Los primeros 100 ó 1000 días por Alexander Guerrero E - Runrun
Los primeros 100 ó 1000 días por Alexander Guerrero E

Cualquier ejercicio de implique toma de decisiones pasa por un tamiz que exige e implica una ruta de optimización; su consideración requiere que se tenga en blanco y negro el cuerpo de restricciones, es decir, las fronteras de los costos a los que hay lugar. En lo económico, los ajustes, sus costos de transacción asociados; y en lo político, sus costos por aceptación o rechazo en la opinión pública. Unas de ellas tienen que ver con el estado de las cosas y la ruta transcurrida, y otras tienen que ver con la coyuntura, entre ambas se definen los costos y beneficios -de lo posible; con la debida advertencia, que los costos son como los precios absolutamente anticipados por la gente.

I. Restricciones Fundamentales en pagos internacionales y fiscales

A. Pagos internacionales: en la balanza de pagos

* La actual situación de balanza de pagos y fiscal es de crisis, es decir, restricciones en la balanza de pagos por déficit en cuenta corriente, lo cual es aún peor en condiciones de control de cambio por el cerrojo en la cuenta de capital que implica el control de cambio.

* Esa extrema situación de pagos se debe a la caída de los valores de exportación del petróleo y a la caída de la producción y capacidad de refinamiento.

* Una de las prioridades es desmontar el control de cambio para permitir que la balanza de pagos por cuenta de capital se liberen los flujos para que una cuenta pague la otra:

 

B. Pagos fiscales, la balanza financiera de la Republica, el fisco: un déficit fiscal

* La situación fiscal, se deriva de la de balanza de pagos (el síndrome de los déficits mellizos), y en nuestro caso aún más marcado, los dólares por exportación de petrolero, convertidos o no en reservas internacionales, pagan las dos facturas, los déficits en la cuenta corriente de la balanza de pagos y una parte sustancial del ingreso fiscal (un presupuestado 55% para el 2013, caerá fuertemente este año), es acá donde se puede observar a la devaluación (léase impuesto inflacionario) y la manera como el gobierno financia el déficit fiscal, de allí es escenario hiperinflacionario en el cual nos encontramos.

* Sin olvidar que un déficit fiscal es siempre producto de una expansión del gasto público el cual sería esencialmente financiado con emisión de deuda, y en el caso nuestro en los últimos cuatro años con copiosa emisión de bolívares de papel y digitales por parte del BCV. Este se sirve por una vía de «caminos verdes» que permiten financiar el déficit del gobierno.

* Así, acotamos las dos grandes restricciones por las cuales pasa la economía venezolana en los actuales momentos y por unos cuantos trimestres, en el futuro cercano, este será el desiderátum, la balanza de pagos por caída de los valores de exportación y por el deterioro de las condiciones que respaldan esos valores, acuerdos, multilaterales, bilaterales entre Venezuela y sus clientes. Eliminar la política incorporada en esos acuerdos es vital en términos de balanza de pagos y fiscales.

C. La restricción política:

El discurso político redistributivo ha emboscado la toma de decisiones en materia de política económica y economía política, al menos en el discurso político, es lo que se deriva del discurso de Capriles, real politik, dicen algunos. Más allá de las razones, es un hecho institucional insoslayable que limita los grados de libertad que requiere un gobierno para poner la casa en orden, es decir, para arreglar los mecanismos de pago y sobre todo para que los reales alcancen en un entorno de grandes carencias materiales y restricciones en los ingresos.

 

D. El entorno económico derivado de senda restricciones:

Es fuertemente recesivo, la devaluación y las dos crisis mencionadas adelantan una severa contracción de la economía que estimamos -ceteris paribus- en -5.5% . Esta no tiene fuentes para crecer hasta no se establezcan reglas y se liberen las restricciones por escasez de pagos interno y externo, y esto pasa por la eliminación de las distorsiones de los precios relativos, entre ellos el precio del dólar y el control y regulación de precios de bienes y servicios.

Hacerlo o no hacerlo, si es que se le piensa así, cae en la imposibilidad de los falsos dilemas. Si los precios no se ajustan no habrá oferta de bienes y servicios, la contraparte es escasez y desde luego inflación. Por ello, mientras rápido se tomen esas decisiones menos costo llegara a los bolsillos de la familia.

 

II. ¿Qué hacer y como hacerlo?

La acción de gobierno en dos áreas: la economía política -reglas, regulación, libertades- y la política económica -ajustes de precios y cuellos de botella.

En la Economía Política

* Hay dos áreas, básicamente de acción del gobierno, el discurso político y acción desreguladora dirigida a aclarar el rol de las reglas de juego, las normas, el respeto a los derechos de propiedad, el estado de derecho y el marco jurídico sobre el cual descansaría el discurso del Presidente electo. Si es Maduro, todo seguirá de igual a peor.

* Pero como creo que será Capriles el discurso deberá tonificarse hacia el restablecimiento del estado de derecho en lo económico, esto descansa sobre un marco jurídico donde el pivote institucional básico es el respeto a los derechos de propiedad, las libertades económicas y el lucro, todo ello tratando de capitalizar sobre la confianza (trust), se trata de llamar la atención que en adelante, el gobierno tendrá muy pendiente que la prehistoria del capitalismo y el mercantilismo, la agenda de gobierno de Chávez y Maduro, no es la agenda del futuro.

