No todo son autos de carrera y yates. Para los ricos, ser dueño de un jet privado es must para formar parte del club. Especialmente en Venezuela, uno de los 10 países con más jets privados en el mundo de acuerdo a The Wealth Report 2017 realizado por Knight Frank y difundido por Forbes.

El reporte mide las tendencias de la riqueza y los bienes anualmente, y las influencias que los UHNWI –Ultra high-net-worth individuals, o personas de muy alto valor patrimonial– que poseen un valor neto de al menos 30 millones de dólares, marcan en la economía.

El país caribeño tiene 340 jets privados en funcionamiento, según la cifra de 2016, y es el séptimo país en el mundo con mayor número de aeronaves destinadas al sector privado.

Aunque Venezuela, el país que vive una crisis económica desde hace algunos años, tiene más jets privados que Francia (227) y Australia (193), el aumento de estos desde 2006 es el menor de los países en la lista. Solo 22 aeronaves han sido adquiridas por venezolanos en la última década. El crecimiento de 7% dista enormemente del de China, que ha aumentado su piscina un 347% y se ubica en el puesto ocho del ranking.

Para los ricos residentes de Latinoamérica, la aviación privada es una forma de evitar el riesgo de ser secuestrados, dice el reporte. El 40% de los latinoamericanos optan por esta modalidad de vuelo.

El país con más jet privados es Estados Unidos con un total de 12,717, representando un incremento de 34 % en la última década. Le siguen México, Brasil, Canadá, Alemania y Reino Unido.

Forbes resalta que un Gulfstream 450, uno de los jets más comunes, cuesta unos $41 millones.