La empinada cuesta petrolera por Beatriz de Majo - Runrun

petroleo

Quien piense que el gran escollo en materia petrolera que el gobierno debe enfrentar en los meses que viene es el de aumentar el precio interno de los energéticos está viendo al país por un huequito.

En torno al petróleo hay otros temas frente a los cuales la adecuación nacional es bastante más compleja. No se trata de implantar un modelo interno de consumo de hidrocarburos que equilibre mejor las cuentas nacionales, sino de abordar la política petrolera externa e interna con criterio estratégico.

En el mundo hay transformaciones en curso que no podemos soslayar. En el negocio de la explotación de los hidrocarburosse están produciendo vertiginosos reacomodos que nos afectan y tocan de cerca nuestros mercados actuales y potenciales. La aparición en el mapa energético mundial de tecnologías válidas económica y tecnológicamente para la explotación de los yacimientos de esquistos, nos está apretando por la yugular a los venezolanos.

Países que nunca han sido petroleros tienen reservas que hoy se han tornado explotables y, entre los países que ya manejan el difícil negocio de los hidrocarburos y las empresas que invierten en él y lo operan, la explotación de yacimientos no convencionalesse ha convertido en una nueva alternativa, rentable, válida e inmediata.

Frente a estos descubrimientos, que no datan de ayer, el mapa energético mundial está mutando sin que podamos desde nuestro país hacer nada para evitar la sustitución de la energía que nosotros producimos por una que serámás barata ymas accesible para quienes han sido nuestros importadores tradicionales de crudo.

La semana pasada la Agencia Internacional de Energía publicó un informe donde aseguran que Estados Unidos superará a Arabia Saudita como el principal productor mundial de petróleo para 2017, a solo 3 años de distancia. La autosuficiencia energética de nuestro mayor comprador no llegará tan pronto, pero también según la AIE en 14 años Estados Unidos estará exportando y 5 años después no necesitará importar para sus propias necesidades.

En lo que a China atañe -nuestro otro gran comprador y socio- dos cosas son claras: una es que el suministro de crudo que le resulta más ventajoso al poderoso gigante es el proveniente de países cercanos.

Así lo anticipa la AIE igualmente cuando asegura que Asia se surtirá de gas y crudo en el Medio Oriente. La otra es que si en la mente de los revolucionarios venezolanos China continúa siendo una opción para sustituir las exportaciones a Estados Unidos, hay que prepararse para aceptar la imposición condiciones comerciales y financieras bastante más exigentes que las que han imperado hasta el presente, y que como sabemos han hipotecado el futuro de las generaciones que vienen.

El aumento del precio de la gasolina está posiblemente a la vuelta de la esquina, pero es el futuro de Venezuela como país petrolero lo que debería quitarles el sueño a los revolucionarios de hoy. Eso, sin embargo, es demasiado pedir.

El Nacional