En el marco del debate de representantes del mundo sindical con la Comisión de Desarrollo Social de la Asamblea Nacional (AN), el Instituto de Altos Estudios Sindicales (Inaesin) consideró esta reunión como un paso importante luego de muchos años en  que las puertas del Poder Legislativo estaban cerradas para los trabajadores autónomos. Los académicos afirmaron la necesidad de la aprobación de una  Ley Orgánica de Libertad Sindical y el establecimiento de una política de dialogo con presencia de la Organización Mundial del Trabajo (OIT).

León Arismendi, director general de Inaesin, explicó que la AN busca, como lo recalcó el diputado Miguel Pizarro, que todas las iniciativas legales provenientes de la Comisión de Desarrollo Social cuenten con la anuencia de todos los sectores del mundo sindical, algo que calificamos correcto. “Podríamos decir que, desde 2003, no había un diálogo franco entre el Poder Legislativo y los voceros de los trabajadores, algo que afecto mucho la realidad social de este sector”, dijo.

Arismendi señaló que la AN, en esta reunión, además de escuchar un mar de reclamos y problemas que viven los trabajadores relacionado, en su mayoría, a temas salariales, centró su debate en dos puntos fundamentales: el primero, la promulgación de una Ley Orgánica de Libertad Sindical. “Este instrumento legal buscaría corregir las reglas de discusión de contrato colectivo, las cuales son anti-autonomista, las cuales han sido criticadas duramente por la OIT. Aquí no se busca tocar los beneficios sociales de los trabajadores, estos se mantendrán. Se tiene como objetivo crear  un marco legal democrático y libertario para que los trabajadores puedan así hacer valer sus derechos”.

El profesor de la UCV indicó que esta Ley consagraría la libertad de organización, donde los trabajadores no se vean coartados y dirigidos por el Estado, logrando suprimir toda esa cantidad de obstáculos que la legislación actual le pone al ejercicio del sindicalismo. “También se debe proteger la acción de la discusión de contrato colectivo, la cosa  no es darle a la persona el pescado sino enseñarlos a pescar, es darle a la clase obrera un instrumento para discutir y presionar a los patronos, sin interferencia del Gobierno como un tercero, recordando que estamos en un país en donde este es el mayor empleador”, afirmó.

Recalcó la necesidad de diálogo sobre la realidad que viven los trabajadores en Venezuela, allí la Asamblea Nacional está abriendo sus puertas y están dispuestos a recibir y escuchar una misión de alto nivel designada por la OIT se apersoné al país. “Así evaluar porque en Venezuela el diálogo social esta truncado, este es un punto fundamental en el cual Inaesin centrara sus esfuerzos en los talleres y debates académicos”.

En la reunión también estuvo presente Linerby Sánchez, directora de proyectos de Inaesin, quien destacó la importancia de este tipo de encuentros reconociendo el orden y unidad del movimiento sindical, que a pesar de sus diferencias lograron exponer de forma magistral la difícil realidad de los trabajadores en el país. “Igualmente quiero recordar el fallecimiento del dirigente obrero Pablo Castro, miembro del directorio de nuestra institución, al cual rendimos homenaje y seguiremos su línea de trabajo basada en la ética y defensa de sindicalismo autónomo”.