¿Socios o amigos? - Runrun
Redacción Runrun.es Nov 04, 2010 | Actualizado hace 13 años

La novena visita oficial del Presidente Hugo Chávez a Rusia el 14 y 15 Octubre de este año se debe analizar cuidadosamente, ya que trae como consecuencia algo más que acuerdos y convenios.  La relación entre estos dos países es cada vez más fuerte y las hábiles estrategias del mandatario venezolano a nivel internacional son cada vez más preocupantes.

Uno de los respaldos bilaterales más importantes en los últimos meses ha sido, el reconocimiento internacional de Venezuela a la independencia de Osetia del Sur y Abjasia en Septiembre de 2009. Luego de que la Federación Rusa reconociera la independencia de estos países en 2008, se  enfatizó su influencia en la zona caucásica, acción que fue rechazada categóricamente por la Unión Europea y los Estados Unidos debido al desafío que presenta la misma a la OTAN. Esta maniobra estratégica de Venezuela fue vista con gran aprecio por Moscu y promovió una gran cantidad de negociaciones económicas especialmente este año.

No es novedad que la postura oficial de Venezuela ante un hecho sea opuesta a la de Estados Unidos, pero esta lealtad mostrada con Rusia ha sido una de las tantas razones que han incentivado el comercio bilateral entre ambos. Mientras Venezuela por su parte publica en Gaceta Oficial la ley aprobatoria que promueve la alianza estratégica con la República de Abjasia, el Presidente Ruso Dmitri Medvédev  responde elogiando a su homólogo venezolano y afirma que “…así es como se comportan los verdaderos amigos”.

Los próximos meses serán críticos para Venezuela y sus relaciones internacionales.  Si en efecto se piensa desarrollar la primera planta nuclear en el territorio venezolano, es natural entonces que se coopere con los organismos competentes lo cual no siempre ha sido una virtud para el país. En este caso deberá cooperar con la Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA),  acatar todas sus directrices y respetar el Tratado para la Prohibición de Armas Nucleares en América Latina, llamado Tratado de Tratado de Tlatelolco, el cual firmó el 23 de Marzo de 1970.

Finalmente será bien interesante observar lo que hará Venezuela con el sistemas de defensa antiaéreo S-300 que Moscú no le vendió a Irán. Bien pudiera quedárselos y mantener una postura firme y coherente a nivel internacional, pero  no se extrañen que con los precedentes que tenemos y la “verdadera amistad” como respaldo este sistema termine llegando místicamente a Teherán.

por Tomás Hernández para Runrun.es

tomashernandezr@gmail.com

Twitter: @TomasHHR