Resumen De Palabras Del Presidente Nicolás Maduro en la Conferencia por la Paz - Runrun

Nicolás Maduro

Ayer el presidente Nicolás Maduro se dirigió en cadena nacional desde El Palacio de Miraflores con motivo a la Conferencia por la Paz convocada días atrás, encuentro en el que hablo de los siguientes temas:

José Vicente Rangel tomaría la palabra para comentar que estaba consciente de la sinceridad de lo dicho por el presidente Maduro: «Estoy convencido, y puedo ratificarlo perfectamente esta noche aquí, ante ustedes, primero, que es un hombre de principios. Que lleva la ética a la política y, luego, que es un hombre de palabra, como él mismo lo acaba de decir. Y es muy importante que el jefe del Estado sea un hombre con esas cualidades. Es una garantía para cualquier acción que se inicie, particularmente una tan importante, tan sensible, tan delicada como es buscar la coincidencia creadora entre los distintos sectores que integran la nación venezolana».

»Pero también quiero agregar que así como estoy identificado con su planteamiento, sus palabras (…), en lo personal he sido toda la vida un militante del diálogo. En circunstancias muy difíciles, adversas muchas veces. Difíciles para el país. No es la primera vez que Venezuela vive tensiones, agudas tensiones, como las que estamos viviendo. Y en esas circunstancias di mi contribución como ciudadano, como dirigente social y político. Y llegué a la conclusión de que uno, en momentos en que tiene que dar una contribución al país, tiene que desprenderse de mezquindades, de pequeñeces, empezando por reconocer algo que es fundamental: que una sociedad es compleja, que hay diversas posiciones, diversas actitudes, y que la base para poder emprender un diálogo creador es, ante todo, reconocer las divergencias».

»Reconocer que los que son adversarios políticos tienen tanto derecho como uno a expresarse y a participar. Yo tengo temor de las circunstancias por las cuales atraviesa el país (…). Temor que no es miedo, sino angustia, preocupación y creo que cualquier venezolano responsable tiene que abrigar ese sentimiento. Por primera vez (…), el estigma de la sangre derramada aparece en el escenario. Y eso es verdaderamente grave. Y estoy seguro de que es algo que inspira a un hombre como Nicolás Maduro».

Tras decir que estaba resteado con el diálogo, Rangel concluyó así: «Creo que es un deber de cada uno de nosotros, el trabajar en esa dirección y que los que no vinieron (…) y no vamos a escrutar en este momento las razones que tuvieron para no estar presentes, sean interlocutores válidos próximamente. Que este conjunto de compatriotas que se reunió esta noche sirva de ejemplo de que podemos dialogar y que por tanto opere como un incentivo en el ánimo de ellos. Avancemos, pues, por el camino del diálogo, que es el camino hacia la paz y la paz es fundamental para el destino nacional»

Luego, el Nuncio Apostólico leyó un mensaje del papa Francisco y tomaron la palabra un diputado opositor, el gobernador Aristóbulo Istúriz y, acto seguido, Jorge Roig, quien expresó, en primer lugar, su agradecimiento por haber sido invitado a sumarse a la conferencia por la paz. Le dijo, además, al presidente Maduro: «Queremos celebrar el tono con el que usted hoy se ha dirigido al país. Ese es el tono que uno espera escuchar de un jefe de Estado, y lo instamos a que siga con ese mismo tono».

Roig expuso: «Usted (Maduro) tiene que escuchar otras voces distintas a las que lo acompañan (…). Allá afuera hay muchos muchachos peleando por legítimas protestas. Esto no justifica la violencia (…); la rechazamos venga de donde venga y lo primero que tenemos es que condenarla como venezolanos».

El presidente de Fedecámaras también se refirió a las tasas de inflación y desabastecimiento que exhibe el país actualmente y añadió: «En estos momentos conseguir trabajo es casi imposible (…). Nos estamos matando entre venezolanos y eso es grave (…). Usted tiene una responsabilidad como jefe de Estado, como el primer responsable de calmar los ánimos de este país».

«Nosotros creemos en el diálogo. Y el diálogo no significa claudicar posiciones», agregó Roig. «Tenemos profundas diferencias con su sistema económico y su sistema político, pero la democracia, gracias a Dios, permite que procesemos estas diferencias en este tono en que las estamos procesando el día de hoy».

El presidente de Fedecámaras también advirtió: «Creemos en el diálogo, pero el diálogo no es una fotografía como esta, donde hoy nos vamos a sonreír, donde hoy nos dimos la mano y vamos a celebrar el haber compartido este bellísimo momento que Venezuela está pidiendo a gritos. El diálogo tiene que continuar cuando esto termine».

