Negligencia y desinversión estatal precipitan colapso operativo de Venalum luego de una falla eléctrica
Negligencia y desinversión estatal precipitan colapso operativo de Venalum luego de una falla eléctrica

Venalum

 

Desincorporación masiva de celdas de Venalum (137 de las 283 operativas) reduce a la empresa a menos de una línea de producción, lo cual indica que la principal reductora de aluminio del país dejaría de percibir ahora 10,7 millones de dólares al mes, tomando en cuenta el precio del aluminio a tres meses de la Bolsa de Metales de Londres (LME, por sus siglas en inglés). Técnicos de la industria aseguraron que el hecho fue resultado de la mezcla de impericia gerencial, desatención y falta de equipos e insumos.

  María Ramírez Cabello

mramirezcabello@gmail.com

La reductora de aluminio Venalum siguió tocando fondo en los últimos días, cuando continuó la desincorporación masiva de celdas tras el apagón de 10 horas -el lunes- que cortó el suministro eléctrico a las debilitadas líneas de producción, que ya registraban problemas de suministro de alúmina, retrasos en la sustitución de ánodos de carbón, además de demoras en labores de mantenimiento y desinversión.

137 celdas han sido desincorporadas desde el lunes, cuando la estatal operaba con 283 celdas conectadas. En la tarde de este jueves, quedaban en servicio 146 celdas, que representan menos de una línea de producción de la reductora, confirmó un técnico de la planta.

Venalum cuenta con cinco líneas de producción, cada una con 180 celdas para un total de 900 celdas a las que se suman cinco con tecnología V-350. La industria operaba este jueves a 16% de su capacidad instalada y el punto de producción más bajo de los últimos años.

Las líneas más afectadas son la 1 y 3, que contaban con apenas 12 y 13 celdas, respectivamente. La quinta línea registraba la mayor actividad, con 98 celdas, el mayor número de celdas conectadas en la industria.

La industria atraviesa uno de los peores momentos desde su inauguración en 1978, como la mayor planta reductora de aluminio primario en Latinoamérica considerando su capacidad instalada de 430 mil toneladas al año.

La estatal que fue modelo de productividad en años anteriores no ha logrado recuperarse del recorte energético de 2009 que obligó a apagar cerca de 400 celdas y que llevó la industria al suelo, pese al compromiso incumplido del gobierno de restablecer su ritmo operativo.