Jheilyn Cermeño

Daniel Eduardo Vázquez Morffe, de 12 años de edad, estudiante de 2° año de bachillerato, murió tras ser atacado por un compañero cursante del 4° año dentro de una escuela técnica industrial, situada en la Avenida El Cuartel de Catia, parroquia Sucre, municipio Libertador.

Familiares informaron que el hecho se registró pasada la 1:00 de la tarde, cuando el grupo de jóvenes disfrutaba de un partido de fútbol en la cancha principal de la institución. Durante una de las anotaciones ocurrió una diferencia entre los jugadores por un gol, lo que generó una discusión. Daniel fue atacado por otro de los estudiantes de 17 años de edad, quien lo tomó por el cuello hasta casi asfixiarlo.

Ambos fueron llevados hasta la dirección del plantel, pero no había nadie. Fue entonces cuando de repente  Daniel comenzó a toser con sangre y a presentar problemas para respirar hasta que se desplomó en el suelo. Alumnos y profesores lo trasladaron hasta el Centro Diagnóstico Integral (CDI) Bolívar y Martí a unos pocos metro del liceo. Los galenos de guardia lograron intubarlo y prestarle los primeros auxilios pero minutos después falleció.

Allí también se encontraba su agresor quien según algunos testigos no podía creer lo que había ocurrido. “Yo no quería que esto pasara. Yo no quería matar a ese chamo”, dijo entre murmullos.

Parte del estudiantado se indigno por el crimen y de inmediato arremetieron contra el agresor. Éste fue sacado bajo custodia por los efectivos de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) que se encontraban  en el lugar.

Horas después funcionarios del  Senamecf llegaron al CDI y cerca de las 5:10 de la tarde llevaron el cuerpo de Daniel hasta la morgue de Bello Monte. Detrás de la furgoneta llegó un carro color gris con dos mujeres, una era Miriam Morffe, la madre del joven fallecido y la otra era su tía.

Entre lágrima, ambas se abrazaban. “Yo no puedo con este dolor tan grande”, expresaba Morffe, quien minutos después señaló que Daniel era su único hijo varón. “Dios mío ayúdame a soportarlo. Mi hijo era malcriado y algunas veces flojo, pero no malo”, expresó

Morffe indicó que vio a Daniel ese día en la mañana a la 11:00, luego de acudir a una reunión en el liceo. “Él era buen estudiante no estaba aplazado en ninguna de sus materias”.

“Yo lo amaba y él a mí.  Todos los días del mundo se lo decía; que él era el único hombre que yo amaba y se fue sabiéndolo. Era parte de mi alegría, le gustaba el fútbol, era fanático del Barcelona”, añadió.

Betty de Torres, vecina y representante de uno de los estudiantes en la escuela, refirió que varias han sido las asambleas para discutir el tema de la violencia y la agresión entre los estudiantes. “Situaciones en donde los cursantes de grados inferiores suelen ser lo más perjudicados y por ello tratan de defenderse de los más grandes”, dijo.

Señaló que entre las opciones está la custodia permanente de los oficiales de la PNB. Sin embargo, los funcionarios detallaron que han perdido la cuenta de cuantas veces han retenidos a los alumnos por riñas, ingesta de alcohol y hasta juegos de azar en las afueras y adyacencias de los recintos educativos de la zona. “Casi que a diario vemos como los chamos se esperan en la salida o se citan para golpearse”, acotó un agente que resguardó su nombre.

Vázquez Morffe estaba residenciado junto a su dos hermanas de 9 y 14 años, su mamá y padrastro en el barrio Isaías Medina Angarita en la  calle Libertad. Su progenitor fue asesinado cuando tenía tan solo 2 años de edad.

Sobre el otro muchacho se conoció que fue retenido por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones, Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) de Propatria quienes adelantan las pesquisas del hecho.

Los datos

Según datos recabados por el Monitor de Víctimas, entre mayo a octubre, en Caracas 45 personas han sido asesinadas por causas de asfixia, fuerza física y por objetos contundentes. 16 de los crímenes han ocurrido durante robos, y siete riñas que han comenzado en el sitio. Otras tres por violencia de género. Dos por violencia política y tres productos de linchamientos

Entre los casos con menores de edad 5 de ellos han sido a golpes de los cuales de tres de los casos  en riñas o pleitos.