Concluyó Roig así: «Usted necesita un empresariado que corrija errores para que no escuche solamente las voces que normalmente un presidente, en el aislamiento del poder, está acostumbrado a escuchar. Usted necesita una oposición sana. Usted necesita unos empresarios que le corrijan la situación económica, donde no están acertando. Y para eso estamos los empresarios (…). Cuente usted con el empresariado, con toda la ayuda que tengamos para construir este país, donde podamos todos vivir con felicidad y, eventualmente, poder morir dignamente».

Miguel Cocchiola, alcalde de Valencia, seguiría en el turno.

El alcalde de Caracas, Jorge Rodríguez, dijo que el actual clima de violencia ha desembocado en hechos que se han visto en otros países «y esos países sucumbieron a la violencia más terrible. Pienso en los Balcanes, pienso en Ruanda. Lo que ocurrió en Ruanda, por ejemplo, no puede compararse en magnitud… Mucho más intensa ha sido la agresión a que ha sido sometida la patria (…) porque pensamos diferente».

Dirigiendose a Jorge Roig, el alcalde de Caracas expuso: «Usted dice que el país no está bien y yo pienso en los 417 sectores de Caracas donde ya ha llegado la Gran Misión Barrio Nuevo Barrio Tricolor (…), los niños y niñas de Venezuela con sus Canaimitas (…), se erradicó el uso de Perrarina para consumo humano. Yo estoy feliz de vivir en el país que vivo porque me permite que sigamos trabajando para corregir los errores que hayamos cometido. Como ni usted ni yo estamos vacunados contra el virus del odio, estamos obligados a diseminar y repartir esa vacuna entre todas nuestras hermanas y nuestros hermanos».

Rodríguez dio punto final a su intervención así: «Nosotros estamos obligados a querernos bien, a ser más agradables entre nosotros (…), a decirnos la verdad y a compartir la verdad de los otros para poder seguir viviendo juntos».

El periodista Vladimir Villegas sugirió al presidente Maduro que se le concediera una amnistía al comisario Iván Simonovis como señal de nueva voluntad, si es que de verdad se van a revisar posiciones. Igualmente, le dijo al mandatario que era importante una reunión con los estudiantes. Y le pidió una reunión con Jorge Roig porque «tiene cosas que decirse, en público y en privado. Armemos esa agenda. Yo estoy aquí para eso, con esa voluntad, con ese deseo».

Leopoldo Puchi dijo no venir dispuesto al debate, sino con una reflexión. Destacó la importancia del diálogo. «No se trata de buscar consensos ni estar de acuerdo en todo, ni tampoco de repetir lo que se llamaba pacto de elites (…) pero sí está planteado buscar acuerdos y entendimiento y esto no es un pacto de elites».

De acuerdo con Puchi, «esos acuerdos y entendimientos requieren la participación de los partidos políticos. La sociedad y la vida política no es todo. La sociedad es mucho más amplia que su componente político y las formas de participación política a través de los partidos. Es mucho más, pero esa parte es una parte sustancial de la vida y de la participación política en una sociedad, de tal manera que ese componente, uno de los puntos centrales que podemos sacar de aquí es promover que los partidos políticos —como representación de los venezolanos— tengan en el diálogo un papel importantísimo que jugar. Eso me parece a mí esencial»

Agregó: «Creo que hay que estudiar la coyuntura actual, lo inmediato. El diálogo puede ser mucho más amplio (…) pero tenemos un punto inmediato (…). La violencia callejera no es una manifestación pacífica y debe ser, obviamente, criticada y debe superarse de inmediato. Eso es una responsabilidad de factores políticos de la oposición. Es decir, pronunciarse claramente sobre ese tema
(…). Sobre esa materia no ha habido un pronunciamiento con la suficiente firmeza (…). Debe quedar claro que eso no es parte de la forma como se van a dirimir las diferencias en el país y tiene que ser expresado claramente por los actores políticos gubernamentales y de oposición».

Del mismo modo, calificó de absurdo el pedido de renuncia para un presidente que está recién electo. «Ojalá pudiéramos dar respuesta a todo ese problema de las redes sociales, que son una cosa súper interesante y una participación masiva, pero que a veces contribuye a una neurosis colectiva muy grande, creando matrices que nada tiene que ver directamente con la realidad».

