No hubo función por Francisco Ibarra Bravo - Runrun
Sendai Zea May 29, 2013 | Actualizado hace 11 años
No hubo función por Francisco Ibarra Bravo

Subasta-de-dólares

La gente se quedó esperando vestida y alborotada. Lo había anunciado nada más y nada menos que el Presidente de la República: el SICAD sería reactivado “con mucha fuerza” la semana pasada. El anuncio lo había hecho desde Táchira, done comentó que había hablado con Merentes para indicarle la necesidad de reactivar la entrega de divisas. No mencionó a Giordani, esos problemillas mundanos no están para la atención de una mente tan dada a las abstracciones.

La semana transcurrió  sin que hubiese la esperada y anunciada subasta. No fue esto lo único que se esperaba y no llegó; tampoco llegaron los números de del BCV sobre el primer trimestre del año. Algo debe estar pasando en el BCV para que se estén retrasando las entregas de las cifras, en otras ocasiones ha ocurrido con la inflación. A media semana el vicepresidente de CADIVI, José Khan, indicaba que no habría subasta porque se estaba ajustando el mecanismo, en particular la tasa. Debemos recordar que en la pasada subasta el precio de corte no fue publicado.

La idea detrás del SICAD no es mala, lo realmente ingenuo es pensar que si el sistema funciona realmente como una subasta se va a poder fijar el precio del dólar en un valor cercano al oficial. El control de cambio parece estar haciendo agua por diversos motivos. Uno de esos motivos es el entramado de trámites para poder acceder a las divisas. La negativa del Gobierno a asignarle un valor al dólar medianamente sensato es la causa fundamental del desastre en la asignación de las divisas. El SICAD puede ser una alternativa para flexibilizar el control de cambio si se adoptan medidas para garantizar que las divisas fluyan a los sectores que los necesitan. El costo de ello será el de permitir un tipo de cambio muy superior al actual. El Gobierno está corriendo contra el tiempo y contra la realidad. En algún momento se tendrán que pagar los costos del desastre económico y esos costos serán en gran parte devaluación e inflación. El tema no es si esto llegará sino cuando. Si se siguen postergando los ajustes y se siguen retrasando las necesarias medidas, al final solo terminaremos agravando el problema. Es la hora de la sensatez.

Habiendo dicho lo anterior, hay otro punto que tenemos que desatacar: no se puede poner al Presidente de la República a ofrecer algo que no se va a cumplir. En materia cambiaria los anuncios generan expectativas. Estas expectativas pueden ser positivas o negativas y pueden ser un instrumento para generar condiciones favorables respecto a la entrega de divisas. No puede el Presidente de la República dilapidar la escasa credibilidad que tiene, haciendo anuncios que luego no se cumplen. Es hora de que se tomen las decisiones adecuadas y que también exista un buen manejo comunicacional para ayudar a que los sectores productivos puedan formarse expectativas sobre el acceso a las divisas. En las últimas semanas se han producido reuniones entre el Gobierno y diversos sectores productivos. Estas reuniones son positivas, no entro en este caso a discutir cuál es la razón de que estas reuniones se estén dando, lo importante es que el país las necesita. Para poder resolver el problema del abastecimiento que actualmente vive el país los empresarios deben poder formarse expectativas sobre el acceso que tendrán a las divisas. Hacer anuncios y luego no cumplirlos erosiona la credibilidad del Gobierno en esta materia, mucho más cuando estos anuncios vienen del Presidente.

 

Francisco Ibarra Bravo

@franibar10