El ministro para la Defensa, Vladimir Padrino López, confirmó la muerte de los capitanes, Ronald Ramírez Sánchez (32 años de edad) y Jackson García Betancourt (33 años), quienes piloteaban el Sukhoi-30 que se estrelló la noche del jueves en la zona fronteriza con Colombia.

Desde el Comando Presidencial instalado en el Palacio de Justicia, Padrino López leyó un comunicado en el que la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), se solidariza con los familiares de los pilotos fallecidos.

«Le comunicamos al pueblo de Venezuela el sentimiento de toda la Fuerza Armada Bolivariana ante los acontecimientos ocurridos en el día de ayer y que ha enlutado a la familia militar. La FANB informa el fallecimiento de los capitanes Ronald Ramírez Sánchez y Jackson García Betancourt, integrantes de nuestra Gloriosa Aviación Militar Bolivariana, quienes piloteaban un avión Skhoi-30 la noche del 17 de septiembre de 2015  aproximadamente a las 21:07 horas».

Explicó Padrino López que la aeronave se estrelló, «cuando sobrevolaba la región del cajón del Arauca en el estado Apure, ante un llamado de alerta de la incursión de una nave ilegal detectada por nuestro Sistema de Defensa Aeroespacial Integral».

Indicó que Ramírez Sánchez dejó  «su esposa y un hijo de dos años de edad», mientras que García Betancourt «deja también a su esposa con ocho meses de embarazo y una hija de 7 años de edad».

«La FANB reitera su irrestricta solidaridad a la familias de estos insignes oficiales y el compromiso ineludible de seguir combatiendo los flagelos del narcotráfico y demás delitos que atentan contra nuestro país».

«Toda la institución castrense lamenta enormemente la abrupta partida de dos de sus integrantes, oficiales de aquilatada virtudes, con un inmenso sentido patriótico, que cumpliendo el juramento sagrado de honrar y proteger a Venezuela, ofrendaron sus vidas en defensa de los más nobles intereses de la nación y sus ciudadanos», leyó el ministro.