Puchi también resaltó la necesidad de moderar el lenguaje también: «Si a alguien se le dice que se la va a amansar, evidentemente no se contribuye a un clima favorable a la interlocución y el debate (…). También hay que restablecer una zona importante de la vida política que es la vida parlamentaria y allí puede el sector gubernamental dar una gran contribución (…). Contribuiría también al manejo adecuado de la coyuntura el tema de los detenidos por participación en eventos de naturaleza política (…). Son contribuciones que pueden darse junto con la reunión de estudiantes, señalo de lado y de lado».

El dirigente sindical Wills Rangel manifestó al presidente Maduro que podía contar con los trabajadores para «apalancar todo tipo de conflicto laboral que exista».

El padre José González de Zárate, en representación de la Conferencia Episcopal Venezolana, reiteró el compromiso de la Iglesia venezolana «en la construcción de esta paz». Añadió: «Nos solidarizamos con todos los que sufren en Venezuela en este momento a causa de los acontecimientos que hemos vivido (…). Ofrecemos una vez más la contribución que desde la CEV podamos brindar a ese crear espacios de encuentro para la solución de los problemas de Venezuela, para la construcción del bien común».

A su turno, Diosdado Cabello, presidente de la AN, dijo que nunca se han negado a la posibilidad de dialogar con la oposición y luego pasó a exponer las vías por las que la oposición podía conseguir la salida de Nicolás Maduro de la presidencia, entre la que expuso la posibilidad de llamar a un referendo revocatorio. «Si quieren hacer un referendo revocatorio tiene que esperar tres años y recoger las firmas. Es lo democrático, por lo menos los que creen en la demo (…) Ese escenario no es el planteado».

Acerca de la instalación de una comisión de la verdad, Cabello se mostró de acuerdo, a la vez que dijo que la AN ya estaba trabajando al respecto. Expresó: «También vivimos en la AN la comisión de la verdad el año 2002 y el país es testigo. Yo estuve sentado 7 horas de interpelación. Y cada vez que llevábamos a alguien de los golpistas, se iba corriendo».

Dijo no estar de acuerdo con que el país esté dividido en dos mitades del mismo tamaño, en términos de tendencia política. «¿Quién cree que por la vía de la violencia le va a imponer a una mitad sus criterios? ¿Quieren una guerra para toda la vida pensando que tienen la razón? 76% de los municipios en elecciones de hace apenas tres meses fueron ganadas por sectores cercanos al oficialismo (…). Fueron a las elecciones con una premisa (…) pero además: “Nicolás, te vas el 9”. Eso no es juego democrático. Y hoy hay mucha gente de la oposición que quisiera estar aquí y no los dejaron las presiones de los grupos internos».

También se refirió a «sectores empresariales que nunca habían producido tanta plata como durante la revolución» pero de todos modos habían contribuido en el golpe de Estado del año 2002. Pidió deponer la actitud violenta y darse la mano por Venezuela. Acerca de olvidar lo pasado, Cabello dijo: «Muy difícilmente lo vamos a olvidar. Pero sí podemos perdonar. ¿Aquí nosotros cómo nos olvidamos de los muertos que ha habido? No hay manera. Pero ambos debemos ceder. El gobierno ha demostrado que tiene toda la intención de ceder. En verdad no notamos eso de otros sectores. La AN está también abierta para que los distintos grupos que quieran hablar vayan».

Luisa Ortega Díaz, Fiscal General de la República, dijo que la iniciativa presidencial «nos coloca en la dirección correcta para unir el país en objetivos e intenciones comunes pero yo creo que el alcanzar la paz depende de cada uno de los que estamos aquí y también del pueblo que, además de participar de esa paz, reclama de todos nosotros la paz».

Pidió insistir en el llamado a «aquellos actores que no vinieron porque esto debe unirnos a todos (…). Hay que invitarlos». Asimismo, dijo que el deseo de conquistar la paz pasaba «por cumplir una serie de postulados dictados por una serie de principios y valores inherentes a la persona. No es posible conquistar la paz cuando se atenta contra las instituciones (…), contra la presidencia de la República que ha sido legítima y constitucionalmente electa. El ataque desmedido y feroz que ha habido contra las instituciones del Estado venezolano nunca se había en la historia republicana (…). Hay que comenzar a deponer esas actitudes (…). Una muestra de paz que vamos a dar todos es que mañana las calles de este país amanezcan y que podamos transitar libremente».

