Industria textilera prevé cierre técnico para finales de 2015
Industria textilera prevé cierre técnico para finales de 2015

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Estamos quemando los últimos cartuchos”. Así lo expresó el presidente de la Asociación Textil Venezolana (ATV), David Fihman, quien aseveró que la industria no cuenta con suficiente materia prima para garantizar su operatividad de cara al próximo año.

Fihman explicó que durante 2015 el gremio no ha recibido divisas, por lo que los fabricantes se encuentran trabajando gracias a los dólares que fueron asignados el año pasado a través de las convocatorias del Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad).

“El panorama es gris. Hemos ido agotando los inventarios. Algunos tienen más y otros menos, pero las perspectivas son muy malas y si no se produce un cambio tendremos que cerrar en 2016”, dijo.

El vocero señaló que las irregularidades con el sistema cambiario han dejado al rubro sin opciones, pues ninguno de los insumos básicos que se requieren para la elaboración de textiles se produce en el país.

“Nosotros necesitamos algodón, polímeros y colorantes y nada de eso se puede conseguir aquí”, explicó.

Pese a esta situación, Fihman resaltó que los empresarios son optimistas y esperan que a corto plazo se tomen medidas que garanticen la liquidación oportuna de recursos en moneda extranjera. No obstante, advirtió que hasta ahora no han obtenido respuestas efectivas de parte de las autoridades del Gobierno.

“Este año nos reunimos en un par de ocasiones y nos atendieron muy bien y escucharon todas nuestras demandas, pero hasta ahí”, acotó.

El representante de los textileros indicó que el sector sólo necesita $100 millones al año para mantenerse activo y asegurar hasta siete mil empleos directos y alrededor de 20 mil indirectos. “Somos una de las pocas industrias que requiere pocas divisas, pero que a cambio ofrecemos a la economía un alto valor agregado”.

 

Precios justos

La semana pasada, la Sundde publicó una providencia que establece tres renglones para la fijación de precios. Según el superintendente César Ferrer esta normativa pretende acabar con las distorsiones al establecer un margen de ganancia “justo” para los productores e importadores y así evitar la especulación y el sobreprecio.

Al respecto, Fihman refirió que la industria está dispuesta a apegarse a los nuevos lineamientos. Sin embargo, advirtió que mientras persista el problema con los inventarios no se podrá hablar de fijar precios.