Ciertamente, a quien se sienta en la silla de Miraflores hay que Revocarlo; ¡Y rápido! Su incapacidad para GERENCIAR un país y ADMINISTRAR -no así robar- nuestros recursos es más que notoria. Pero la necesidad de su salida se vuelve más imperiosa ante las condiciones climáticas posadas sobre esta tierra que era de gracia y que deseamos llamar simplemente Venezuela. Bolivariana, sí, pero no por nombre, sino por tierra de gente honesta y batalladora. Chavista, no, al menos por obligación. Ese adjetivo queda para quienes así lo sientan… siempre respetados por la otra parte, hoy mayoría, mientras muestren un comportamiento cívico (y no incluyo la coletilla militar, porque el militar es para los dos bandos, es decir, para Venezuela).
Desde hace meses los venezolanos sufrimos una sequía al cuadrado; mejor dicho a la ene potencia, como subrayaría con su voz gruesa y gallega mi otrora profesor de matemáticas, el Señor Platas, cada vez que le preguntaba si me había equivocado. Secos se muestran los anaqueles de Mercales, Súper Mercales y Bodeguitas. Vacías lucen las enormes tiendas de la cadena Farmatodo y Locatel; tan vacías, que se diseñan pasillos más anchos que sustituyan estantes inútiles. Y fueron también secándose los embalses que permiten que salga por el chorro el agua bendita (con o sin Muchacho en casa. JeJe. ¡Qué Raya te hicieron pasar Ramón!) Lo anterior ha significado para muchos un baño a punta de tobito, después de pasar 6 horas en cola al sol para poder comprar el champú o el jabón, y asearse probablemente a oscuras porque en el Guri la consigna de moda es “Adiós luz que te apagaste”
Finalmente llegaron las lluvias. Al menos desde hace 3 días llueve parejo en la Capital, Caracas, desde donde escribo. Leyendo me informo que lo mismo sucede en toda la zona norte del país; en el sur, desde donde se genera buena parte de la electricidad, apenas cae una garúa en base a lo que informa el ministro Mota Domínguez. Y es que, estas últimas lluvias no anuncian cambio de género en materia de fenómenos atmosféricos; la Niña se espera más o menos para el mes de Junio. La causa de los torrenciales, según en INMH, es producto de un sistema de vaguada. Y el chiste que viene ahora, como diría Sherlock, es elemental que surja de mis teclas. El caos que hoy vivimos, con lluvias y aún con sequía, es por la vaguada de un sistema. Ese sistema que lo único que hace es gritar consignas anti oligárquicas y anti imperialistas, en vez de alzar voz de mando eficaz y certero ante tanta ineficiencia.
Seguimos entonces en sequía, alimentaria y benita. Pero peor aún, se arrecian los apagones con un nuevo plan de racionamiento que, de manera oficial, afectará incluso a Caracas, hasta ahora la consentida. Esa de los techos rojos. Porque es aquí donde hacen (gran) vida buena parte de los boli burgueses. Un racionamiento 4×4, es decir, Todo Terreno, a nivel nacional y por 40 días. ¡Ja! Una Casualidad Literaria se asoma ahora en mi mente… 40 eran los ladrones de aquel cuento infantil que protagonizaba un personaje llamado Alí.
Por 4 horas diarias, en 4 bloques, cada hogar venezolano permanecerá sin cocina, sin televisor, sin internet, sin teléfono, sin ascensor. ¿Será que si me enrolo en el proceso de carnetización me asignan oscurantismo desde las doce de la media noche a las cuatro de la madrugada? ¡No, qué va Andreina! A ti el rojo no te luce. Mejor invierte esas horas sin poder escribir o producir en la computadora, en actividades súper enriquecedoras. Por ejemplo, escribirle, a mano y en alemán, una carta de saludos cordiales al embajador en Austria Jesse Chacón. Podría incluso enumerarlas hasta llegar a los 100 días que transcurrieron sin poder solucionar el caos eléctrico y sin tampoco renunciar. Otra actividad enriquecedora podría ser ponerme a diseñar laberintos, de esos que publican en los pasatiempos, y mandarlos a Miraflores a ver si por allá terminan aceptando alguna de tantas salidas dignas. ¡No se preocupe Nicolás! Estoy solo jugando. Lo que si no son juegos es haber sumergido a un país en la más grave crisis económica, sanitaria, social y pare usted de contar cuando haya encontrado el caminito.
4×4… Un racionamiento que no es otra cosa que el sumun de un gobierno que en materia de ineficiencia y corrupción ha demostrado ser Todo Terreno. Comemos por terminal de cédula, nos bañamos con poncheras, y veremos luz por bloques.
No sé ustedes. Esta que viste y calza ya está lista, con pluma en mano, para firmar por un revocatorio, una enmienda, por cualquiera sea la fórmula que definan para lograr lo que demanda el 80% de los venezolanos. No hablemos ya de un cambio. Ante la grave situación que vivimos, el objetivo es la Salvación y posterior resurrección de un país, y de sus ciudadanos. #TibisayEntregaLasPlanillas que así sea con hambre, el cabello sucio y a punta de vela o linterna Venezuela entera plasma su firma.
@dremunoztebar
