La campaña de las elecciones regionales pasó prácticamente desapercibida debido a las continuas ausencias en público del presidente de la república. Cuando estas comenzaron a ocurrir, poco después de su victoria el 7 de octubre, se especulaba y se decía que tenía que descansar por la “dura” campaña presidencial. Ahí  la campaña regional agarró algo de vuelo, pero ya en noviembre las ausencias del mandatario se hicieron más prolongadas y nuevamente el tema del cáncer ocupó los grandes titulares de los periódicos, desplazando así a los futuros gobernadores. Cuando finalmente salió en televisión para confesar que tenía una recaída de la enfermedad y por ende tenía que irse a Cuba, la campaña regional como tal llegó a su fin. Es decir, a los gobernadores les robaron el show.

El oficialismo tiene una ventaja sobre la oposición porque de ocurrir una eventual campaña presidencial ya por lo menos tienen un candidato. Este candidato, Nicolás Maduro, si bien no representa a la mayoría del chavismo, cuenta con la bendición del líder rojo y de los cubanos, cosa que no puede pasar desapercibida. Pero la ventaja competitiva más importante de Maduro es que su potencial campaña ya prácticamente está diseñada. Es inevitable que los rojos no acudan a la misma estrategia que utilizó Cristina Kirchner en su campaña presidencial, cuando utilizó imágenes y frases de su difunto esposo para generar lástima y solidaridad entre el electorado.

El reto que tiene la oposición es lograr ponerse de acuerdo en un candidato único. La lógica y los 6.5 millones de votos obtenidos en Octubre indican que dado el poco tiempo para realizar una campaña presidencial, en caso de que se decrete una falta absoluta del presidente de la república, el candidato sea Henrique Capriles. Ahora bien, la candidatura de Henrique está condicionada a su victoria el 16 de Diciembre. Si Capriles llegase a perder, sus aspiraciones presidenciales lastimosamente habrían llegado a su fin. Pero la victoria de Henrique no es lo único importante en estas elecciones regionales; la victoria en el corredor electoral es fundamental para saber en donde se encuentra la oposición. De la foto final sabremos cual es la verdadera capacidad de movilización de los partidos políticos y en consecuencia cuan dura o no será la negociación para escoger a ese potencial candidato presidencial.

Toda esta discusión y dibujo de escenarios parten de la eventual retirada del protagonismo político del Señor Hugo Chávez. Enfermo o no, el hecho es que está en Cuba en una situación muy compleja. La incertidumbre tanto de chavistas como opositores es lo que predomina en las conversaciones este diciembre.

Ya tendremos tiempo para analizar cómo queda el mapa después de las elecciones regionales pero por ahora nos toca esperar porque tarde o temprano: la función debe continuar.

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