Discurso pirata por Henrique Capriles Radonski
Ene 25, 2015 | Actualizado hace 9 años
Discurso pirata por Henrique Capriles Radonski

NicolásMaduroMemoriayCuenta2014

 

El gobierno perdió la posibilidad esta semana no solo de hablarle claro y raspao a los venezolanos, sino de corregir los errores que originaron la crisis económica más dramática de la historia de nuestro país. Claro, pretender que Nicolás rectificaría, es como echar papas en un saco roto.

Y eso debe quedarnos claro a los venezolanos. Este gobierno no tiene ni la más remota idea de cómo solucionar la crisis económica que el mismo generó. Un gobierno responsable hubiese explicado al país cuáles serían las acciones para solucionar el problema de la escasez y con esto las largas colas que debe hacer nuestro pueblo, para comprar alimentos, productos de limpieza e higiene personal.

Los venezolanos queríamos escuchar cómo disminuirían la inflación y cuál sería la respuesta del gobierno frente a la caída de los precios del petróleo. Queríamos conocer el plan a ejecutar para la reactivación de la producción nacional. Queríamos saber qué haría el gobierno para disminuir las cifras de criminalidad. No olvidemos que nada más el año pasado cayeron 25.000 venezolanos producto de la violencia. En fin, queríamos conocer las medidas con las que el gobierno enfrentaría los problemas que atraviesa nuestro país, pero nada, un discurso pirata. Nada de lo que dijeron soluciona la dramática crisis económica, social y política de nuestra Venezuela.

Este gobierno no solo se sigue burlando de nuestro pueblo, sino que sigue subestimando la inteligencia de los venezolanos. Hablar de un aumento salarial de 15% a los trabajadores, cuando la inflación está por encima de 64%, y los pocos alimentos que se consiguen presentan una inflación de 93%, en 12 meses, es una burla.

Nos parece sumamente injusto que, en un país con las reservas petroleras más importantes del planeta, la propuesta para que nuestro pueblo recupere su poder adquisitivo sea un incremento de 25 bolívares diarios a su salario. Ese aumento en nada soluciona el problema de la familia venezolana. Cómo resuelve un venezolano su día con 25 bolívares, cuando eso no alcanza ni siquiera para un café. Aquí lo que tenemos que hacer los venezolanos es unirnos para exigir al gobierno una política anti inflacionaria seria y acorde con la situación tan difícil que atraviesa nuestro país.

Y aquí vuelvo a insistirles a los venezolanos que aún tiene alguna expectativa por ese proyecto, que es hora de que abran los ojos y no se dejen manipular. Ahí está, volvieron a devaluar nuestra moneda y ahora toca esperar a ver a cuánto. Lo inaudito es que dejaron el cambio a 6.30 bolívares por dólar para el grupo de enchufados. Es mentira que será para alimentos y medicinas.

Sí, el verdadero anuncio que realizó Nicolás esta semana fue para proteger al grupo de enchufados que recibe dólares a 6.30. Ellos son los únicos que salieron ilesos con estos anuncios, al mantenerse intacto el mayor antro de corrupción que ha existido en nuestra Venezuela y que es el responsable de asignar divisas a discreción. Claro, ¿cómo eliminarlo? Eso acabaría con los privilegios del grupo de enchufados que siguen sin rendirle cuentas al país de los más de 25.000 millones de dólares que se robaron a través de empresas de maletín.

Lo que aún no queda claro, al menos hasta el momento en el que escribo estas líneas, es a cuánto quedará la unificación del Sicad, que ahora llamaron el segundo mercado, y quiénes tendrán acceso a él. También deben aclarar cómo funcionará el tercer mercado. Lo que sí queda claro es que si nuestro pueblo no se une para impulsar un cambio, esto va para peor.

No olvidemos que las medidas que “anunció” Nicolás no generarán los 30.000 millones de dólares que hacen falta para la operatividad de nuestra Venezuela en este 2015. Este gobierno disfrutó de las mieles que dejó la bonanza petrolera más importante de la historia de nuestra Venezuela e irresponsablemente las despilfarró. Se acabó esa bonanza y quedamos no solo sin ahorros, sino endeudados.

Por si fuera poco, ahora vienen a decir que no pueden seguir “regalándole” a los venezolanos la gasolina. La gran pregunta que nos hacemos, quienes creemos en una Venezuela de progreso, es si dejarán de regalársela a intereses extranjeros. Este gobierno sigue lavándose las manos y culpando a otros de sus errores. El gobierno controla el 74% de toda la comercialización de productos básicos pero son “otros” los responsables de la escasez.

Ahora salieron con el disparate de que el sector privado es el responsable de la escasez de alimentos, porque se han dado a la tarea de esconder la comida. ¡Por favor! Ya nadie se come ese cuento. Y aquí es cuando quiero alertar a los venezolanos, a quienes les pido que no pisen los peines que pone este gobierno. ¿Qué es eso de llamar irresponsablemente al pueblo para tomar control de las distribuidoras de alimentos? La solución a la escasez no puede ser promover e institucionalizar los saqueos a los pocos inventarios que aún quedan en el país.

Este gobierno debe entender que la solución a la crisis económica de nuestra Venezuela pasa por corregir los errores y no por engañarse y repetir las mismas fórmulas fallidas y las mismas frases vacías. A nuestro pueblo le decimos que no tiene que acostumbrase a vivir en este caos y en medio de esta improvisación.

Es imposible que nuestra Venezuela salga adelante con Nicolás y sus amigos, por eso debemos unirnos más que nunca para impulsar los cambios necesarios para que este país, de una vez por todas, abra las puertas al futuro. Recordemos que este año tenemos una gran oportunidad para unirnos, organizarnos e impulsar los cambios. Ya somos 80% los que queremos un país distinto. Vamos Venezuela que juntos sí podemos, porque hoy más que nunca sobran razones para uirnos y juntos lograr el cambio. ¡Que Dios bendiga a nuestro pueblo!

 

@hcapriles

Henrique Capriles Radonski