«El año que está por comenzar  no avisora mejoría de los indicadores económicos. Por tercer año consecutivo estamos en recesión sin que el Ejecutivo tome los correctivos necesarios para recuperar el país» son afirmaciones que se desprenden del comunicado de fin de año de Fedecámaras, pronunciado por su presidente Francisco Martínez.

«Venezuela es noticia por los actos vandálicos, saqueos, éxodo masivo de conciudadanos, calles llenas de personas buscando en la basura algo que comer, familiares que viven la angustia de no encontrar medicamentos para sus enfermos. Decenas de personas mueren cada semana víctimas de la más cruel violencia. Nuestro país muere de mengua. No es difícil vivir de un modelo económico hoy llamado plan de la patria que solo ha traído miseria y destrucción», agrega el directivo.

Martínez enumera factores  de la crisis: exceso de controles y aislamiento de los principios democráticos solo ha traido la destrucción del aparato productivo nacional; empresas trabajando al 35% de su capacidad instalada; inflación anualizada extraoficial cercana al 500%; niveles de escasez superiores al 80% y caída drástica del ingreso real de los trabajadores más de 50%.

El directivo subraya en que no existe país que logre progresar sin apoyo de los empresarios. «La empresa privad genera riqueza en una nación».

Martínez enfatiza que la «retórica de la guerra económica que insiste en usar Gobierno es una excusa para justificar errores en los que ha incurrido sistemáticamente y aprovechamiento fraudulento de lo público que arruinan la hacienda pública y fortalecen mercados clandestinos».

«Debemos exigirle a nuestros gobernantes respuestas a la altura del país», dijo Martínez. Enfatizó que «a Venezuela le hace falta líderes politicos con verdadero apego a la patria donde los supremos intereses del país deben estar por encima de las agendas personales. Requerimos gobernantes que les duela la nación, que apuesten por futuro mejor para nuestros hijos».

El presidente de Fedecamaras, en nombre del sector empresarial, insiste que no se cansarán de insistir que el sector privado es parte fundamental de la solución a la crisis económica. «Estamos dispuestos y comprometidos a contribuir en la formulación de políticas publicas que incentiven producción y faciliten el financiamiento de nuevos proyectos de inversión. Para esto es necesario que gobierno se abra a nuevos enfoques de modelos de políticas económicas».