* Hay que decirlo, y con volumen alto, durante 14 largos años, la opinión pública internacional solo conoció violencia institucional, violación de contratos, escraches al estado de derecho y la ruina de un marco jurídico. Para que nos vuelvan a creer, habrá que proponérselo como propósito político y pedagógico, para que nos entiendan los nacionales y los internacionales que en adelante seremos como todos aquellos países que donde el desarrollo económico es visible. En conjunto, todo eso será el área de las reglas, de la economía política.

En la Política Económica y el ajuste de precio, la eliminación de las restricciones de oferta.

* La otra área, es la que define el marco de la política económica y los ajustes a que haya lugar. En una economía reprimida en precios, tanto por instrumentos jurídicos, leyes y decretos, como por el discurso y el curso de la política (en nuestro caso el de una revolución) es muy posible que los precios tengan que ajustarse, habida cuenta que los cuellos de botella en la oferta de bienes y servicios de procedencia nacional están obstruidos por los controles. Estos deben ser desmantelados a la brevedad. Los falsos dilemas deben eliminarse, no generan decisiones óptimas.

* No hay otra manera de trasmitir confianza y confianza. El timming de esta medida, es una discusión de tino político, definida por la precariedad del marco democrático y por la violencia de la propia política.

Desmantelar el régimen de controles es algo que puede ocurrir gradualmente, lo importante para los mercados es que el marco jurídico cuadre en la defensa de los derechos de propiedad.

* Nota, la defensa de los derechos de propiedad es el mensaje que quienes gobiernan no están en las antípodas de lo civilizatorio, como el actual régimen, y que en todo caso, el propósito de mediano plazo es el restablecimiento de las garantías economías, el marco jurídico y el estado de Derecho. ¡Las señales en este sentido deben ser no-ambiguas!

* En cumplimiento de las políticas para las dos áreas mencionadas, sugiero asistir al FMI para solicitar ayuda financiera y de reservas internacionales. Afortunadamente las cláusulas de condicionalidad han sido retiradas por este organismo. Pero sigue funcionando como bombero de última instancia. Allí es posible obtener unos 7000 MM USD para financiar la reapertura de la balanza de pagos. El FMI, hoy resuelve en estos términos sin que el país tenga que liberar los controles de cambio en el corto plazo.

* Para Venezuela en la coyuntura, el petrolero es lo fiscal y los mecanismos de pagos externos (importaciones, exportaciones, servicios y rendimientos) en la balanza de pagos. Acoto que numerosas empresas internacionales tienen sus utilidades represadas por CADIVI desde hace más de siete años, allí hay una cola de dólares en salida que puede estar en los 8000 MM USD. Por ello el desmantelamiento del control de cambio habrá que hacerlo en comunión con el FMI, organismo que hoy no supedita su asistencia financiera a cláusulas de condicionalidad, como la que se aplicó a Venezuela en Febrero de 1989.

* Ahora no habría necesidad de condicionar nada de los que ellos puedan ayudar. Acoto, ya Chávez recibió del FMI en el 2008 unos 3000 MM USD desde FMI como «cuasi asistencia» para la balanza de pagos de fondos que pertenecían a Venezuela. El FMI los facilito para mejorar los niveles de liquidez internacional, que estaban deprimidos por la crisis financiera del 2008.

En lo petrolero.

* En esta área, las cosas podrían ser más fáciles, netamente operativas. Se trata de re-establecer la soberanía sobre los acuerdos que existe con Petro-Caribe, Cuba, China, y ninguno de esos países tendría que mostrar resistencia.

* Hay que rediseñar los acuerdos con China. Será en el futuro cercano un cliente prioritario por crudo (de acuerdo a la refinería que allá se construye para refinar petróleo venezolano) y gas oíl. Lo que habría que ordenar es que el acuerdo debe perder la función fiscal y revertir a PDVSA sus funciones y regalías, y que esta entonces pueda cumplir el ritmo de contribución fiscal adecuadamente.

* Acá opera una restricción que hay que buscar la manera de reestructurar. El acuerdo con China debe reestructurarse porque creo es ilegal, no en su diseño, sino que la regalía y los derechos fueron by-paseados al fisco, los fondos fiscales del petróleo deben regresar a la manera ortodoxa.

* al menos que se decida cambiar las reglas, tanto constitucionales como legales, pero algo como esto tomaría mucho tiempo. El reordenamiento de esos acuerdos, generaría un buen volumen de flujos de divisas con los cuales cubrir las obligaciones fiscales y recapitalizar la industria petrolera nacional.

* De todos modos, hay que ponerse a trabajar para destrabar el camisón legal y constitucional creado en el 2000 y que es el culpable del Estado al cual se descapitalizo la industria petrolera.

Hay mucho más que hacer, 100 días serán pocos y 1000 días es un trecho muy largo. El próximo Presidente, asesores y gobierno deberán ser creativos y abandonar los prejuicios ideológicos muy de moda, el tempo del chiripirismo, para mencionar un modelo de comportamiento político y de toma de decisiones de finales de los 90, nos trajo estos 14 años de miseria material y espátula.

www.alexanderguerrero.com

@AlexGuerreroE