Dialogar en cadena da rating. Más que un Miss Venezuela o algunas de las telenovelas. El encendido de la televisión en señal abierta creció un 41% durante la transmisión del encuentro entre el Presidente Nicolás Maduro y los representantes de la oposición (reunidos en la Mesa de la Unidad Democrática), que se realizó el jueves pasado, a partir de las 8:05 de la noche, según cifras de la consultora AGB Venezuela.
Y aunque el interés de la audiencia fue disminuyendo hasta la 1:54 de la madrugada, cuando Maduro dio fin a la cadena nacional, el encendido fue muy superior a los índices registrados durante los nueve días anteriores del mes de abril, tal como concluye la firma venezolana especializada en mediciones de rating y share.
Entre las 8:05 y las 8:34 de la noche, en más de 1.400.000 hogares -del total de 2.127.142 que son medidos por AGB en seis ciudades del país: Caracas, Maracaibo, Barquisimeto, Valencia, Ciudad Guayana y Puerto La Cruz- los televisores se mantuvieron encendidos en algunos de los canales que transmitía el «diálogo nacional».
A esa hora, el Presidente Nicolás Maduro llegó al salón Ayacucho del Palacio de Miraflores, saludó a sus ministros, así como a los representantes de la oposición, incluyendo al Secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática, Ramón Guillermo Avelado; al Secretario general de Acción Democrática, Henry Ramos Alup; y al Gobernador de Miranda, Henrique Capriles Radonski; y, acto seguido, se dirigió a los venezolanos durante más de 30 minutos en cadena nacional para dar paso a cada uno de los participantes.
Entre las 9:00 y las 9:34 de la noche, la cifra aumentó a más de 1.800.000 televisores encendidos en hogares venezolanos, cuando Ramón Guillermo Aveledo presentó un cronograma para iniciar el martes 15 de abril la consideración de la libertad de los presos políticos, crear una Comisión nacional por la verdad, y desarmar a los grupo militarizados, entre otros puntos. Mientras que el Canciller de la República, Elías Jaua, argumentó que cada vez que «la revolución gana una elección» la oposición «le da una patada a la mesa».
Las de Aveledo y Jaua fueron, de hecho, las intervenciones que registraron mayor sintonía en la televisión abierta el pasado jueves 10 de abril, incluso más que las de Maduro o la del Nuncio Aldo Giordano al inicio de la transmisión.
A las 9:35 de la noche comenzó a descender lentamente la audiencia hasta cerrar, a la 1:54 a.m. con apenas 400 mil televisores encendidos (se insiste: del total de 2.127.142 que son medidos por por la firma AGB).
El Gobernador de Anzoátegui, Aristóbulo Istúriz, no pudo contener la caída de la sintonía desde las 9:55 hasta las 10:05 p.m. Como tampoco lograron evitar perder audiencia poco a poco Diosdado Cabello; el diputado de Primero Justicia, Julio Borges; el Gobernador del Estado Lara, Henry Falcón; el ex gobernador del estado Aragua, Didalco Bolívar; la diputada Blaca Eekhout, el Alcalde de Libertador, Jorge Rodríguez (a pesar de su «me caes malísimo» a Andrés Velásquez, que se convirtió en un video viral) y el propio Presidente Maduro al cerrar el encuentro.
Roberto Enríquez, Presidente del partido social cristiano Copei, en cambio, logró mantener a la audiencia pegada frente a la pantalla de 10:00 a 10:15 p.m. Una vez que comenzó la caída en la sintonía, Henry Ramos Allup, secretario general del partido Acción Democrática, fue el uno de los que logró subirla, de 10:25 a 10:45 p.m, con una cátedra de Derecho constitucional. Y ello a pesar de que dobló el tiempo de su intervención, en la que intentó dejar en evidencia que conceptos como los de revolución, hegemonía o unión cívico-militar no aparecen en la Constitución. Y Simón Calzadilla, integrante del Movimiento Progresista de Venezuela, fue el otro que pudo subir algo de la sintonía.
Pese a la hora de su alocución, de 12:45 a 12:55 a.m., el Gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles Radonski, mantuvo conectados a todos sus espectadores mientras revelaba que había conversado telefónicamente con Nicolás Maduro el 14 de abril de 2013 y habían acordado un recuento de los votos, amén de advertir que «o esto cambia o eseto revienta», refiriéndose a la crítica situación sociopolítica venezolana.
La mayoría de los espectadores (29%) prefirió sintonizar Venevisión para ver la transmisión de la cadena, mientras que otros prefirieron Televen (28%), Venezolana de Televisión (25%) y Globovisión (12%). El resto se lo distribuyeron entre Tves y otros canales (6%) de televisión abierta.
Daniel Fermín
Simón Villamizar
