LA AUDIENCIA NACIONAL DE ESPAÑA falló el viernes a favor de extraditar a Venezuela a quien fuera enfermera del fallecido presidente Hugo Chávez por presunto blanqueo de capitales, aunque la mujer apelará la decisión y el gobierno español tendrá la última palabra.

La defensa de Claudia Patricia Díaz Guillén, quien llegó a ser una de las personas de mayor confianza de Chávez y titular del fondo encargado de invertir los ingresos por las exportaciones petroleras del país, alegó en septiembre ante el tribunal español que su clienta estaba siendo víctima de una “persecución política” por parte del gobierno de Nicolás Maduro.

Su abogado, Ismael Oliver, señaló que Díaz Guillén recurrirá la última decisión de la Audiencia Nacional, que en España tramita todos los casos de extradición.

El Consejo de Ministros, el máximo órgano de toma de decisiones en España, también debe dar en última instancia el visto bueno o denegar la extradición.

Díaz Guillén y su marido, Adrián Velásquez Figueroa, fueron detenidos a fines de abril en Madrid semanas después de que la fiscalía de Venezuela acusó públicamente al matrimonio de presunto lavado de fondos públicos que habrían ido a parar a empresas en Panamá.

Figueroa, empresario y militar, fue miembro de equipo de seguridad de Chávez.

Las autoridades venezolanas reabrieron el año pasado el proceso de los Papeles de Panamá, como se conoce a la filtración masiva de documentos del bufete jurídico panameño Mossack-Fonseca que sacó a la luz cómo poderosos y famosos escondían sus fortunas en paraísos fiscales.