El carakini, una máscara protectora contra los rayos del sol, ya no es exclusividad de las playas en China donde se popularizó la prenda.
Una revista internacional con sede en Nueva York y afiliadas en París, Roma y Londres, acaba de lanzar un estudio fotográfico con la versión carakini de alta costura.
La prenda, utilizada por primera vez por mujeres como un complemento a sus trajes de baño en la ciudad oriental de Qingdao, China, ahora se está convirtiendo en un fenómeno global.
Lo que antes parecía una máscara macabra inspirada en la película «Spiderman», cobra todo el aspecto de glamour y misterio típicos de las pasarelas o de uno sofiscticado cóctel frente a una piscina.
La transformación del carakini
La revista de modas de Nueva York CR Fashion Book, fundada por la exeditora de Vogue Paris, Carine Roitfeld, recientemente publicó una serie de fotografías con modelos de labios rojos, trajes de baño a la moda, joyas de lujo y carakinis.
CR Fashion Book resalta el hecho que la historia fotográfica representa lo opuesto al tradicional ideal de belleza, con sus modelos posando frente a la piscina con la intención de evitar al máximo la luz del sol.
La publicación reconoce que la rutina de belleza en Occidente durante el verano tiene que ver con la devoción al sol y sus rayos bronceadores, mientras que en Asia la tendencia es a blanquearse.
La transformación de lo que se considera la epítome del «estilo de mujeres viejas» en China a un artículo de la alta moda ha llamado la atención de los usuarios en internet.
El tema ha generado más de 12 millones de mensajes en Weibo, el equivalente chino de Twitter.
«Las mujeres viejas de China son el centro de la moda mundial», comentó un mensaje. «Parecen ladrones de banco asaltando la playa», se burlaron otros.
Cuando se trata de protegerse del sol, la creatividad china parece no tener límites.
También hay mangas desprendibles y capas al estilo de Batman para bloquear los rayos solares, entre una larga lista de artículos.
Blanco = belleza, prosperidad
En la televisión china abundan los comerciales de cremas mágicas para blanquear la piel. En ese país blanco es bello o, como dice el refrán chino: «Un toque de blanco sirve para esconder 100 formas de fealdad».
Un usuario de Weibo explicó que el ser blanco era señal de prosperidad.
«Desde tiempos antiguos, la belleza clásica para los ojos de los chinos es la piel blanca», dijo. «Las niñas criadas en familias adineradas podían mantenerse bajo techo, lejos del arduo trabajo al aire libre y su piel como los pétalos de una rosa blanca era señal de buena fortuna”.
Los salones bronceadores apenas están empezando a abrir en las grandes ciudades chinas, donde la influencia occidental ha logrado penetrar más.
Liu Yupu, el autodenominado «rey del bronceado» en China, reaccionó con cierto escepticismo ante la popularidad del carakini.
«En la actualidad, si acabas de salir de un salón bronceador en China, tus padres y amigos cercanos puede que te llamen idiota, pero también puede que recibas una cantidad de cumplidos», expresó.
Pero, ¿podrá una mujer bronceada atraer tantas miradas como un carakini en la playa de Qingdao?
