La gira que realizó el pasado octubre de 2010, el presidente de la República, Hugo Chávez, lo llevó por seis naciones entre las que se cuentan algunos países con gobiernos adversos a Estados Unidos.
Si bien es cierto que las relaciones de los últimos años con estas naciones ha sido cada vez más estrecha, exceptuando Ucrania, dicho periplo, lejos de responder a una política exterior con fuerte carácter de cooperación comercial, demostró ser una gira con visibilidad política.
El saldo que quedó fueron 69 acuerdos, unos más polémicos que otros, sin embargo, el objetivo principal a pesar de la hipoteca que se está haciendo con el estado venezolano, es la impresión que quedó de dicho viaje, de reafirmar un poder político y una posición exterior cada vez más debilitada del gobierno venezolano.
El desafío de firmar acuerdos con Rusia para desarrollar energía nuclear o acordar la participación del país caribeño en el yacimiento South Pars (el más grande ubicado en el Golfo Pérsico), son algunos de los resultados de una política comercial nada novedosa, sino más bien, predecible.
La gira tuvo un lema “buscar un mundo multipolar”. Habría que preguntarse ahora, qué entenderá el presidente Hugo Chávez por mundo multipolar, cuando sus desafiantes cooperaciones internacionales se siguen soportando sobre el uso del petróleo como instrumento de negociación y su personalismo busca opacar al resto de los gobiernos. A comienzos de sus períodos presidenciales desde 1999, el petróleo fue el motor para su política exterior, hoy día, y a pesar de su cada vez más presente debilitamiento a lo interno, lo sigue usando pero ya en una situación que promueve el notorio desmantelamiento de PDVSA y la pérdida de dinero por disputas de los negocios y los procesos de arbitraje que se están llevando a cabo internacionalmente.
Por qué se debe más a una gira meramente con tinte político que económico responde a: 1) la viabilidad de ciertos acuerdos firmados, que en el caso de Bielorrusia y Ucrania son más políticos que económicos, lo que llevará más tiempo concretar. 2) La gira se enmarca días después de unas elecciones legislativas internas en las cuales el gobierno de Hugo Chávez incluso obteniendo mayoría de curules en el parlamento, no logra explicar que el respaldo mayoritario en votos sea para la oposición y no para su proyecto ideológico revolucionario. Esto ha dado pie para empezar en cara al 2012, una campaña internacional que asegure a sus socios y amigos la consecución de los acuerdos firmados y los pactos sellados a nivel internacional.
Adriana Boersner Herrera
Twitter: @diploos
