Gran Bretaña elevó el viernes el nivel de amenaza terrorista de «sustancial» a «severo», lo que significa que se considera muy probable un ataque terrorista.

La secretaria del interior Theresa Mays dijo que la decisión se debía a la situación en Irak y Siria, aunque aclaró que no había informaciones que indicaran un ataque inminente. Algunas de las amenazas probablemente involucran a combatientes que viajaron de Europa en general y Gran Bretaña en particular para participar en las luchas en el Oriente Medio.

«Enfrentamos una amenaza real y seria en el Reino Unido por parte del terrorismo internacional», afirmó la funcionaria. «Exhorto a la gente a permanecer atenta y denunciar a la policía cualquier acción sospechosa».

Mays dice que la decisión del Centro Conjunto de Análisis sobre Terrorismo se basa en datos del servicio de inteligencia y es independiente del gobierno. «Severo» es el segundo mayor de cinco niveles.

La policía británica ha exhortado a la ciudadanía a que le ayude a identificar a aspirantes a terroristas después que el asesinato de un periodista estadounidense concentró la atención sobre el extremismo en el Reino Unido.

La participación de una persona de nacionalidad británica en el asesinato de Foley subraya la necesidad de identificar a quienes podrían viajar al exterior para combatir o que estén en riesgo de radicalizarse.