Más filtraciones: EEUU-Rusia y el ataque a Visa - Runrun


Siguen los cables diplomáticos de Wikileaks creando tensión en la comunidad internacional. Como dije la semana pasada, este tema evoluciona a ser cada vez más profundo y más complejo.  En esta oportunidad quisiera desarrollar dos consecuencias naturales que ha tenido este escándalo: la primera es el deterioro de la relación entre EEUU y Rusia, y la segunda son los fuertes ataques  que han recibido distintas instituciones al negarle el apoyo a las filtraciones.

La estabilidad de la relación entre las potencias mencionadas guinda de un hilo fino y la información de los últimos cables simplemente le añade más leña al fuego.  Son distintos los hechos y las razones por la cual los Estados Unidos de América difiere de la Gran Rusia, pero en los últimos años han ocurrido hechos puntuales que complican el diálogo fluido entre las mismas.  La colaboración de Rusia al proyecto nuclear de Irán a través de la venta repetida de maquinaria especializada, la expansión hacia el este de la OTAN liderada por los americanos y la reciente venta de 100 misiles antiáereos de manejo individual de los rusos a Venezuela, son hechos que demuestran la soberbia tanto de los americanos como la de los rusos.

Cualquiera de esas acciones aisladas pueden generar una reacción violenta unilateral de alguno de los dos, sin embargo, por ahora, ambos están utilizando esos precedentes para tener más fuerza para negociar el uno con el otro. Eso se vio reflejado en la sufrida negociación entre Rusia y la OTAN para desarrollar el sistema anti-misiles en Europa y ahora se ve muy recientemente , gracias a un cable de Wikileaks, que EEUU le cabildeó a Visa y MasterCard, ambas empresas americanas, para que no sufrieran consecuencias adversas debido a unos cambios que iban a ocurrir en la legislación rusa.  Como se puede observar la relación entre ambos países ha tenido altos y bajos, pero la divulgación de los secretos del departamento de estado la ubican actualmente en un bache.

Mientras se pensaba que la filtración de Wikileaks  iba a afectar solamente las relaciones entre Estado-Estado, actualmente muchas instituciones han sufrido ataques cibernéticos después de negarle su apoyo a la obra de Julian Assange. Tal es el caso de Visa, MasterCard, Amazon y Paypal que al tratar de bloquear a Wikilieaks y en consecuencia su financiamiento,  los grupos de hackers agrupados llamados Anonymous tienen ya listos nuevas jugadas contra las compañías que intenten marginar a los usuarios de esta información. Uno de sus representantes le declaró a la BBC que “más gente se está uniendo, y cada vez más gente se está descargando la herramienta voluntaria botnet que permite dirigir ataques que provocan cientos de miles de visitas a las webs, que resultan sobrecargadas y  después quedan inactivas” .

Como ven el escándalo continua y cada vez con nuevos actores. Esperemos  a ver que ocurre esta semana especialmente cuando las redes sociales de Twitter y Facebook decidan asumir una posición firme al respecto.

Tomas Horacio Hernandez

Twitter: @TomasHHR

Email: thernandez@diploos.com