Una Ceremonia de Estado Peculiar por Milos Alcalay - Runrun
Una Ceremonia de Estado Peculiar por Milos Alcalay

Una de las ceremonias más solemnes en los usos internacionales es el Protocolo de Estado que se aplica en los Funerales de Estado, que debe estar separado de las opciones ideológicas. Es por ello que en Caracas acudieron los más variados Gobernantes, de derecha y de izquierda; demócratas y dictadores; con el fin de presentar sus condolencias a los familiares del Presidente, al Gobierno y al país.

Ante las espontáneas manifestaciones de pesar, las autoridades militares y civiles ya estaban preparadas para encausar los ríos humanos que se presentaron.Pero lo mismo no ocurrió en las ceremonias oficiales, en las que las faltas de tacto mostraron una opción politizada. Pocas horas antes del anuncio del fallecimiento del Presidente, se convoco una desconocida Comisión Política Cívico Militar de Alto Nivel integrada por Gobernadores, Alcaldes, Ministros, Alto Mando Militar, en la que de manera desequilibrada el Vice Presidente insinuó que el imperialismo e Israel pueden haber inoculado el cáncer al Presidente para luego terminar expulsando a dos agregados militares de Estados Unidos con un lenguaje inapropiado y ofensivo como si estuviera en un “circo romano”.

Pocas horas después, Maduro asumió la conducción de algunos actos fúnebres vistiendo una sudadera, que parecía la de un atleta viniendo de un campo deportivo, dando un tono de mal gusto, poca sobriedad e irrespeto a la memoria del difunto, exponiéndose a las criticas de la prensa internacional por su desalineada vestimenta.

En relación al acto central del Funeral, los tres mandatarios privilegiados en primera fila: fueron nada menos que los muy criticados Castro, Ahmadinejad y Lukashenko. En una segunda fila estaban otros “hermanos” del Alba, Rafael Correa, y Evo Morales. En filas ulteriores relegados vimos a Presidentes como el de México y Colombia, sin mencionar al Príncipe de Asturias. Se entiende que no es fácil el Protocolo Presidencial, pero menos fácil es aceptar que en el lugar de honor se le rinda un homenaje a los dictadores antes mencionados. Esa misma noche en el acto de la Asamblea Nacional se dio otro protocolo particular ya que no solo estaba presente el hermano Rafael Correa, sino dos Presidentes “fraudulentos” como lo son Lugo de Paraguay y Zelaya de Honduras ubicados provocativamente en lugares de honor. ¿Por qué no estaba el Presidente Lobo? ¿Cómo se sigue con la ficción de un “Presidente” Lugo en vísperas de elecciones del Paraguay?

Los Actos Protocolares deberían haber sido la oportunidad para marcar el inicio de la transición democrática; de la reunificación de todos los venezolanos; de la construcción de una etapa de diálogo y de paz. Pero lamentablemente se convirtió en una clara arenga electoral en la que más que un Protocolo de Estado. lo que se vio fue un “potroloco” que violó las normas ceremoniales mas elementales. Esperemos que este tipo de actuaciones no se prolongue hasta el 14 de abril, fecha de las nuevas elecciones.

@milosalcalay