el trabajo internacional opositor de los que han sufrido cárcel, persecución y destierro demostrando al mundo que el gobierno sí viola derechos humanos. ¿Qué más se puede decir?, casi tanto como lo que han vociferado del chavista no madurista Henri Falcón, ambiguo, difuso e impreciso quien estaba allí sin que se sepa a quién representa. Por cierto, el oficialismo designó a los más fundamentalistas y agresivos, a la MUD le faltó el desastrado Ismael García.

Venezolanos reflexionen, ¿qué principios, ilusiones de futuro, deseos de libertad, esperanza de recuperación pueden emprender estos personajes? Son detalles que cuestionan al actual liderazgo y ponen en juicio negativo los posibles acuerdos y compromisos.

Muy pocos en sano juicio pueden sentirte representados, son afrenta a la mayoría de ciudadanos que poseen principios éticos y morales. Si no les da vergüenza con Venezuela y su pueblo, al menos cuiden la fachada y los malos pensamientos con el Papa Francisco, su representante y la iglesia católica. Es obligación y deber ciudadano rechazar y revelarnos, no se puede aceptar una estrecha selección partidista más excluyente que incluyente. Es de higiene mental negarse a pensar que no hay en el país mujeres y hombres serios, inteligentes, preparados, decentes, dignos y estimables que puedan simbolizarnos con decoro.

La explicación opositora para justificar su asistencia, fue que se insistió en la participación del Vaticano, rechazarla y no acudir, se interpretaría de mala educación y descortesía. Pretexto despreciable, más cuando se muestra lo impresentable de los interlocutores. Lenguas viperinas, aseguran la presencia de un político americano, detrás de este invento con aires de componenda.

Nada excepcional en este enredo que se encuentra un país arruinado en lo económico y empobrecido en lo moral y ético; devastado en las buenas costumbres ciudadanas. Lástima que algunos se hayan contagiado de los malos hábitos del creador de la Lista Maisanta y sus amigos los cuales, como siempre en política, habían denunciado sus deshonestas prácticas. Pero como decía aquél, “entre políticos te veas”. En política hay que ser y parecer. Lo que se comunica es fundamental. Hay batallas que se ganan o se pierden por una foto. La ingenuidad solo beneficia a la dictadura.

La presencia de la Iglesia -el Vaticano- genera sosiego. No por la santidad, sino por la veteranía y astucia. Un detalle, no están los cardenales venezolanos, ni los jesuitas, ni siquiera el muy leído analista, padre Ugalde. La Santa Sede tiene destrezas y sigue aquel aserto, que tu mano izquierda no sepa lo que hace la derecha. Una consideración, la MUD va por el camino que se vislumbraba, no hay sorpresa. Sin embargo, esos pasos hoy, tienen de alfombra roja las víctimas no sólo por represión sino los niños muertos de hambre, los enfermos por falta de medicinas y tratamiento, además de los que encuentran el final de la vida en manos del hampa.

Al menos públicamente, no están esos sabios religiosos, como tampoco están los estudiantes, sindicatos, universitarios, las mujeres. Se pasaron por bolas a los 26 ex presidentes, Almagro y la OEA. Relegaron a los presos y exiliados. No se recuerda demasiado en esta calamidad socialista, que han sido todos grandes soportes de apoyo, libertad y democracia. ¿O no? Que ingratitud.

Van a dialogar sobre nuestro destino los mismos que lo han ensombrecido por años. Estamos tan degradados que tenemos a Maduro de presidente y como figura política nacional a Zapatero, por si fuera poco la tragedia, en la contra parte un desvergonzado y dos comunistas. Estas personas en la mesa no pueden más que negociar sórdidos acuerdos, dar y recibir, sin atender a los principios de buenos modales y hábitos ciudadanos. !Es para preocuparse!

 

@ArmandoMartini