HONG KONG (AP) — Tres líderes de las protestas de Hong Kong — dos profesores y un pastor — exhortaron el martes a que se ponga fin a las manifestaciones callejeras para evitar la violencia y llevar la campaña para reformas democráticas a un nuevo escenario.

No estaba claro si los estudiantes, que constituyen la amplia mayoría en las protestas, acatarían la exhortación.

Los profesores Benny Tai Yiu-ting y Chan Kin-man junto con el pastor Chu Yiu-ming dijeron que planean entregarse a la policía el miércoles para asumir responsabilidades por las protestas que han cerrado partes del corazón financiero de Asia durante más de dos meses.

En lugar de protestas callejeras, los tres esperan continuar la campaña a través de grupos cívicos, organizaciones comunitarias y la promoción de la democracia y los derechos humanos mediante la educación.

Los tres son fundadores del movimiento Ocupación Central que busca obligar al gobierno chino a desistir de su requisito de que los candidatos a la presidencia ejecutiva de la región semiautónoma sean aprobados por un panel designado por Beijing. Pero representan solo a una facción de los manifestantes, la mayoría de los cuales son estudiantes.

Joshua Wong, un destacado dirigente estudiantil, dijo el lunes que iniciará junto con otros dos miembros del grupo una huelga de hambre por tiempo indeterminado.

«Reconocemos que es difícil en el futuro escalar las acciones, así que además de sufrir bastonazos y gases lacrimógenos, queremos usar nuestros cuerpos para llamar la atención del público sobre el tema», dijo Wong el martes. «No estamos seguros de que la huelga de hambre presione al gobierno, pero esperamos que cuando el público conozca la huelga de hambre estudiantil, se preguntarán qué pueden hacer».

En la madrugada del lunes, la policía armada con rociadores de pimienta, palos y escudos chocó con activistas que portaban paraguas. Las autoridades los expulsaron de una zona frente a los edificios de gobierno donde acampaban los activistas.

El presidente del gobierno de la ciudad dijo que el público perdía la paciencia y que la policía seguirá «tomando medidas decisivas para aplicar la ley».