Hizo otro llamado a la FANB a actuar «apegada a los derechos humanos, como ha sido el norte de este país, porque Venezuela se ha convertido en un Estado garante y respetuoso de los Derechos Humanos (…). Puede ocurrir que alguno cometa un exceso y viole los Derechos Humanos pero los estamos castigando».

También pidió cesar el desprestigio contra Venezuela. «Es insostenible la manera como Venezuela ha sido atacada a nivel internacional, no solamente por voceros políticos, artistas, deportistas (…). La paz también comienza por llamar a las personas, amigos que tenemos en el extranjero, que hoy en Venezuela ha ocurrido un evento histórico, importante, y que va a marcar el inicio definitivo de la paz en el país».

Pidió el cese del hostigamiento a las instituciones del Estado y agregó: «No es posible que porque una persona sea afecta a un partido determinado sea perseguida, acosada».

El alcalde del municipio Churuguara sería el siguiente en el turno.

Winston Vallenilla también tuvo turno y comenzó diciendo que toda Venezuela debía estar contenta de ver la cadena nacional donde todos trabajaban para el alcance de la paz. «Todos los que estamos aquí queremos la paz, queremos la vida para Venezuela», dijo.

Dijo a los artistas de oposición que «se deben al público a todos los venezolanos en general, independientemente de su tendencia política o de su clase social. Los artistas tenemos que ser promotores de paz. Los artistas no podemos estar pidiendo una intervención extranjera y hacer de eso un trofeo o una gloria. Este es nuestro país».

A los artistas que viven en el extranjero les dijo que «se vengan para Venezuela a trabajar por la paz, por que no haya más intolerancia. Vamos a unirnos todos los artistas, respetando la Constitución, respetando al presidente legítimo Nicolás Maduro y vamos a abrazarnos como hermanos, como artistas a trabajar por la paz de este país».

Pidió promover los valores de la familia. «Quitémonos los colores políticos como artistas que somos. Hagamos conciertos por la paz (…). No critiquemos a este país maravilloso. ¿Que tiene cosas que corregir y que tiene problemas? Aquí nadie lo niega».

Otro pedido de Winston Vallenilla fue que, en vez de haber divisiones haya respeto y trabajo conjunto por el bienestar de la patria. Y llamó a los artistas radicados en el extranjero a regresar al país: «Bienvenidos a trabajar por este país por la paz y por la vida. Somos venezolanos, orgullosamente venezolanos».

El empresario Lorenzo Mendoza manifestó: «Aquí hace falta que realmente nos duela lo hecho en Venezuela». Pidió paz para los actores económicos: «Hace falta dar un paso adicional que es la gran convocatoria a la comisión de la paz económica».

Desmintió que el país estuviera polarizado en materia económica, como lo señaló el periodista Vladimir Villegas en su turno. «Yo recorro el país (…), mi pasión, mi manera de vivir el país, me lo exige el trabajo. Uno no puede liderar por apellido, uno tiene que liderar por conocimiento». Pidió restablecer el diálogo de manera sincera y echar abajo la tesis de que lo individual y lo colectivo chocan porque dijo que esto era falso. Y pidió que el sector privado y público trabajen de manera más estrecha, pues manifestó que las iniciativas conjuntas Estado – empresariado eran las que las comunidades abrazaban de manera más decidida.

La presidenta del Tribunal Supremo de Justicia, Gladys Gutiérrez, intervino y luego, el alcalde Melvin Méndez, de Lagunillas. Dijo estar convencido de que el país «está reclamando un gran diálogo sincero, que sea capaz de devolver, en primer lugar, la tranquilidad a la gente, pero en segundo lugar de garantizar el abastecimiento pleno, alimentario a la población».

Añadió: «Rectificar es de sabios. Yo creo que hay que buscar la verdad donde esté. Hay un pueblo que nos está reclamando (…) que hagamos los esfuerzos para poder vivir en mejor condiciones».

Méndez dijo que el gobierno ha hecho grandes esfuerzos en el tema de la inseguridad y envió sus felicitaciones al ministro Miguel Rodríguez Torres. «No solo lo ha hecho en Lagunillas (…) sino en todo el país. (…) Ahí demostramos que por encima de las dificultades fuimos capaces de sentarnos nueve horas a discutir, a debatir, a buscar soluciones para devolver la tranquilidad a la gente. Ese mismo esfuerzo lo podemos hacer (…) en materia económica para que nuestro pueblo pueda ver restablecido su abastecimiento, sobre todo los más pobres».

