AD ya se declaró en campaña. El primero en haber diseñado gira para calentar al partido, es el secretario general, Henry Ramos Allup. Este va enfocar el recorrido en cuatro aspectos: desnudando al Gobierno; confirmando la alianza natural que se ha dado entre blancos y azules de UNT; estimulando a que AD vuelva a ser un partido de aguerrida militancia electoral; y despejando dudas –si las hay- de que Pablo Pérez es el mejor candidato no sólo para ganar las primarias de la oposición sino también el mejor para ganarle a Hugo Chávez.
El cónclave adeco se dio ayer en un marco crudo de discusión. Los secretarios generales se dijeron lo que en mucho tiempo no se decían cara a cara. La vez anterior fue a raíz de la expulsión de Luis Alfaro Ucero. Entre 1999 y ayer, este debate no había sido posible porque el partido intentaba más bien enfrentar los demonios internos. Más unificado, la jornada sirvió para recodar, sí, que desde 1993 Acción Democrática no lleva candidato propio. El último, Alfaro Ucero, fue defenestrado antes de concurrir a elecciones, con lo cual, la candidatura de Claudio Fermín –segundo de spués de Rafael Caldera- se ve como si de tiempos prehistóricos se tratara.
Desde hace un año, Ramos Allup lo venía repitiendo. AD no llevará candidato propio. Lo primero es la unidad. Y la recuperación del partido, más por la fórmula de las gobernaciones. AD se prepara para ganar, en el marco de la unidad, al menos seis gobernaciones. De ese modo, Ramos Allup sorteó las fuerzas internas que insistían en proponer su nombre. “No hay que volverse loco”, decía. Y no se volvió loco. El candidato es Pablo Pérez, el gobernador del Zulia, ex-adeco, pero líder de UNT.
La decisión, unánime, no pasó por alto el debate, como todo en un partido que conoce el poder. Cumaná, Lara y Caracas, se pronunciaron en principio por Antonio Ledezma. Al final, Iván Marcano, amigo de Ledezma, quedó como única voz, abogando por la candidatura del alcalde Mayor de Caracas. Ledezma había propuesto la reunificación de la familia adeca con UNT y ABP. Entonces, Pablo Pérez no dijo nada. Porque sabía que en el terreno real, el proceso se iba a dar, sin decretarlo. Y es eso lo que está ocurriendo. Los adecos observan a Ledezma y Pablo Pérez como dos de los suyos. Sin embargo, a la hora de empujar una candidatura ganadora, escogieron por lo más seguro. Porque entre otras razones, AD no puede correr el riesgo de perder. Sería un golpe de un alto costo, anotarse a perdedor. Falta saber qué va a hacer Ledezma. Lo más natural es que resuelva darle el respaldo a Pablo Pérez.
En una dos semanas, calculan, se verá el impacto de la decisión de AD. Parte de la pegada ya estaba descontada. Pero hay regiones en las que AD y UNT lucen imbatibles como estructuras partidistas. Y ambos ahora quieren sumar más. Bregan el apoyo de Copei. En esto, ya hay avances.
Tres aspectos son fundamentales al momento de un votante inclinarse por Pablo Pérez:
1-De los dos que polarizan en las primarias, es el único que garantiza la tarjeta única. Ya se ha dicho, con tarjeta única, es más seguro derrotar a Chávez.
2-Encarna lo popular sin dejar de ser una candidatura de mensaje moderno, de avanzada.
3-Está convencido de que el próximo es un periodo de transición. Que la reelección es de nefasta experiencia en Venezuela. Y que otros como Henrique Capriles, Leopoldo López, María Corina Machado, merecen ser presidentes. Y para que lleguen, hay que evitar la reelección a ultranza. Es un compromiso.
