Calificó como chucuto aumento de 30% del salario mínimo

En el marco de la conmemoración del Día Internacional del Trabajador, este 1º de Mayo, el gobernador de Miranda, Henrique Capriles, encabezó un acto en el Teatro Emma Soler del Complejo Cultual Cecilio Acosta de Los Teques, para reconocer la labor y el compromiso de más de 2 mil 650 servidores del Ejecutivo regional. Aseguró que el 30% de incremento del salario mínimo no compensa la alta inflación que existe en el país, por lo que lo calificó como un “aumento chucuto”.

“Yo estoy en desacuerdo con la situación económica que estamos viviendo, y este aumento salarial me parece chucuto, así como lo que nos ha tocado lidiar en términos de reivindicaciones laborales. Todos los trabajadores del país merecen una mejora salarial que les permita compensar la terrible inflación. Yo quiero que esto cambie, pero para lograr que cambie debemos luchar juntos. Este país está destinado a ser grande”.

Reiteró que a pesar de que Venezuela posee las reservas más importantes de petróleo del planeta, tienen el segundo salario mínimo más bajo del continente, después de Cuba.  “¿Cómo vive una familia de cinco personas, y que tan solo uno o dos trabajen, y ganen salario mínimo? ¿Cómo hacen para comer? Si la canasta alimentaria está sobre los 10 mil bolívares. ¿Cómo hace cuando se enferman?, si las medicina están tan caras. Vaya a un hospital público para ver las carencias. Los pacientes tienen que comprar su kit médico. Nos encantaría un panorama económico distinto al que estamos viviendo, porque no podemos hablar de aumento del salario cuando la inflación el año pasado cerró en 60%, cuando hay un incremento en los precios de los alimentos, las medicinas, los materiales de construcción y del pasaje”.

Cuestionó que el gobierno siga insistiendo en un modelo económico que no funciona.  “Tenemos un gobierno que se dice llamar defensor de los pobres, pero todas esas medidas económicas a quien golpea más fuerte es al pobre.  Por eso estamos visitando las comunidades y caseríos para hablarle al pueblo, para poder generar desde ahí un cambio. Un cambio que les permita a los venezolanos recuperar su valor adquisitivo, porque con este modelo no vamos a progresar. Ojalá llegué el tiempo para que nuestros trabajadores sí reciban un verdadero aumento salarial, porque ese aumento es una media compensación. Además,  merecemos un gobierno que hable de la creación de nuevos puestos de empleos, con puestos de empleos estables y de calidad”.

Sobre la escasez, Capriles aseguró que eso es consecuencia del fracasado del Gobierno en materia económica. “Hoy casi todo lo que se consume en Venezuela es importado, y esto genera un gasto gigantesco, que se ha visto afectado porque no hay suficiente dólares para sostener esa situación. Entonces, cuando la demanda es mayor de la oferta, los productos escasean y aumentan de precios. ¿Cómo se controla esto?, cuando el país se ponga a producir. Cuando tengamos más y mejor productos, los precios bajaran y el venezolano podrá comprar lo que quiere, ese es el modelo progresista, y vamos a luchar hasta cambiar este modelo castro-comunista”.

Lamentó que en el país se encarcele a personas por tener un pensamiento distinto al Gobierno, y abogó por la aprobación de una Ley de Amnistía, para dejar en libertad a los presos políticos. “Nosotros queremos un país donde no haya presos personas por pensar distinto, por cuestiones políticas, que quien quiera protestar lo pueda hacer libremente sin miedo porque ese es su derecho. En un país donde no haya venganzas ni pases de facturas.  Yo creo en ese país, y por eso creo en el diálogo. El diálogo no es para hacer pactos, sino para buscar soluciones a los problemas”.

Asimismo, el Gobernador de Miranda exigió a la ministra de Asuntos Penitenciarios, darle respuestas a los privados de libertad que esperan por traslado a un penal. “Las sedes de las policías no son centros de reclusión. No tenemos ahí las condiciones para que una persona pueda pagar una condena, para eso hay centros penitenciarios. No sé qué busca el Ministerio con esta situación. Ellos tienen la responsabilidad de que las sentencias se cumplan donde deben  cumplirse y donde los privados de libertad tengan garantizados sus derechos”.