El alcalde pidió escuchar a los estudiantes: «Usted tiene que escuchar a los estudiantes para ver cuál es el temor que ellos tienen, cuáles son los motores de su lucha. A lo mejor esos jóvenes piensan que no tienen futuro en Venezuela (…). Venezuela es un gran país que puede crear las condiciones para que los jóvenes puedan educarse, puedan trabajar, puedan levantar a su familia. Por eso yo creo que una de las cosas fundamentales es que usted ha demostrado también ser humilde porque yo lo he visto por muchas horas escucharnos a todos y no venimos a decirle cantos a usted sino a reclamarle en nombre de nuestro pueblo. Es necesario escuchar a la juventud, ver cuál es su preocupación, sus motivos».

Una estudiante de la Universidad Bolivariana, Gabriela Graterol, se manifestó abiertamente a favor de la paz pero se cuadró del lado del gobierno en su intervención. Después de ella, Alexis Romero, un pastor cristiano evangélico, participó e hizo un pedido para la paz, lo mismo que quien le sucedió, el diputado Ricardo Sánchez.

Un pastor islámico musulmán tomó la palabra para abogar la paz y a él le siguió Alberto Cudemus, presidente de Feporcina y empresario de tendencia oficialista: «Yo reconozco todas las intenciones de los discursos políticos pero allá afuera hay una sociedad que tiene desabastecimiento y la solución al problema del desabastecimiento pasa por un acuerdo con la empresa privada. Tenemos la capacidad, tenemos la gerencia, tenemos los conocimientos para contribuir a llevarle a usted y su gobierno a solventar en la resolución del problema del desabastecimiento a la brevedad posible».

Cudemus pidió considerar la posibilidad de reunir un grupo de empresarios para evaluar las causas del desabastecimiento «porque eso tiene que ser atendido de inmediato, eso no puede esperar (…), nosotros tenemos que solventarlo de inmediato».

Añadió: «Nosotros tenemos que darle al país (…) confianza en lo que se refiere a la acción que nosotros tenemos que tomar para que los actores económicos y sociales puedan trabajar con tranquilidad y sepan la dirección en la que nos vamos a llevar para poder solventar los problemas que tenemos».

Pidió, asimismo, detener la emisión de dinero inorgánico y fomentar una interacción más estrecha entre la empresa privada y la sociedad.

La última solicitud de Cudemus fue la más larga: «La permisología está deteniendo y fomentando el problema del desabastecimiento ya que son alrededor de unos 9 o 10 permisos (…) que disminuyen la velocidad en que podemos avanzar para solventar los problemas y mantener el sistema productivo trabajando». Sugirió la posibilidad de extender un plazo y detener algunos permisos para poder garantizar el abastecimiento porque de alguna manera u otra es demasiado engorroso el sistema burocrático que hemos venido creando». Asimismo, se manifestó en contra —sin decirlo abiertamente— del decreto del 27 y 28 de febrero como días feriados.

Tibisay Lucena, presidenta del CNE, también intervino. Pidió decir «contundentemente no a la guarimba, no a las barricadas, no a las trancas de calles porque eso produce muchísima violencia».

Añadió: «Aquí hay libertad para protestar, lo que no hay y no puede haber es libertad para vandalizar. Y ante eso yo los invito a todos los que estamos aquí (…), a que cada uno de nosotros nos hagamos instrumentos de paz y comenzar a decir no al vandalismo, no a trancar las calles, no a convertir las zonas donde hacen las guarimbas (…) en guetos».

Miguel Trussman, representante por la comunidad judía, manifestó que también ha trabajado intensamente por la paz del país, al fortalecer el diálogo interreligioso y colaborar en la comisión presidencial para el desarme. Pidió moderar el lenguaje a la hora de referirse a quienes son de una tendencia política u otra. «Todos somos venezolanos; no son ellos venezolanos y nosotros venezolanos. Todos somos venezolanos y por lo tanto eso es un término violento. Tratemos nosotros de desechar ese lenguaje político que lo que hace es generar más división entre nosotros».

Layla Succar, modelo y artista, dijo que los artistas quieren «trabajar y construir, y no destruir». Agregó: «Seamos un instrumento de tu paz (…). Cada uno de ustedes recuérdenlo; cada uno, desde su trinchera, sabe cómo puede ser instrumento de paz (…). Hoy estamos demostrando al mundo lo maravillosa que es esta tierra llamada Venezuela».

El presidente tomó la palabra al final para informar que Jorge Arreaza estaría al frente de la comisión gubernamental para la instalación de la conferencia por la paz. Manifestó sus deseos de instalar mañana mismo una comisión para la paz pero enfocada en el área económica.