Lufthansa reserva 300 millones de dólares para la tragedia aérea
Lufthansa reserva 300 millones de dólares para la tragedia aérea

Lufthansa

 

La aerolínea alemana Lufthansa ha reservado a través de su consorcio asegurador 300 millones de dólares (278 millones de euros) para hacer frente a los costes derivados del accidente de su filial Germanwings en los Alpes franceses hace una semana.

«Se trata, entre otros costes, de indemnizaciones financieras para los familiares de las 150 víctimas del avión, los costes del Airbus A320 destrozado y para el gasto de personal de asistencia», explicó hoy un portavoz de la compañía en Francfurt, indicó DPA.

El portavoz confirmó así una información publicada en el diario económico alemán «Handelsblatt». El dinero será aportado por un consorcio de empresas aseguradoras liderado por la alemana Allianz.

Los investigadores llevan días recopilando información e interrogando al entorno personal y laboral del copiloto del avión para intentar esclarecer los motivos que lo llevaron a encerrarse en la cabina, aprovechando la salida del piloto, y estrellar supuestamente a propósito el Airbus que volaba de Barcelona a Düsseldorf con otras 149 personas a bordo.

Según los datos confirmados hasta el momento, el copiloto de 27 años había mostrado tendencias suicidas antes de obtener su licencia para volar y le habían dado la baja para el día de la tragedia.

Los equipos de rescate reanudaron entretanto la búsqueda de los restos de los pasajeros y de la segunda caja negra en los Alpes tras la interrupción nocturna. La gendarmería francesa señaló que la identificación de los muertos -entre los que hay 75 alemanes y 50 españoles- puede tardar varios meses.

Se sigue trabajando entretanto también para terminar el camino de acceso terrestre para vehículos 4×4 que permita trasladar hasta el lugar del accidente material pesado de desescombro.

La oficina francesa responsable de la investigación, la BEA, anunció que se centra asimismo en analizar las funciones de la puerta de la cabina de pilotos. La «lógica del sistema de sellado» es de gran interés, así como los procedimientos de entrada y salida de la cabina para tratar de reconocer posibles puntos débiles.

También analizarán los «criterios y procedimientos para reconocer situaciones psicológicas específicas».

La BEA se esfuerza por conseguir establecer «una descripción técnica exacta de cómo transcurrió el vuelo». Y para ello se basa en un análisis detallado de la grabación de voces contenida en la caja negra recuperada y otros datos conocidos.

La identificación de las víctimas podría llevar entre dos y cuatro meses, dijo el director del instituto criminalístico correspondiente de la Gendarmería francesa, Francois Daoust, a dpa. E incluso así, no se puede prometer «que se identificará a todas las víctimas», indicó, debido a la enorme velocidad con que se estrelló el avión.

Respecto del debate sobre si los médicos deberían romper su obligación de confidencialidad ante casos en que una persona tenga la vida de otras en sus manos como un piloto, el presidente de la Cámara Federal de Psicoterapeutas de Alemania, Rainer Richter, negó que sea necesario cambiar las normas.

«La confidencialidad no es un problema en los casos en que un paciente pone el peligro a otras personas», afirmó. «Los médicos y psicoterapeutas ya están autorizados a romper la confidencialidad si de este modo evitan causar daños a terceros. En los casos de vida o muerte incluso es su obligación hacerlo», subrayó.

«El problema es la dificultad fundamental de evaluar seriamente y reconocer sin ninguna duda la intención de una persona de querer hacerse daño a sí misma o en especial a terceros», explicó el presidente de la Cámara Federal de Psicoterapeutas de Alemania (BPtK), Rainer Richter.