Por un rumor de una supuesta violación a una niña asesinan a hombre en Caricuao
Por un rumor de una supuesta violación a una niña asesinan a hombre en Caricuao

Tener el rostro desfigurado, una mano y un ojo destrozados le llevó a José Gregorio Hernández, de 31 años, ser considerado como un monstruo por la comunidad del barrio El Onoto, parroquia Caricuao, municipio Libertador.

Según sus familiares, por su aspecto, vecinos le asesinaron tras haberse acercado a hablar con una niña de la zona y se regara el rumor de que había abusado de ella.

José Gregorio era un joven que quedó discapacitado hace nueve años. Sus deudos, con voz quebrada, comentaron en la medicatura forense de Bello Monte, que perdió su movilidad y su vida normal cuando la pareja de una prima arremetió contra él con un machete, pues se interpuso entre ellos para que no le pegara a la dama tras una crisis de celos.

“Le lanzó machetazos por doquier: mano, cabeza y cara, le rompió los tendones del brazo derecho y este le quedó guindando“, mencionaron los familiares.

Comentaron que en esa oportunidad “no murió picado en pedazos porque el mismo José Gregorio había medio amolado ese machete que se había encontrado en la calle. No tenía tanto filo, ni cacha tenía”. Destacaron que el agresor de Hernández es colombiano y, como no tenía papeles, las autoridades no lo buscaron. Se presume que se fugó a su país.

Además de quedar discapacitado, Hernández comenzó a sufrir alucinaciones, y se alejó a vivir solo en un rancho de zinc que armó en la parte alta del barrio El Onoto. Un familiar señaló que se dejaba crecer el cabello para taparse el rostro desfigurado porque le daba pena. “Él se sentía muy vulnerable. Se escondía de la gente, y llegaba molesto cuando se burlaban de él”.

El lunes 15 de octubre su nombre sonó en la comunidad. Según sus deudos, un vecino lo acusó de intentar agarrar y abusar sexualmente de una niña. Fue perseguido y golpeado varias veces. A la casa de una de sus hermanas llegó con la cara hinchada, la ropa destrozada y con un zapato roto en la mano. A pesar de eso, decidió marcharse a su vivienda.

Familiares de José Gregorio, quienes pidieron el resguardo de su identidad, relataron cómo murió su hermano: “El martes 16 de octubre, a eso de las 3 de la tarde, le dispararon cuatro veces: en la frente, espalda, mano y pecho”.

Los familiares, quienes ya presentaron la denuncia de rigor por el hecho, manejan la información de que los presuntos homicidas de Hernández fueron dos vecinos del mismo barrio. Presuntamente éstos habrían actuado de esa manera “porque no querían que se replicara el caso del asesino de los cuatro niños de El Valle”.

@Daigalaviz